Un retroceso.

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Pov Calle.

-No sé que efecto tiene Italia sobre mi, pero está noche siento la necesidad de estar a su lado.

Le dije a milímetros de su boca, ella mordió despacio su labio inferior y ese fue el click que necesitaba para tomar sus labios con los míos.

-¿No te das cuenta cuando me cuesta resistirme para no besarte cada vez que muerdes tus labios? -Le pregunté con la voz jadeante.

-Es importante saberlo, Madame...-ella me dijo con la respiración agitada.

Tomé su labio inferior con mis dientes y tire de el, ella jadeo e inclinó su cabeza hacia atrás. Poche retrocedió unos pasos hasta chocar contra la pared de vidrio. No entendía que me estaba pasando, el porque la deseaba tanto solo quería que esta noche fuera nuestra y que ella fuese mía.

Desabroche el primer botón de su filipina bajo su atenta mirada y así continúe hasta que esté cayó al piso, tragué en seco al ver su perfecta figura, su ropa interior era negra y admito que me parecía muy sexy, la belleza de un tesoro siempre se encuentra al abrir el cofre.

-Es usted muy hermosa, Mademoiselle-Le dije sin dejar de recorrer su cuerpo con mi mirada.

-Merci, madame...pero yo también quiero tener la oportunidad de admirar su cuerpo-ella se acercó a mí, me sonrió de manera traviesa y luego desabrochó cada uno de los botones.

Ella abrió sus ojos como platos al notar mi erección, admito que estaba demasiado dura, sentía que mi cuerpo estaba ardiendo, tenía la necesidad de consumar este fuego que siento con ella.

Tomé la cintura de Poche y la pegue a mi cuerpo, tomé sus labios de nuevo con desespero, baje mis manos a sus glúteos y los aprete haciendo que ella se pegará más a mí mientras mordía su labio y escuchaba los gemidos escapar de su boca. Deslice uno de los tirantes de su brasier, acaricie su brazo y besé desde su hombro hasta su cuello en donde empecé a besar, morder y a deleitarme con el uso de mi lengua, deslice el otro tirante y luego hábilmente con una de mis manos retire su brasier haciendo que esté cayera al piso, tomé distancia para poder admirar sus pechos, mis pupilas de dilataron, mi boca se sintió seca y las ganas de hacerla mía aumentaron al ver sus pechos redondos, sus pezones de un tono claro y erectos por la excitación.

Poche no hablaba, simplemente expresaba con gemidos y eso me gustaba más.

Coloqué la mano en su pecho desnudó, ella me mi miró de arriba hacia abajo, sabía que le gustaba lo que veía, sabía que también me deseaba, su cuerpo estaba temblando y su respiración estaba agitada, deslice mi mano por en medio de sus pechos hacia abajo y luego apreté uno de ellos haciendo masajes circulares largos y cortos.

-Oh lá lá, Madame-ella gimió.

Sonreí satisfecha.

-Tiene unos pechos muy hermosos, Mademoiselle-empece a plasmar besos sobre ellos y también a dar cortas lamidas.

-Madame...

-Se que te gusta como te tocó, pero este solo es el principio-Le dije antes de meter su pezón en mi boca y succionarlo, Poche arqueó su espalda, tomé su pezón entre mis dientes sonreí y luego tire lentamente de el escuchado como ella jadeaba y acariciaba mi espalda, empecé a golpear su pezón hacia arriba con mi lengua y luego a hacer círculos, disfrutaba tanto tenerla para mí, empecé a dejar un camino de besos entre sus pechos descendiendo hacia su vientre, uff, podía sentir el olor de su feminidad, el olor a deseo y a excitación. Cuando estuve a punto de bajar sus bragas sucedió algo muy repentino.

-No, Daniela...detente, yo no puedo-con dificultad volví a la realidad, me reincorpore y me asusté al ver que ella tenía lágrimas en sus ojos, ¿La lastime? Me pregunté a mi misma preocupada.

-Poche, ¿Qué pasa? ¿Te hice daño?-Le pregunté.

Ella recogió la filipina del suelo y cubrió su pecho desnudo.

-Esto es un error, no debiste besarme, yo no debí haberte seguido el beso y sobre todo no debí dejarme llevar. Por suerte reaccione a tiempo antes de que fuera demasiado tarde y tú y yo nos repintieramos toda la vida.

Estaba confundida, no sabía que le pasaba a Poche y porque había reaccionado así.

-Ambas lo queríamos, Poche...

-Madame, olvide lo que pasó-Ella dijo en un tono desesperado y alterada.

M sentía enojada, no tanto con ella si no que conmigo, ni siquiera se porque putas pensé con el pene y no con la cabeza, le he repetido millones de veces que no me acuesto con mis empleadas y estuve a punto de tener sexo con ella, ¿Qué te pasa Daniela? Me reprendí a mi misma.

-Tiene razón, Mademoiselle, no sé qué me pasó, me deje llevar por mis tontas hormonas, soy una tonta...Excuse-moi-Le pedí disculpas por mi comportamiento.

-Daniela...-Ella trato de entablar una conversación pero yo no quise.

-Me iré a dar un baño-Le dije y me aleje de ella.

Me sentía tan tonta por dejarme llevar por el deseó. Busque rápidamente mi bata de baño y también mi bata de dormir para poder descansar ya que mañana tenemos un vuelo que tomar por la mañana.



Narrador omnisciente.

Lo que pudo haber terminado en una noche de risas, vino y sexo terminó en una noche de lágrimas para ambas. ¿Conocen el sentimiento de miedo? Ese sentimiento de estar en un terreno desconocido, para ambas el corazón de la otra es eso, un terreno desconocido en el cual no saben que les espera.

Daniela se sentía patética, sentía vergüenza y pena de sí misma, no entiende como fue capaz de haber perdido la cordura está noche. El agua recorría cada centímetro de su piel, ella cerraba sus ojos por unos segundos y recordaba la imagen de la pequeña castaña con el dorso desnudo, recuerda su aroma, lo bien que se siente sentir la textura de su piel, pero despierta repentinamente al recordar lo que la hizo salir del trance de su cuerpo "Esto es un error" vaya ahora de nuevo ella recordaba del por qué decidió no volver a permitirse amar de nuevo y es porque cuando el amor no es correspondido se siente como el propio infierno en el paraíso.

Por otro lado Poche seguía admirando la vista a través del gran ventanal, su cuerpo estaba allí pero sin embargo su mente divagaba en lo que acaba de pasar, ella tiene miedo de lo que Daniela le provoca, ella tiene miedo de volver a sentir. De alguna u otra forma ella después de que murió Johan no pudo o no quiso volver a amar a nadie de la misma forma, ella creía que su corazón fue enterrado junto con el amor de su vida, pero ahora se da cuenta de que no es así...Daniela está despertando cosas en ella, cosas que había sentido antes y cosas nuevas, sin embargo ella no ha dejado ir a su viejo amor, ella está aún atrapada en el pasado y esa herida de su ausencia que aún sigue abierta.



Pov Poche

Esta vez no puse la pila de almohadas en la cama, no tenía caso, ya ambas cruzado la línea que se interponía entre las dos.

La miré regresar a la habitación, ya tenía puesta su bata de dormir, se veía demasiado linda, se aplicó un poco de crema en la cara, yo la observaba pero ella no quería dedicarme ninguna sola mirada, ¿Dónde quedo la Daniela cálida de hace un momento? ¿Esto definitivamente fue un retroceso? ¿O simplemente confirma mi teoría de que fue un error?

-Bonne nuit, Mademoiselle-Ella me dijo mientras me daba la espalda para dormir.

-Bonne nuit, Madame-Le respondí con un poco de nostalgia.

¿Porque esto tiene que ser han difícil?, Porque simplemente no puedo olvidar todo y empezar de nuevo, si tan solo te hubiera conocido antes Daniela todo sería muy distinto.

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¡Hola mis bebés!

Ya se lo que están pensando, no coloqué maratón porque únicamente pude escribir dos capítulos, el problema es que ya no tengo capítulos de reserva 😅 y que además me enferme durante el fin de semana por lo que me fue difícil escribir estos capítulos 🥺 les debo una disculpa este fue un caso fortuito.

Ahora les subiré el otro capítulo, espero que les guste y que puedan disculparme 🥺

Cóseme Donde viven las historias. Descúbrelo ahora