Capitulo 4

487 17 1
                                    

CAPITULO 4

SAMANTHA

—Años atrás—

El primer día de secundaria es un fastidio.

Ninguno de nosotros queremos estar aquí, ayer nos acostamos demasiado tarde y nuestros hermanos no dejaron de molestar en la mañana para venir con ellos al instituto.

Aunque debo admitir una cosa, estar sin un uniforme obligatorio es divertido. Margery y Gregor decidieron venir con sus prendas usuales que solo les veía fuera del colegio y yo intenté un nuevo look. Quiero ser alguien diferente ahora.

Antes tenía miedo de lanzarme y arruinar las cosas, pero desde ese día en la feria con Gregor, donde dejé que un desconocido me besara, una parte de mí se despertó, ese lado atrevido que siempre quise dejar salir, pero temía ser juzgada por todos.

— Qué lindo. — dice mi hermana mayor como si fuera una madre orgullosa, mirándome desde el asiento del copiloto — Nuestros hermanitos van a comenzar la secundaria.

— Un lindo viaje de sufrimiento. — dice la hermana de Gregor con ironía, mirando su teléfono en el asiento de atrás.

Teníamos la camioneta de la mamá de Margery que es lo suficientemente grande como para ir todos nosotros al instituto sin la necesidad de usar dos coches. Max estaba en el asiento del conductor con su aura usual de chico de película americana sensual, mi hermana estaba en el asiento del copiloto con sus ropas coloridas y el cabello planchado a los costados de su rostro. Y la hermana de Gregor, que vino por órdenes de su padre y por su hermano que quería molestar, estaba en los asientos plegables de atrás, con su ropa negra de siempre. Al menos ella no ha cambiado de los tres hermanos mayores desde que los conocí.

— No los espantes, Gabi. — ríe Max, estacionando el coche en las afueras del instituto donde hay lugares vacíos.

Su hermana apenas y se inmuta, está dormida en mi hombro, sentada entre Gregor y yo.

Gregor vino con ropa casual, aunque su cuerpo desarrollado no lo ayuda a lucir como tal. Desde ese día en la feria hasta acá, él ha estado entrenando duro y ahora tiene una complexión similar a la de Max que tiene casi diecisiete años. Además, que los lentes Ray-Ban que tiene puestos para ocultar las ojeras lo muestran como todo menos un adolescente normal.

Margery al menos tiene su chispa de siempre, con sus shorts azules rasgados y la camisa de arcoíris que le llega a los muslos. Ella también está hecha toda una adolescente hermosa, con las mejillas sonrojadas y el cabello a la altura de su cintura, como yo.

Y yo, bueno... intenté usar pantalones ajustados y un top azul bebé que resalte el color de mi cabello y el maquillaje leve que apliqué en mi rostro. Mi hermana estuvo emocionada al verme salir de la habitación en la mañana.

— Bien. — suspira Max, apaga el motor de la camioneta y nos mira desde el asiento del conductor, sonriendo. Es un hombre demasiado hermoso para mis hormonas revolucionadas, lástima que es mucho mayor que yo — No vamos a llegar con ustedes para no molestar, así que bajen primero.

— Querrás decir para que tus fanáticas locas no se le lancen encima a mi hermano. — bufa Gabriela en el asiento trasero.

Asoma su rostro entre los asientos y le sonríe a su hermano con malicia. Este le gruñe con su humor usual de cascarrabias, ignorándola.

Max es el capitán del equipo de fútbol, es normal que su popularidad nos ahogue si llegamos con él. Incluso la chaqueta del equipo la tiene puesta ahora. Y mi hermana, bueno... ella es la típica chica que le cae bien a todos, ya perdí la cuenta de las fiestas que ha organizado en casa cuando nuestros papás no están y yo me encierro en mi alcoba a estudiar.

Enamorada del CEO ImbécilDonde viven las historias. Descúbrelo ahora