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Emma está en la mesa, su madre reza mientras ella sólo guarda silencio

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Emma está en la mesa, su madre reza mientras ella sólo guarda silencio. La chica siente un nudo en el estómago, quisiera tener algo de confianza con su madre, pero sabe de que sólo sería juzgada como si fuera una prostituta.

—¿por qué no rezas? —pregunta la mujer.

—Rezo en silencio— miente Emma.

—Deberías estar rezando como yo. Has llegado tarde, sólo el demonio sabe qué cosa hacías—la mujer la mira de manera lapidaria, y la chica siente el remordimiento comiéndose su estómago y su mente. A su cabeza sólo llegan flashbacks de Eddie, puede sentirlo sobre ella, recuerda las sensaciones, recuerda el dolor casi placentero, como si fuera una masoquista. 

—Ya te dije, cosas en la escuela—se limita a hablar mucho, no cuenta mucho sobre su día, no relata más  acerca de su mentira, sabe que el diablo está en los detalles—me demoré algo más por eso.

— Ha venido Inez—la mujer arquea una ceja— ¿Siguen de amigas?

—Algo así— Emma suspira.

—Esa chica tiene la semilla del diablo y lo sabes, esa chica sólo busca corromper tu inocencia. Ella te llevará por el camino de los hombres, lo sabes— Emma juega con sus manos, no come, sólo ve su plato enfriarse— Terminarás siendo una ramera.

—Cállate mamá, por favor, cállate— Emma mantiene la tranquilidad, aunque sus ojos se llenan de lágrimas— No quiero seguir escuchando eso.

—El pecado llegará a ti y lo sabes— la mujer lo dice con los ojos cerrados— Rezo por ti todas las noches, para que los hombres se alejen de tu cuerpo, ellos huelen a las chicas vírgenes como tú. Un día un idiota intentará robarse tu inocencia, y debes decirle que no. Sólo Dios es dueño de tu cuerpo — La mujer lo dice como si estuviera rezando. Emma siente incluso algo de miedo. Ama a su madre, pero ¿Cuánto es capaz de tolerar el amor? 

Emma se para de la silla, lo hace de manera ruidosa. 

— Emma Ophelia Sheridan ¿Qué haces?—pregunta la mujer.

—Me hace mal estar contigo— la chica la mira con sus mejillas húmedas después de tanto llorar. Ha sido un día extraño, en la bañera, se ha estado cuestionando todo lo que ha pasado en su día. Perdió su virginidad con Eddie, lo hizo más rápido de lo que tenía presupuestado, y ella sabe que lo ha amado por años, pero las dudas atormentan su mente que apenas conoce el mundo real. ¿Y si ha estado idealizándolo todo este tiempo? ¿Y si su madre ha tenido razón todo este tiempo? ¿Si Eddie sólo buscaba acostarse con ella para luego dejarla a su suerte? 

Emma sabe que su madre está ciega, sabe que no puede dejarse envenenar la mente, lo ha hecho con Inez, ella es más fuerte, se lo repite constantemente.

<<Eres fuerte Emma, puedes con esto>>—piensa.

<<Eddie no debe por qué ser como el resto>>—Nuevamente lo repite la chica.

sorry, I'm late sweetheartDonde viven las historias. Descúbrelo ahora