Pov T/n
Ha pasado 1 mes y Lizzie llega tarde a casa casi siempre. Sé que es por el trabajo que tiene pero cuando tiene un poco más de tiempo lo utiliza saliendo con sus compañeros de trabajo. No quiero sonar como una persona tóxica, sólo siento que ya no soy opción para sus planes. Habíamos discutido por lo mismo hace un par de días, y ya no quiero volver a tocar el tema.
Hoy estoy nuevamente sola en casa, viendo una película y tomando un poco de helado en el sofá. No tengo mensajes de Lizzie desde la mañana, la extraño mucho.
No entiendo qué fue lo que cambió, semanas atrás estuvimos hablando de cosas bonitas, de nuestro futuro, de sus inseguridades y miedos..
Mis canciones están en proceso, las dejé de lado un poco para poder pasar tiempo con mi novia, pero veo que para ella es mejor salir con amigos, y no está mal, no digo eso, sólo que, bueno, salir siempre con tus amigos y dejar de lado a tu novia... Eso puede ser un poco molestoso.
No le estoy prestando atención a la película, estoy pensando todo el tiempo en ella y en su comportamiento. Me enoja mucho sentirme así.
Cuando la gente cambia conmigo mi mente empieza a crear escenarios horribles, escenarios que pueden hacerme dudar, que pueden quitarme lágrimas. Hoy mi mente quiere jugar conmigo.
Lloro mientras sigo con ese helado tan delicioso, y veo la televisión como si de verdad lo estuviera haciendo. Todo está un poco mal. ¿Estoy siendo muy dramática? No lo sé, pero duele mucho.
Escucho mi celular sonar, miro la pantalla esperanzada, pero no es ella. Contesto y trato de disimular.
- Hey -escucho la voz de mi amiga.
- Heey -le copio y me limpio la cara con una mano, mientras el helado queda en la mesita que está en frente.
- Quiero saber cómo se encuentra mi talentosa chica -suelto una risita. Vic es una gran amiga, y la quiero tanto. - Ayer te escuché rara, hoy también.
- Estoy bien, sólo necesito que mi mente logre callarse por un momento.
- ¿Se puede saber el motivo?
- Bueno, sobrepensar es horrible... -me quedo callada por un segundo, mis lágrimas quieren volver a salir.
- Cariño, ¿quieres hablarlo en persona? Sé que te está pasando algo, puedes contar conmigo, lo sabes -la escucho preocupada y mi corazón se aprieta. - ¿Quieres que vaya mañana? Podemos ir por un café, al parque, donde tú quieras -esa atención es la que deseo, pero no de Vic.
- No lo sé -no he querido salir, no tenía muchas ganas.
- Por favor, te prometo que haré de todo para que mañana sea un buen día para ti -la noto sonreír y hago lo mismo. Siempre se sale con la suya - ¿Qué dices?, ¿aceptas un día con tu hermosa amiga Victoria Pedretti? -suelto una risita y acepto. Ella me ha ayudado bastante en todo, y para ser sincera, su presencia me hace sentir muy protegida.
Escucho la puerta principal abrirse, yo sigo con mi helado y ahora sí me quedé concentrada en la película que está buenísima.
Risas ingresaban por los pasillos, una era de Lizzie y la otra era de... su compañero de trabajo. El chico le llevaba a mi novia como podía, ambos estaban ebrios y creo que ni se dieron cuenta que la televisión estaba prendida.
- Shhh, vas a despertar a mi novia -susurra Lizzie mientras sigue con sus risas. Me molesta como éste hombre le toma de la cintura.
Me coloqué en el primer escalón de la escalera para frenarlos, carraspeo con los brazos cruzados. La rubia se calla inmediatamente y sabe que está en serios problemas.
- Hey, nena -dice y no puede apoyarse sola- Yo... él -le señala a su compañero- Bueno, me iba a llevar a nuest... -hip- nuestra habitación... Pensé que estarías durmiendo -nunca ha llegado así a casa- Mañana no trabajamos, por eso bebí un poquito -sí, que poco.
- Hola, lo siento, yo fui mala influencia -dice el chico, levanto mis cejas y sonrío sin ganas.
- Bueno, qué tal si vas a tu casa, déjame llevar a Lizzie -digo y mi novia se lanza a mis brazos, buscando mi boca. - Lizzie, espera -trato de mantener mi boca lejos de ella, ésta se rinde y hunde su rostro en mi cuello.
- Perdón, prometo cuidarla mejor la próxima -dice el rubio y se retira de a poco- hasta luego Lizzie, nos vemos -veo como se retira de la casa como si nada. Dios, estoy muy molesta.
- Basta -le digo a la chica que está colgada por mí. Besa mi cuello sin piedad- Lizzie, por favor -quiero llorar, y mucho, porque siento que me busca para eso y nada más - Elizabeth -se me quiebra la voz, inmediatamente se detiene y me mira. Sus ojos están cansados, sus pupilas dilatadas.
- Amor, ¿te lastimé? -observa mi cuello y me deja suaves masajes con sus manos- Lo... lo siento.
- Vamos a la cama -digo sin muchas ganas.
- Pero, ¿te lastimé? -vuelve a preguntar. Suspiro, cierro los ojos, tomo su rostro con paciencia.
- No, no me lastimaste... -bueno, en realidad sí- no tengo nada en el cuello -beso su frente- Ahora, vamos a la habitación, ¿de acuerdo? -asiente y me ayuda. La aferro a mi cuerpo y subimos poco a poco.
La ayudo a bañarse y ponerse cómoda, ambas estuvimos en silencio, Lizzie me miraba todo el tiempo, no sé cómo entender eso.
Una vez que logro colocarla en la cama, me encamino para salir de la habitación, he dejado todo prendido.- ¿Dónde vas? -pregunta curiosa.
- Iré a apagar las luces, vuelvo enseguida -estoy enojada y triste.
- ¿Podemos hablar cuando vuelvas? -sólo asiento y me retiro de allí. Sé que cuando vuelva a la habitación estará profundamente dormida.
Guardo el helado, apago la televisión, apago las luces. Ingreso junto a Lizzie y sí, se ha quedado dormida. Suspiro y voy a lavarme los dientes y colocarme ropa cómoda para ir a descansar.
La veo dormir profundamente, mis ojos se vuelven vidriosos y es imposible guardar lo que llevo dentro. Ella es tan hermosa, la extraño, la amo, la necesito.. ¿ella me necesita?
Mi corazón se rompe en mil pedazos, porque... ¿y si ella vuelve a hacer lo mismo?, ¿y si ella busca en otras personas lo que conmigo no encuentra?, ¿y si se vuelve a repetir la misma historia y yo ahora mismo soy Robbie? No, no, no, BASTA.
- Basta -susurro estando sentada en la cama, abrazando mis piernas mientras la rubia duerme tan profundamente. - No me harías eso, ¿verdad? -pregunto mirándola, pero sé que no me responderá. - No me lastimes, por favor -suplico y vuelvo a derramar lágrimas. - No... no lo hagas, mi amor, no me lastimes más. Sólo hazme saber que es lo que quieres, te juro que te lo doy -me desahogo como si me escuchara. - Sólo háblame Lizzie -la veo moverse un poco, dándome la espalda.
No logré quedarme a su lado esa noche, me quedé en la sala llorando por todo lo que me estaba imaginando. Espero que mañana ella esté mejor, espero que ella vuelva a ser la misma Lizzie que conocí, que pueda llenarme de amor, que me mime y que siempre me diga que me ama.
Estoy dependiendo de ella, lo sé, un error.
Otro caaaap! Espero que les guste. Y viene Lizzie celosa, esperen un chiquiii. Los, las, les quierooo 💗✨
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Un Amor Im(posible) - Elizabeth Olsen Y Tú.
FanfictionLa vida a veces te puede sorprender, como lo hizo conmigo. Buscando un sueño encontré otro. Si tuviera que elegir entre ambos, me quedaría con ella. Lizzie.