Era mediodía, pero las nubes amontonadas en el cielo hacían que en el interior del fuerte hubiera menos luz de lo normal. El frío obligaba a muchos a usar capuchas, de ese modo era más difícil encontrar a Avraliz entre todas las personas que entraban y salían.
Quería preguntarle por qué le dio esa carta a Ruina. Antes de irnos la noche anterior, se la entregó y le dijo que la leyera el día siguiente.
¿De dónde sacó esa información? ¿Qué tan cierta era? ¿Qué le importaba a él que Ruina supiera la verdad? ¿Provocar el desprecio de su hija por ocultarle la vida de su madre era el modo de vengarse del hombre que lo echó a patadas de la catedral? ¿O quería hacer sentir culpable al Cardenal cuando su hija cayera en depresión al enterarse de todo?
O... ¿él quería vengarse de mí? ¿Avraliz recordaba la vieja realidad?
Avraliz no estaba, pensaba en buscar a fuera. En eso, un hombre que ingresaba al fuerte acompañado de un caballo vino hacia mí.
—Héroe Matik, ¿a quién busca?
—A un hombre de cabello castaño y a una semi humana con cuernos negros en espiral.
—¡Oh! Habla de Avraliz y Kaira. Los conozco, héroe. Avraliz está en la banca vieja a las afueras de los muros.
Salí de inmediato, encontré a Avraliz sentado. Veía hacia el horizonte, hacia donde las nubes no llegaban y podía verse una pequeña porción del cielo azul.
—¡Hermano! —dijo al verme—. ¿Qué tal? ¿Disfrutas el día de descanso?
A medida que me acercaba, distinguí a otra figura que se apoyaba en el árbol. Era una kitsune de cabello dorado. Tenía cruzadas las manos y sus ojos estaban cerrados, con el ceño fruncido. Sus colas se movían lentamente y sus orejas apuntaban a nuestra dirección.
—La envió miko Murasashi —explicó Avraliz—. Cree que escaparemos antes de aceptar el puesto para no revelar el verdadero poder de los prismas. Es reservada, prefiero no provocarla, no tan pronto al menos. ¿Entonces? ¿Qué necesitas?
—¿Por qué le diste esa carta?
—Ah, te enteraste. Bien, lo que me sorprende es que estés aquí. Creí que estarías a su lado, eres su mejor amigo después de todo.
—Ya somos novios —corté—. Aprecia los esfuerzos que hago como héroe y yo la apoyo en su crecimiento como doncella.
—¡Ah! ¡Muchas felicidades! No esperaba menos de mi hermano. ¡Ja, ja!
—Responde, ¿por qué quieres hacerla sufrir?
—¡Te equivocas! Pretendo ayudar a reventar esa burbuja en la que el viejo la tiene encerrada. Sabes que ella siempre quiso conocer más de Babel.
—¿Por qué te refieres a su madre por su nombre?
Avraliz cerró los ojos por unos instantes, sonrió nostálgico.
—Porque conocí a Babel desde que tengo memoria. Siempre que la visité en las peleas clandestinas. Me trató como a su hijo, así que siempre será mi mamá. Fui el único que estuvo a su lado en sus últimos momentos, yo escarbé la tierra para enterrarla hace años.
—¿Q-qué?
—No te mentiría a ti, hermano. Como no pude traer a su hija en su último día, me encargó su última voluntad, contarle toda la verdad. Le prometí que lo haría, el Cardenal me echó de la catedral antes que pudiera hacerlo. Seis años después, estoy aquí para cumplir su voluntad.
¿De eso se trataban sus "objetivos" y sus "asuntos pendientes"? ¿Él vino al frente de la lucha contra la amenaza mundial para cumplir con una promesa?
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¿Mi deseo? ¡Ser el protagonista de este mundo!
FantasyEn la interminable lucha contra la mayor amenaza mundial, el próximo héroe debe ser aún más poderoso que el anterior. De lo contrario, Ulos y toda la vida que lo habita... morirá. Dos niños fueron entrenados desde temprana edad para ganarse el derec...