En la interminable lucha contra la mayor amenaza mundial, el próximo héroe debe ser aún más poderoso que el anterior. De lo contrario, Ulos y toda la vida que lo habita... morirá.
Dos niños fueron entrenados desde temprana edad para ganarse el derec...
Los primeros rayos del sol aparecieron a las cinco treinta de la mañana, el cielo despejado perdía una estrella por minuto. No se esperaban lluvias, era un día ideal.
A más de treinta metros de los muros del fuerte, rodeado por árboles, había una zona abierta perfecta para mantener en discreción la pelea que estaba a punto de comenzar.
El elfo Índigo había creado una plataforma con la roca más dura que pudo encontrar en las profundidades de la tierra, de veinte por veinte metros, prometía soportar cierto grado de destrucción.
—Espero que sea suficiente —susurró el elfo.
—Líder miko prometió que no usaría sus técnicas más fuertes —dijo Vinlef—, no te pongas tan nervioso. Aún no han comenzado.
Los líderes estaban sobre otra plataforma rectangular a tres metros de la arena de combate. Xilos, Índigo y Vinlef estaban a mi izquierda, el Cardenal y Ruina estaban a mi derecha. Delante de nosotros, Avraliz y Kaira veían hacia su solitaria contrincante.
La líder kitsune ya estaba en el otro extremo de la plataforma y sus compañeras también la veían en una base igual a la nuestra.
Tanto Avraliz como Kaira hicieron una reverencia.
—Es un honor, miko Murasashi —dijo Avraliz.
—Para evitar daños severos, no usaré mis técnicas Púrpura ni Celestial.
—Sobre eso, ¿podría no contenerse?
—Jo, ¿prefieres morir antes que ser enjaulado como ave?
—Sabemos cuán hábil es, confiamos en su habilidad. No nos matará, ¿por qué habría de limitarse entonces? Si no somos dignos de recibir sus técnicas más poderosas, enfrentarnos no tiene sentido.
—No prometeré nada, juzgaré si son dignos o no en el combate.
Murasashi desvió la mirada hacia el escudo en la mano de Avraliz. Cubría su puño y un poco más.
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—Se ve rudimentario en comparación con el broquel que les diste a mis compañeras.
—Je, je. Es cierto, lo hice en un día. Aunque, rudimentario no es sinónimo de inefectivo.
—El humano héroe alcanza su máximo poder con el vínculo de la sincronía completa, ¿dices que no necesitas la sincronía o las armas legendarias?
—¿Quién dice que mi broquel no es legendario?
—Las armas legendarias no se forjan en un día.
—Pero se funden en uno.
Una ventisca se apareció en medio de los contrincantes, era la kitsune rubia.