La tranquilidad de aquel piso de hospital se veía alterada por el movimiento de los escoltas, aunque Zyan no podía entender ruso, algo dentro de él parecía decirle que algo no estaba bien. Al ver la desesperación y rapidez con la que se movían, les siguió por instinto hasta la planta baja, un temor enorme le inundó al ver como el carro de su hermano seguía ahí, y su celular se hallaba roto en el piso.
—El lugar está vacío, al parecer hubo un altercado —decía un escolta mirando los restos del celular.
—¡Demonios! —Luka intentaba mantener la cabeza fría, pero el pensar que algo le estaba pasando a Ezra hacía que su sangre hirviera de ira.
—Joven Pávlov—aquellos luceros oscuros se encontraban verificando que el estacionamiento contaba con cámaras, ya que sabía que necesitarían más información de que había pasado con el beta. —Me encargaré de pedir las cintas de seguridad de inmediato.
—¿Han podido localizar a Dimitri? Estaba encargado de vigilarle, pero no he logrado ponerme en contacto con él.
—Parte de la escolta se encuentra buscándolo en el área cercana, esperamos que —su voz paró en seco al ver como uno de sus compañeros sostenía la corbata que el alfa acostumbraba vestir, empapada en sangre, al tiempo que apretaba la mandíbula y negaba con la cabeza.
—¿Robert? ¿Qué sucede?
—Le hemos encontrado, sin vida, justo al final de este pasillo, tenía múltiples impactos de bala en el cuerpo y un tiro de gracia —susurraba con voz temblorosa a Robert, el joven más nuevo del escuadrón, quien, aunque no había convivido mucho con Dimitri le admiraba, ya que este tomaba su trabajo muy en serio.
—... Дмитрий был убит (Dimitri, fue asesinado).
Aquellas palabras se sentían como un balde de agua helada, este había estado bajo su servicio por muchos años. Dimitri era una persona entregada a su trabajo, muy hábil en combate y manejo de armas, y si quien había sido capaz de asesinarlo era quien tenía a Ezra, debían actuar lo más pronto posible. Aunque sentía la perdida de Dimitri, que no solo había sido su empleado, sino un amigo fiel, no podía darse el lujo de que su mente pensara en otra cosa que no fuera encontrar al beta.
—¡¿Dónde está?! ¡¿en dónde está mi hermano?! —exigía alzando la voz Zyan. —¿¡Donde está Ezra!?
—Joven Nolan, estamos haciendo todo lo que podemos para dar con su paradero, necesitamos
—¡Pues no es suficiente! ¡No es suficiente! ¡Mi hermano no estaría desaparecido si hubiesen hecho bien su trabajo! —interrumpió de golpe, el enojo era notable en aquella voz, pero el dolor que sentía opacaba por completo cualquier otra emoción.
—Robert
—Si, joven
—Necesito al mejor hacker de inmediato, si es necesario revisar cada cámara de esa maldita ciudad eso se hará.
—Chase es el mejor en su línea, pero usted sabe que no hará nada si alguien conocido no lo solicita personalmente, aunque se le apunte con un arma o torture no cederá. Ese bastardo está loco.
—Pff —suspiró —lleven a Zyan de vuelta con su madre, me encargaré de contactar con mi hermana.
Zharia había conocido a Chase desde la secundaria, eran muy buenos amigos. Y una de las pocas personas en las que el alfa recesivo confiaba. Siempre había tenido habilidades para quebrar escudos que para cualquier otro eran imposibles, por tal razón no había alguien que fuese capaz de encontrar a Ezra en menor tiempo.
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Fragancias.
RandomMaika, es uno de los mejores miembros del club de esgrima aun siendo un omega recesivo, quien no puede evitar tener poca tolerancia a los alfas. De repente ve como su vida comienza a verse alterada por la presencia del nuevo alumno, Damián Walker un...