Volumen 4: Nuevos Comienzos. - Parte 1

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Cuando encendió las noticias aquella noche nunca imaginó el impacto que eso tendría en ella.

* - El Campamento de los estudiantes de la academia U.A. fue asaltado por un grupo de villanos. Se confirman las desapariciones de la heroína profesional Ragdoll y del Pseudo Héroe Profesional Gamma. - *

Entonces no lo había entendido completamente... no, sería más correcto decir que no lo quería entender puesto que eso significaría que él realmente...

Agitó con fuerza su cabeza poco antes de tomar su celular y marcar frenéticamente el número de su ex pareja. Cuando el tono comenzó seguido del buzón de voz, comprendió que era verdad.

Cuando la realidad de ese hecho la golpeó, todo su cuerpo entero había comenzado a temblar al ritmo que su corazón comenzaba a acelerarse. Tenía miedo. Pronto, un ataque de pánico la invadió al mismo tiempo que marcaba el número de  uno de los mejores amigos de Goku; Uesugi Fuutarou.

* - ¿Hola?. - *

- ¿Uesugi-kun?, ¿acaso ya...?. -

* - Sí, lo he visto. ¿Cómo estás?. - *

- ... ¡Claramente preocupada!. -

Exclamó con fuerza como si encontrara la pregunta del mejor amigo de Goku como lo más tonto y estúpido que alguien podía preguntar en esta situación. Rápidamente trató de calmarse al darse cuenta de que había sido un poco imprudente.

- Yo... lo siento.. es sólo que estoy muy preocupada.. ¿Sabes algo?. - diciendo esas palabras con torpeza y lamento, la joven se tocó el corazón mientras el miedo invadía su mente.

* - No... sólo lo que dijeron en las noticias; que el campamento al que había ido fue asaltado por el mismo grupo que ha estado acechando a los héroes de Musutafu. Lo siento. - *

Al final, se disculpó por su falta de información. Lamentablemente no había nada que podía hacer más que buscar información contactando con los familiares de Goku, pero sabía que ahora no era un buen momento por lo ocupados que debían estar por lo mismo.

- ... Entiendo. - Sin más nada que decir, se disculpó con Fuutarou por llamar tan repentinamente mientras cortaba la llamada.

- ¿ahora que hago?. -

Y al igual que Fuutarou, Yuuki no podía hacer nada para tratar de salvarlo.

En este mundo, aún sí tienes poder, se necesitaba valentía, coraje y determinación para usarlo como querías. Era la regla fundamental de esta nueva sociedad, después de todo. Y aunque ella tuviera alguna de esas características, carecía de la fuerza para poder moverse. Se lamentaba por ello.

Tanto esto como el incidente de hace un año le recordaban vívidamente cuán débil era.

- No puedo hacer nada. -

Eran las palabras que sonaban en su mente una y otra vez como una campana que anunciaba su incompetencia.

Cualquier cosa que se le ocurriera, simplemente no serviría de nada; llamar al hermano y madre de Goku simplemente no funcionaría por lo mismo que había pensado Fuutarou; tratar de buscarlo por cuenta propia era tan inútil que no podía planteárselo; buscar ayuda de algún otro héroe de la zona sería tan inservible como lo anterior. Al final de todo, sólo pudo rezar para que Goku tuviera la fuerza suficiente para salir de allí con vida, y con la ayuda de los héroes.

Cuando pasaron dos días desde su secuestro, su impaciencia y su miedo no hicieron más que intensificarse, y a medida que no recibía noticias de nadie, su ansiedad se incrementaba. Nuevamente, tuvo que recordar que no podía hacer nada para ayudarlo, y que lo mejor que podía hacer era esperar a que los héroes lo ayudaran.

 Goku en Go-Toubun No Hanayome Donde viven las historias. Descúbrelo ahora