Volumen 3: Preludio. - Parte 2

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Narradora:

La Luz del sol comenzó a desvanecerse con el tiempo bajo las miradas serias de dos jovenes cuyos vestuarios consistían en ropa deportiva y cómoda para la movilización de sus cuerpos; un joven de cabello verde y pecas en sus mejillas contaba con una playera de holgada de color gris junto con unas bermudas negras que le llegaban hasta la rodilla, además de sus habituales botas rojas. Frente a él, yacía un joven de cabellera negra el cual portaba un kimono sin mangas y corto de color naranja claro con una cinta de color negro y rojo sangre amarrado alrededor de su cintura, dejando el sobresaliente al aire. Además de su kimono, había una playera negra debajo de el que hacía juego con sus muñequeras y espinilleras en forma de cinta de color negro; contando a su vez con unos zapatos de combate de color negro con suela blanca.

Ambos jóvenes estaban uno enfrente del otro con expresiones serias pero a la vez entusiasmadas.

- Quiero que me enseñes todo lo que has aprendido, Izuku. - Con un tono de voz alto y fuerte, Goku procedió a adoptar su habitual pose de pelea que tanto recordaba Izuku. Así mismo, el joven peli-verde hizo lo propio adoptando una posición similar con la única diferencia de que sus puños estaban cerrados y en una posición más alta que los brazos y puños de Goku.

- ¡Sí!. - Exclamando fuerte y claro, Izuku prontamente ejerció una presión anormal en su cuerpo provocando que se tensara al máximo, seguido de eso, unas extrañas líneas carmesí comenzaron a rodearlo desde la punta de sus pies hasta su frente. - '¡[One For All: Full Cowl: 15%]!'. - Y sin espera alguna, unos feroces rayos esmeralda salieron disparados como si de una tormenta eléctrica se tratara, además de enteramente iluminado por ellas.

- ¡Vayaaa...!, la presión que emites es bastante impresionante. - Cubriendo su rostro ante el torbellino de poder que emanaba Izuku, Goku sonrió con satisfacción al ver que su hermana se había vuelto bastante poderoso. Sin embargo, se sorprendió aún más al ver cómo la energía que estaba emitiendo no era ni el veinte por ciento de toda la energía que había en su interior. Por tanto, no pudo evitar pensar en que Izuku se volvería un completo monstruo cuando dominara el cien por ciento de su poder, superándolo por mucho. - ¡Eres increíble, Izuku!. Me dejaste impresionado. - Con una sonrisa audaz, Goku continuó. - Sin embargo, ¡no me dejaré ganar tan fácilmente!. - Y sin perder un sólo segundo, Goku cambió su postura por una que había mostrado hace ya algún tiempo; sus pies separados, sus brazos al costado y con un puño como mano, su complexión más encorvada y su ángulo más abajo.

Izuku no tardó mucho tiempo en darse cuenta lo que esa postura significaba.

- ¡[Kaio-Ken]!. - Y tan pronto como exclamó eso, una fuerte onda de viento sacudió cada arbusto y tierra del suelo acompañada de una fuerte estela feroz de energía carmesí. La presión que emanaba de él era igual ó superior a la que emanaba Izuku. - ¡Vamos a pelear, Izuku!. - Volviendo a su anterior postura mientras decía eso con una sonrisa feroz, Izuku imitó la acción de Goku con su propia postura adaptaba.

Y cuando finalmente el sol ocultó su presencia en lo más oscuro del bosque en donde estaban, ambos jóvenes se enfrascaron en una batalla feroz donde dejaban al descubierto sus años de experiencia.

Izuku fue el primero en golpear a su hermano con un poderoso puñetazo proporcionado por su brazo derecho que Goku fácilmente pudo bloquear con su antebrazo izquierdo, no sin antes darse cuenta de que cada golpe que proporcionaba Izuku creaba una fuerte y destructiva onda de choque. Pero aún con eso en mente, Goku no vaciló al momento de proporcionar un rodillazo con destino a la boca del estómago de Izuku, rodillazo que falló al ser detenido por la mano izquierda de Izuku.

 Goku en Go-Toubun No Hanayome Donde viven las historias. Descúbrelo ahora