Capitulo 47

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Cuando mi madrina se acerca a mi mamá, observa a Estrella y le extiende las manos para cargarla. Mi bebé la mira sorprendida, de la misma manera en que mira a mi mamá. Estrella dirige su mirada hacia mí y sonríe.

—¿Cómo se llama la mini Teresita? —pregunta Gutberto, acercándose hasta la bebé para verla más de cerca.

—Estrella Valentía —respondo, viendo a mi bebé, quien sigue sonriendo al verme.

—Es un hermoso nombre, hija, pero me hubiera gustado que se llamara como tu hermana —dice mi madre. No digo nada ante sus palabras. Mariano se acerca a mi bebé y le toca la naricita con delicadeza, luego me mira y me extiende la mano.

—Fue un gusto verte, Teresa. Estrella es una bebé hermosa. Comenta. Le doy una sonrisa seca y estrecho su mano.

—Cuídate mucho, espero que estés bien —le digo antes antes de salir. Gutberto le sigue con una sonrisa ligera y me quedo sola con mi madrina y mi mamá. Mi corazón sigue latiendo con fuerza, sin saber qué decir ni cómo iniciar una conversación con ellas. Siento la tensión en el aire mientras busco las palabras adecuadas para romper el silencio.

Ellas siguen viendo a mi hija, y por alguna razón tengo ganas de llorar. Me siento en el sofá, y ellas hacen lo mismo. Ambas continúan jugando con estrella, mientras yo simplemente las observo.

—¿Cómo han estado? —decido romper el silencio.

—Todo muy bien, Teresa. Gracias a tu marido pude adoptar a un niño con Gutberto. Mi sueño se hizo realidad. Sin duda, eres muy afortunada —responde mi madrina.

Sonrío ante sus palabras, pero trago grueso. Mi mamá se acerca a mí y se sienta a mi lado, tomando mis manos.

—Gracias por traer a mi nieta —dice ella mientras me abraza. comienzo a llorar. Las lágrimas salen sin control, liberando una mezcla de emociones acumuladas durante mucho tiempo. Mi madre me sostiene mientras dejo salir todo lo que he guardado dentro. Es un momento de vulnerabilidad algo que nunca me ha gustado, nadie me puede ver débil odio que me tengan lástima, pero es mi mamá y me siento arrepentida por todo lo que le hice, mi madrina se acerca a nosotras y también nos abraza. —Perdón,
Digo entre sollozos mientras las lágrimas siguen cayendo.

—Tranquila hija, todo ya pasó, te perdono .

Y por primera vez en casi dos años siento que me quito un peso de encima, obtuve el perdón de la dos personas que tanto deseaba.

Pov Arturo

Miro la hora y Teresa todavía no ha llegado. Decido darme un baño para relajarme y me pongo una pijama cómoda, unos pantalones y una camiseta blanca. Salgo de mi habitación sintiéndome un poco más relajado y bajo hasta el comedor. Lore me sirve la comida, y por primera vez en casi ocho meses, voy a comer sin Teresa y sin Estrella. Eso me entristece un poco. Aunque siento un pequeño resentimiento hacia Teresa por haberme mentido, la amo y extraño la forma en que solía ser todo antes. Sin embargo, siento una espina y un miedo a que vuelva a mentirme y a fallarme. La incertidumbre y la confusión me invaden mientras intento procesar mis sentimientos y entender cómo seguir adelante en esta situación.

Miro mi celular y veo que tengo un mensaje de un número desconocido mi ceño se frunce al ver, porque se me hace sumamente extraño.

—Hola Arturo, yo sé que no me conoces pero necesito hablar contigo un tema muy importante y delicado.

—¿Quien eres?

—Soy Leonel, no me conoces pero yo sí.

El sonido de la puerta interrumpió mi atención hacia el mensaje que estaba leyendo. Levanté la vista y vi a Teresa entrar con Estrella en brazos. Nuestros ojos se encontraron brevemente, pero su expresión de enojo era evidente. Aunque intenté ignorarlo, me acerqué a ellas y tomé a la bebé en mis brazos. Observé los ojos de Teresa disimuladamente y noté que estaban enrojecidos, como si hubiera llorado.

Teresa 2 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora