Capitulo 60

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Pov Teresa

Los días han pasado y sin duda ha sido un excelente viaje, la verdad la he pasado demasiado bien y creo que por fin me siento completamente feliz, pasamos el primer cumpleaños de estrella en la playa y sin duda ella ha disfrutado más que nosotros.

No he vuelto a tener conflictos con nadie y aunque en la última reuniones Aida me tiró malas vibras la ignoré y sé que eso le arde mucho más. Sin duda ahora me doy cuenta lo mucho que he cambiado, ya no tengo los mismo objetivos que tenía hace un tiempo atrás, ahora siento una paz inmensa. Es increíble como ahora soy mamá algo que jamás en la vida me imaginé.

Mi ojos brillan al ver como Arturo carga a estrella y comienza a darle besos pequeños en su frente, estrella lo mira embobada y sonríe. Verla reír es lo más hermoso que mi alma a podido sentir, es un sentimiento inexplicable, ahora me doy cuenta que realmente la avaricia iba ser mi única perdición.

Suelto un suspiro de felicidad, Arturo de acerca a mí y me dan beso, estrella nos observa y hace un puchero, es una celosíta, ahora sin duda tengo que empezar a organizar todo lo de mi boda, la felicidad que siento es inmensa, al mismo tiempo me siento un poco preocupada, con estrella, mi trabajo, y ahora la boda será muy agotador. Pero eso es lo de menos, trataré de organizarme con todo.

......

Hoy, después del viaje, me presento en el bufete con una mezcla de emoción y al mismo tiempo de tristeza, voy a extrañar a mi bebé . Decidí darme dos semanas de vacaciones para desconectar un poco y reorganizar mi vida. Pase el mayor tiempo posible con estrella, en unas semanas ya va entrar a guardería. Compré algunas cosas para la casa y remodelé mi clóset, lo que me hizo sentir renovada. Estaciono mi auto en el aparcamiento subterráneo y camino hacia el elevador, mis tacones resonando en el suelo pulido.

Cuando llego a mi piso, las puertas del elevador se abren con un suave "ding" y salgo al bullicioso ambiente del bufete. La recepción está llena de actividad: teléfonos sonando, asistentes corriendo de un lado a otro y abogados en intensas conversaciones.

Los colegas me saludan calurosamente mientras camino por el pasillo, y devuelvo los saludos con una sonrisa. Miro a la oficina de Isabella, y no puedo evitar voltear los ojos al verla instalada en su nueva oficina. Agradezco internamente que ya no tendré que topármela cada vez que entro a la oficina de Arturo. Esa pequeña victoria me hace sonreír para mis adentros.

Decido ir a saludar a Arturo. Camino con decisión hacia su oficina, notando cómo todos parecen ocupados con sus propios asuntos. Al llegar, abro la puerta ligeramente y veo a Arturo concentrado en unos documentos. Su expresión es seria, pero en cuanto levanta la vista y me ve, su rostro se ilumina con una sonrisa cálida.

—¡Mi amor! —

—Mi vida— Me toma de la cintura y me da un sube beso.

Arturo me ofrece una silla frente a su escritorio y me siento, disfrutando de la familiaridad del entorno. Miro alrededor, notando algunos cambios menores en la decoración, pero la esencia del lugar sigue siendo la misma. Arturo deja los documentos a un lado y se inclina hacia adelante, apoyando los codos en el escritorio.

—Tenemos un par de casos interesantes que estoy seguro te entusiasmarán.

Nos sumergimos en una conversación sobre el trabajo, los nuevos casos y los cambios en el bufete.

—Tu oficina está diferente, amor —digo mientras recorro con la mirada cada rincón del lugar.

Los muebles han sido cambiados de lugar, hay nuevas plantas en las esquinas y algunos cuadros modernos adornan las paredes, dando un aire más fresco y contemporáneo al despacho. No puedo evitar notar los pequeños detalles que antes no estaban allí.

Teresa 2 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora