Teresa 2

Capitulo 49

Días Después

Voy a la casa y sin pensarlo dos veces tomo ropa para una semana, bajo las escaleras con prisa y me encuentro con Lore dándole una papilla a estrella quien me mira con el ceño fruncido. Me acerco a mi hija y la cargo dándole un abrazo —Te amo mi amor eres mi universo entero, la luz de mi vida. Le digo mientras acaricio su cabello, le doy besos en su carita y ella suelta un risita contagiándome de amor, sonrío al verla y le doy el último beso. Sin decir nada más salgo de la casa.

Llamo a Teresa pero ella no responde. Mierda pienso mentalmente, la llamo tres veces más y no obtengo respuestas, opto por dejarle un mensaje.

"Teresa saldré de la ciudad necesito arreglar un tema muy delicado he importante de tratar con referente a mateo, espero solo estar menos de 3 días, quería despedirme de ti pero sé que estás en ese caso y sé muy bien lo importante que es, cuando regrese hablamos"

Dejo el mensaje y sigo conduciendo, la ansiedad que tengo en mi pecho es insoportable, espero de verdad todo lo que me dijo este hombre sea mentira es lo único que mi mente piensa, pero algo en mi corazón me dice que es verdad solo espero estar confundido.

Pov Teresa

El caso termina y mi cliente y yo ganamos no puedo con la emoción que estoy sintiendo, un caso más siendo la ganadora, cada día estoy cumpliendo más mis metas, mi cliente me abraza y yo le doy una palmadita en sus hombro, salgo del juzgado siendo una triunfadora.

Me subo a mi auto y miro mi celular tengo como 10 llamadas perdidas, Arturo, Alexa y Lore. Mi ceño se frunce al ver que todos me han llamado, a la primera que le marcó sin pensarlo dos veces es a Lore porque ella cuida a estrella y solo de pensar que algo le pasó a mi hija me da un miedo abrumador, ella me responde al instante.

—Lore no pude responder, ¿está todo bien?

—Si señorita, solo pensé si estrella podía meterse a la piscina, yo estaría pendiente de ella.

—Si Lore está bien, pero porfa no le quites los ojos de encima ni la sueltes ni nada de eso. Solo mójale sus piecitos y que juegue un rato con el agua.

—Si señora está bien.

Cuelgo la llamada y miro que tengo mensajes de Arturo. Entro haberlos y comienzo a leer

"Teresa saldré de la ciudad necesito arreglar un tema muy delicado he importante de tratar con referente a mateo, espero solo estar menos de 3 días, quería despedirme de ti pero sé que estás en ese caso y sé muy bien lo importante que es, cuando regrese hablamos"

Al leer el mensaje de Arturo, mi semblante se torna serio y un leve sentimiento de molestia comienza a surgir en mí. Sus palabras transmiten urgencia y preocupación. La sensación de enojo se mezcla con la incertidumbre, ya que Arturo ha estado actuando de manera extraña en los últimos días, y esta repentina partida de la ciudad solo agrega más interrogantes a la situación.

Cada día que pasa, noto que nuestra relación se vuelve más distante. A pesar de que creíamos haber resuelto nuestros problemas, su comportamiento distante y su ausencia en casa durante la mayor parte del día me hacen cuestionar si realmente estamos en la misma sintonía.

Mi ceño se frunce al leer eso, todos estos malditos días ha estado raro , estoy segura que algo está pasando, no sé muy bien el qué pero lo voy averiguar, pareciera que ni viviremos juntos de lo distante que está.

Entre suspiros de estrés y frustración, también surge la preocupación por el bienestar de Mateo. Aunque mi relación con Lucía, no sea la mejor, no deseo que nada malo le suceda a Mateo. Es un sentimiento que va más allá de nuestras diferencias personales, y solo espero que Arturo esté bien y que todo se resuelva de la mejor manera posible.

Decido responderle , expresando mi enojo por su repentina partida y dejándole saber que necesitamos hablar seriamente cuando regrese.

"No sé muy bien qué es lo que está pasando, pero me siento sumamente molesta por qué no me das explicaciones de nada, y luego dices que yo te oculto cosas, cuando regreses tenemos que hablar seriamente Arturo, y quiero que me digas toda la verdad"

Pongo mi celular en el asiento y comienzo a conducir, mi mente solo piensa en que hoy quería hablar con el, mi celular comienza a sonar y miro que es Alexa, respondo al instante y ella comienza hablar —Teresa, la hermana de Arturo vino a buscarlo con mucha urgencia, no sé muy bien para qué pero le dije que se había ido.

Al escuchar eso mi incertidumbre aunmenta, no sé qué mierda está pasando pero creo que algo malo está ocurriendo.

—¿No te dijo nada?

—No nada de nada.

—Bueno de seguro le va llamar.

Pov Arturo

Habré la puerta lucia, digo con voz firme y fuerte.

—Habrela Lucia o la vamos a tumbar. Dice Leonel casi gritando.

Unos segundos después lucia habré la puerta y su expresión es de preocupación. —Dile la verdad a Arturo, lucia. Dice el acercándose a ella, mientras le habla fuerte.

Con la voz temblorosa y al borde de las lágrimas, Lucía pronuncia las palabras que temía escuchar —Perdón, Arturo. A pesar de saber que es la verdad, mi mente se niega a aceptarla. En lo más profundo de mi ser, luchando contra la incredulidad y el dolor, me resisto a asimilar la realidad que se despliega frente a mí. La confesión de Lucía sacude mis sentimientos, desencadenando una tormenta de emociones que amenaza con consumirme por completo.

Trago grueso al escucharla —No te creo, le digo mientras siento un enojo y frustración.

La noticia golpea mi ser con fuerza, dejando un nudo en mi garganta mientras intento procesar lo que acabo de escuchar. Siento cómo el enojo y la frustración se apoderan de mí. Las palabras apenas pueden escapar de mis labios mientras luchan por contener la tormenta de emociones que bulle dentro de mí.

—No te creo, murmuro con voz entrecortada, mi mirada cargada de un enojo que amenaza con desbordarse. —Perdóname Arturo, dice ella con lágrimas en los ojos.

El enojo aumenta a medida que las palabras se convierten en un torrente de furia contenida, —Me hiciste creer que Mateo era mi hijo, Lucía. lanzo las palabras con un amargo sabor en la boca, casi gritando en un intento desesperado por liberar la ira que me consume.

Las lágrimas de Lucía solo alimentan el fuego que arde en mi interior, y la ira se convierte en una vorágine incontrolable. —Habla, Lucía, exijo con voz cargada de furia, necesitando desesperadamente entender qué demonios está pasando. Mis puños se aprietan con fuerza, mis músculos tensos y mi respiración entrecortada mientras espero una respuesta que explique el dolor que me consume. Pero en ese momento, solo veo a Lucía, una figura temblorosa y vulnerable ante mi ira implacable.

—Lo siento arturo, tuve un desliz con Leonel, sentía frustración porque sabía que seguías amando a Teresa, pero te juro que yo no estaba segura si Leonel era el padre hasta que regresó y me buscó, miro a mateo y el mismo sospecho, se hizo la prueba de ADN y salió positiva, yo jamás quise engañarte, sabes que no soy ese tipo de mujeres. Ella comienza a llorar más y siento lástima pero al mismo tiempo mi alma se rompe en pedazos por todo lo que dijo, amo a mateo estoy dispuesto a dar la vida por ese niño, compartí tanto tiempo con él y el darme cuenta que no es mi hijo me duele hasta lo más profundo de mi ser y de mis entrañas.