Lydia
Es lunes en la mañana. Sí, sé que todos odian ese día, aunque la verdad cuando amas tu trabajo y con cada día tienes la oportunidad de mejorar no te pesará comenzar a las siete de la mañana. Créanme, escojan algo que los apasione de verdad y su calidad de vida mejorará.
Llego al aparcamiento del edificio y busco mi sitio señalado en este. Aparco mi coche y me cambio las zapatillas bajitas que uso para conducir por unos tacones de aguja. Aliso mi cabello corto y me retoco el color rojo de los labios. Bajo del auto y acomodo mi falda alta, eliminando los pliegues que se han formado en la parte inferior. Me dirijo hasta el elevador sosteniendo mi bolso en una mano y en la otra un vaso de café.
Pulso el botón del último piso. Cada mañana realizo la misma acción y cada día se siente mejor. El olor que desprenden las oficinas a ambientador de pino me hace sentir en casa. El aire acondicionado brotando de las puertas que se abren y cierra. Las sonrisas de tus compañeros cuando te ven pasar, todo es como una droga de la que nunca voy a tener suficiente.
Llego a mi oficina treinta minutos antes como siempre. Mi escritorio se encuentra meticulosamente organizado, y coloco una grapadora que está un poco fuera de lugar. Mi espacio debe estar impecable para mantener mi buen humor. Tomo mi café y le doy un sorbo. Mi celular suena y veo un mensaje de Bruno:
<<Buen día, papá quiere hacer una reunión hoy temprano. Y te incluye a ti, nos vemos en la sala de conferencias en veinte minutos. >>
Mi corazón da un vuelco en ese momento y no sé si estar asustada o emocionada. ¿Será para felicitarme? ¿O regañarme? ¿Habrá descubierto mi romance con su hijo? Muchas preguntas atraviesan mi mente y ya no puedo esperar que sea la hora.
Veinte minutos de ansiedad y desespero pasan y me dirijo al lugar donde se efectuará la reunión.
Observo desde fuera, hay unos cuerpos trajeados. Un hombre mayor con cabello corto, delgado. A su lado una mujer también mayor muy elegante, con el cabello de un rojo brillante que le cae en ondas. Un hombre de unos treinta años de cabello negro le dice algo a Bruno, que se encuentra en una de las cabezas de la mesa, increíblemente irresistible como siempre. Y el señor Dorian se encuentra en el otro extremo de la mesa con su característico traje de Valentino. Señal de que las personas que están hoy reunidas son importantes.
Respiro hondo, exhalo y giro el pomo de la puerta. Mi cuerpo se desliza dentro del salón y todos los presentes me miran fijamente. Dorian se pone de pie y se dirige hacia mí. Me pone una de sus manos sobre mi hombro y tira de mi hasta que quede frente a todos.
— Señoras y señores, aquí les presento a Lydia Frey. Mi mejor adquisición — alardea mientras siento que mis mejillas se encienden y bajo la mirada —. Les digo la verdad. Es muy muy buena —.Ellos son Geidy (señaló a la señora), Cris (El treintañero que charlaba con Bruno) y Ulises (El señor mayor del cabello gris). Son los representantes de la agencia Famous Land. Estaban deseando reunirse con nosotros.
No puede ser, FL es una de las mayores agencias del país. Los llaman los midas de la industria. Todo el que tenga el privilegio de trabajar por más de un año se le abren todas las puertas al mundo de la fama, los contratos son millonarios y sin mencionar las referencias que obtendría. Mi boca se hace agua solo de pensarlo.
Hago una reverencia y todos decimos “Mucho Gusto” a la vez.
—Si confías en ella…—comentó Geidy —: nos gustaría hacerle una propuesta a tu chica.
Levanté mi cabeza para verla mejor. Se notaba que era mucho mayor de cerca. Hablaba pausado y con mucho énfasis en las palabras. Su rostro parecía un poco cansado.
—Lydia —Dorian me extendió la silla que estaba a su lado y me señaló para que me sentara. Yo obedecí —. A ver, su propuesta te sacaría un poco de tu zona de confort, pero sería bueno para tu carrera.
En ese momento mis ojos se iluminaron.
—Estoy escuchando —dije y coloqué mis codos sobre la mesa apoyando mi barbilla sobre mis manos entrelazadas.
—Bien —Ulises se puso de pie y con un mando a distancia encendió la gran pantalla donde se proyectaban las ideas y las estrategias de mercado para que pudieran ser vistas por todos los participantes de las conferencias.
En la pantalla apareció una imagen de un chico que me resultaba conocida, pero no lograba definir de dónde. Al parecer se dio cuenta de mi confusión y explicó.
—El chico que ves se llama Jordan Greg o Golden J. Es un actor. Ha hecho series y películas, además de anuncios y ha sido embajador de varias marcas como Dior y Guess. Aunque bueno, a lo mejor lo conocerás por el papel de Hallinton Kennedy en la teleserie “Royal”.
Claro, eso es. Recordaba haberlo visto en la tv. Solo de pasada. No tengo tiempo en mi vida para sentarme a deleitarme con series de ficción.
—Creo haberlo visto…
—Es nuestra principal fuente de ingresos ahora mismo. Se estima que las sumas desde que lo tenemos son de millones de dólares al mes… y subiendo —a medida que iba hablando cambiaba las diapositivas para que pudiéramos verlo en los sets de grabación, con niños pequeños, ejercitándose, etc. —. El chico ha obtenido una fama desmedida, las agencias de televisión se pelean por tener, aunque sea una entrevista con él. Solo tiene 24 años —volvió a cambiar las diapositivas, pero en lugar de imágenes divertidas aparecieron noticias y titulares.
Noticia No. 1: Jordan Greg envuelto en una pelea de bar.
Noticia No. 2: Jordan Greg visto en muy mal estado y siendo llevado a rastras.
Noticia No. 3: Chica termina en terapia intensiva luego de haber estado cerca de morir por una sobredosis de drogas mientras asistía a una fiesta en la casa de Jordan Greg.
Las diapositivas dejaron de correr y continuó:
—Creo que más o menos entiendes por dónde va esto. La policía no pudo encontrar sustancias ilegales en su casa, pero igual, sabes que la opinión de las redes y los periodistas es que es un descarriado. Se han dividido dos bandos opuestos y hay incluso votaciones para que lo saquemos completamente de la industria. Como comprenderás es algo bastante grave. Podríamos perder contratos muy importantes si esta situación no se arregla.
—A ver, me encantaría ayudar. He recibido muchas propuestas para ser representante de celebridades, pero hasta ahora no he aceptado ninguna. Aunque siendo de parte de una agencia como la suya, lo tendré en cuenta. Aunque necesito tiempo para pensar.
La sala quedó en silencio. Todos se miraban uno a otros.
—Y también necesito saber, generalmente cuando una figura pública hace tanto desmadre solo lo tiran de lado y ya. Estoy segura de que han tenido pérdidas grandes desde que esto está sucediendo. Y a mi entender el chico es bastante problemático. ¿Por qué es tan importante?
—Me pueden dejar a solas con ella, por favor —pidió Geidy —. Solo serán unos minutos. Los presentes obedecieron y se pusieron de pie, dirigiéndose hacia la puerta.
—Es mi hijo —la señora se había puesto de pie y se había colocado frente al ventanal de cristal que daba a la ciudad.
Me quedé atontada. ¿Su hijo? Vamos, que no tenían nada en común. No me lo podía creer.
—Mi hijo ha tomado un mal camino, lo sé. Pero también sé que esto es sólo una etapa. Es un chico brillante e inteligente. Tengo esperanzas en que pueda mejorar. No tengo intenciones de mentirte. Esto está siendo demasiado difícil, desde que su hermano… —dudó un segundo —murió, su vida no ha sido fácil. Su padre y yo estamos haciendo hasta lo imposible. Simplemente necesito a alguien joven, que entienda los sacrificios de llegar hasta la cima. Solo alguien así puede entender la situación. No puede perder todo lo que ha logrado hasta ahora. Por eso vinimos aquí y entonces Dorian dijo que tenía la persona perfecta. Resultaste ser tú. Quiero que nos ayudes a limpiar la reputación de Jordan.
—Estoy escuchando.
—Le ofrecieron un papel protagónico en una película. Pero luego de este escándalo han cancelado la oferta alegando que su imagen está dañada. Será tu trabajo repararla. Tendrá que tomar un proyecto que no le interesaba en lo absoluto y lo rechazó efusivamente en varias ocasiones. Es una miniserie. Y para ello deben irse a la isla donde se grabará esta. Te voy a dar todos los recursos que tenemos a mano. Te harás cargo de todo el dinero que entre a sus tarjetas porque las de él están canceladas, o sea que tendrá que ganarse cada centavo. Te llevaremos todo el staff, así que no creas que lidiarás con él sola. Tus estrategias son innovadoras y efectivas, eso es lo que quiero. Y si esto sale bien puedes olvidarte de tu tesis de maestría porque te daré un puesto permanente en nuestra compañía, no tendrás que preocuparte por empleos nunca más y además del pago que será muy generoso. Esta es mi oferta. Te daremos una semana para decidir.
—Vamos a conocer a Golden J —dije y así tenía mi respuesta.
Ella asintió sonriente.
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La lluvia se ha detenido
RomanceLa pasiva y organizada vida de Lydia Frey se ve sacudida cuando le proponen trabajar siendo la representante de Jordan Greg, actor y modelo. Quien pasó de estar en la cima de su carrera, al fondo de esta, provocado por varios escándalos y situacion...