19- Vigo

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Barcelona

Todos los años la familia de Adri, Jack y Leire se reúnen en Vigo a principios de julio, pero este año, la familia del primero tardó una semana más en ir debido al accidente que había tenido Daniela.

Leire ya no tenía la escayola, pero le quedaron algunas cicatrices leves en el cuerpo.

Adrián estaba en llamada con su novia, ya que esa tarde iban a volar hacia la ciudad en la que estaban todos sus amigos.

- ¿Qué vas a hacer ahora?- se interesó ella.

- Voy a llevarle mis apuntes a Andrea.

- ¿A Andrea? ¿Por qué?

- No sacó la nota que necesitaba para entrar en la universidad que quería.

- Eso le pasa por puta.

- Oye, no hace falta que digas eso. Estoy seguro de que si tú no hubieras sacado la nota necesaria estarías igual que ella o peor.

- Yo no voy regalando mis tetas y mi culo por donde voy.

- No, porque son mías.

- No lo dudes, pero, ¿por qué tienes que ir tú a su casa si es ella la que necesita tus apuntes?

- Porque está enferma.

- Jo, pobre. Qué pena me da.- dijo sarcásticamente.

- Bueno, te dejo, me tengo que ir.

- No te acerques mucho a ella, ¿vale? Que si te contagia no te podré besar.

- Vale.- contestó entre risas.

- Por cierto. Cuando vengas tengo una sorpresa.

- ¿Cuál?

- Te daré una pista. Mañana van a estar todos fuera de casa, así que podremos estar solos.

- Te dejo que estás a muchos kilómetros de distancia y no te puedo tocar cuando me dices eso.

- Vale. Adiós. Te quiero.

- Y yo, adiós.

El chico colgó, cogió los apuntes y se dirigió a la casa de su amiga. Al llegar allí llamó al timbre y la madre de la chica le abrió la puerta.

- Hola Adri.- le saludó ella con una sonrisa encantadora.

- Hola.

- Ven, pasa. ¿Viniste a darle los apuntes a Andy, verdad?

- Sí, ¿dónde está?

- En su habitación. La primera puerta de arriba a la izquierda.

- Vale, gracias.

- De nada cielo.

Él subió las escaleras hasta la habitación, se detuvo enfrente de la puerta y petó antes de entrar.

- Andrea, soy Adrián, ¿puedo pasar?

- Sí.- dijo un poco congestionada desde el otro lado. Abrió la puerta y la vió tumba en la cama con las sábanas tapándola completamente.- Hola Adri.

- Hola. ¿Qué tal te encuentras?

- He estado mejor, la verdad.

- Te traje todos los resúmenes que hice para la EVAU. Están organizados por asignaturas y temas. Al inicio de cada tema hay un código de colores.- comentó dejándolos encima de la cama, entre él y ella.

- Vale, muchas gracias.

- ¿Qué nota necesitabas?

- Un 11,6.

El padre de mi hijo- Pablo GaviDonde viven las historias. Descúbrelo ahora