Capítulo 9.

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Mi espalda arqueada como un gato, no podía controlar esa posición

El aire de la noche envolvía las calles con una serenidad que contrastaba con la agitación que habían dejado atrás en el restaurante

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El aire de la noche envolvía las calles con una serenidad que contrastaba con la agitación que habían dejado atrás en el restaurante. Los cuatro decidieron regresar a los apartamentos, Dani y Jooha se despidieron de ti en la entrada del edificio, pero el último no muy convencido de que Dooshik fuera contigo, aún así, Dani lo tranquilizó para que no arruinará la poca tranquilidad que los cuatro tenían.

─ Que descansen ─ les dijo Dooshik.

─ No te vayas tarde ─ respondió Jooha entre dientes.

El pelinegro negó con una sonrisa pícara, pero Dani jaló a su novio y se lo llevó antes de que Jooha le gritará. Tú y Dooshik siguieron hasta llegar a la puerta de tu apartamento, ambos entraron y se quitaron los zapatos, pero antes de que pudieras dar un paso, Dooshik te cargó y entre risas te llevó a la cocina.

─ ¿Qué haces? ─ preguntaste.

─ ¿Recuerdas lo qué dijiste fuera del restaurante?

─ Aaah... ¿De explicarte lo de las perlas?

Él negó. Te sentó sobre la mesa y con una rapidez inimaginable te bajó los pantalones junto a tu ropa interior, acercó su rostro a tu intimidad y paso su lengua provocando un escalofrío en todo tu cuerpo.

─ E-espera~

─ Querías hacerlo, ¿no? ─ paso su lengua ─ Te voy a complacer las veces que quieras.

Te sonrojaste al escuchar sus palabras. Tomo tus piernas abrindolas más y empezó a acariciarlas mientras hundía su rostro en tu intimidad, su lengua moviendola para explorar cada zona de ti y poder ver en que partes te hacían estremeserte.

Dooshik sintió tus dedos meterse en su cabello y sonrió, con ayuda de sus dedos abrió un poco tu entrada y metió su lengua. Sintió como arqueaste la espalda y metió más la lengua.

─ Dooshik~

─ Tu sabor es dulce~ ─ beso tu clitoris.

─ N-no me digas eso~

Se alejó de tu intimidad y metió su cabeza bajo tu blusa, empezó a besar tu abdomen hasta llegar a tus pechos, bajó el brasier y comenzó a chuparlos con lentitud.

─ Mha~

Con sus manos empezó a estrujarlos con suavidad para que no te dolieran. Su gentileza era tan agradable que querías que fuera así siempre, gentil pero también brusco como él sabía hacerlo. Dooshik levantó la blusa por completo, sacándola por tu cabeza y quitando el sujetador con rapidez, se acercó a tu cuello dejando un camino de besos hasta llegar a tu mejilla.

─ ¿Me dejas hacerte algo~? ─ preguntó.

─ ¿Q-qué cosa?

─ ¿Te la han... Metido por atrás~?

Camino De Espinas | Kang DooshikDonde viven las historias. Descúbrelo ahora