Quizás un nosotros

.2027.

Sé que está fatal que cuente las intimidades de Oliver a alguien pero si no me desahogo sé que terminaré volviéndome loca.

No puedo llamar a Sie que es mi mayor apoyo en estas situaciones porque está casada con la hermana mayor de Oli, no quiero volver a obligar a Sienna a mentir a su mejor amiga.

Ava responde al segundo tono, desde el mármol de la cocina puedo ver a Oliver dormir profundamente, sé que duerme porque ronca un poco.

No es un ronquido de oso pardo pero si hace un ruidito con la nariz que me parece demasiado adorable para la furia que siento ahora mismo contra el.

He podido darle vuelvas a lo que habría pasado si no hubiera sido yo la que lo hubiese encontrado, podría haberse echo daño o haberse ahogado con su vomito. Por otra parte podría haber arruinado su carrera y eso lo habría destrozado por completo.

-Hola, mejor amiga *dice Ava*

Ava me sonríe alegre mientras toma asiento en un sofá que deduzco que debe estar en el pequeño estudio de Luisa, desde aquí puedo ver algunos bocetos pegados en las paredes.

-Hola mejor amiga *susurro*

Mi amiga cambia la expresión de su cara al escuchar el tono apagado con el que le hablo, estoy literalmente susurrando para no despertar al bello durmiente.

-¿Que está pasando Lil?

Ava también susurra y se a pegado el máximo posible al teléfono casi puedo verle el interior de su nariz a través de la videollamada.

-Tengo que contarte algo... *me corta*

-Antes de nada...
+¿Por qué susurramos?

-Es parte de la historia Ava, déjame que te cuente primero y luego preguntas.

Mi mejor amiga asiente como una niña pequeña a la que acaban de dar una orden, veo un destello de diversión en sus ojos.

Empiezo a relatarle todo lo ocurrido las anteriores cuarenta y ocho horas, desde la cena hasta la inauguración, de vez en cuando voy mirando al sofá.

-¿Que miras tanto? *dice Ava*

-¿Que habíamos dicho sobre hacer preguntas?

Ava simula como que se cerrara la boca con una cremallera y me deja seguir contándole el chisme completo, sus caras van cambiando a medida que avanza la historia. Su boca está en un completo círculo cuando le cuento que Oliver Anderson está ahora mismo inconsciente en mi sofá.

-Me tienes que estar vacilando.

Doy vuelta a la cámara para que ella también pueda ver el sofá, no veo su reaacion pero seguro que tiene que estar flipando.

-¿Que vas a hacer ahora? *dice*

-No tengo ni idea, por eso te llamaba...

Justo cuando estoy terminado mi frase veo que el cuerpo de Oliver comienza a moverse, me quedo quieta esperando que así no pueda verme pero es inevitable.

Oliver se incorpora en el sofá todavía de espaldas a mi, se pasa ambas manos por el pelo despeinado intentando despejarse la cara.

-¿Hola? Lil creo que la llamada se a congelado.

Al escuchar la voz de mi mejor amiga Oliver gira su cabeza para encontrarse conmigo, veo su cara demacrada a causa de la situación de ayer y no puedo enviar sentir un poco de lástima por el hombre sentado en mi sofá.