Quizás un nosotros

.2023.

Día de la acampada no acampada.

Las emociones se palpan allá donde mires.

Hay nostalgia por despedir el año escolar sobretodo nosotros los de último curso porque esto significará que cada uno tomará su camino y no volveremos a recorrer estos pasillos nunca más.

Bueno de manera metafórica porque todavía nos queda superar las últimas semanas de exámenes pero por así decirlo hoy es el último día libre que tenemos antes de convertirnos en jóvenes estresados artos de bebida energética o como es mi caso café.

Ava me agarra de la mano mientras recorremos juntas el pasillo que lleva hacia la sala de actos que es donde nos ha tocado este año dormir a los mayores. Los demás cursos se dividen entre el comedor, el gimnasio y algunos valientes hasta duermen en las gradas del campo de fútbol.

Aunque estamos cerca del verano todavía corre una brisa por la noche así que me alegro de estar en la sala de actos.

La sala es bastante grande contando con el escenario que es donde las animadoras y los chicos "guais" han colocado sus sacos y varias sillas de camping que se han traído, nosotras decidimos ponernos al final del todo en una esquina. Junto a nosotras hay varios compañeros con los que he convivido durante todos estos años pero la verdad no tengo mucha relación con ellos.

Me entristece ver que desde mi sitio puedo ver a Oliver acurrucado junto a Delia, debería ser yo la que estuviera acurrucada junto a él.

Esta misma noche Oli a trepado hasta mi ventana para tener una conversación de esas que le gusta tener a las dos de la mañana cuando le entran los nervios.

Literalmente mi mejor amigo me ha despertado para preguntarme si creo que esta noche iba a pasar de fase con Delia. Según Oli solo se han enrollado pero no han llegado hasta el final, nunca hemos tenido secretos el uno con el otro así que sé que Oliver jamás a tenido más que besos con alguna chica así que entiendo que esté nervioso.

Su casi primera vez fue con mi prima segunda Summer en un viaje familiar que tuvimos, quise morirme cuando Summer me contó que Oliver había intentado algo más pero que cuando ella le quitó los pantalones mi mejor amigo salió literalmente corriendo.

Noto un peso a mi lado izquierdo, me vuelvo esperando que sea Ava pero me sorprendo al ver que es Jeremy.

-Hola Lil, ¿te gustan las nubes? *dice*

Me tiende una bolsa de gominolas esponjosas y la verdad que me sorprende verlo con las nubes ya que son mis gominolas favoritas.

-He traído también Coca Cola de cereza y regalices.

Vale... algo me está oliendo mal.

-¿Como sabes todas mis cosas favoritas?

Jer se pone rojo a la vez que me rehulle la mirada.

-Olvier... *susurro*

El chico pelirrojo asiente antes de apartarse un poco de mí, casi parece asustado.

-Tranquilo Jer, no me he molestado contigo.

Agarró la bolsa de nubes y me meto dos en la boca mientras mastico con rabia, Oliver no tiene que contar todos mis secretos a Jeremy y mucho menos usarlos para que este intente conquistarme.

-Oye Lil... no te enfades con Anderson, casi tuve que rogarle para que me confesara cuáles eran tus cosas favoritas.
+Es bastante reservado cuando se trata de ti.

Pero aún así le contó cuáles eran mis dulces favoritos cosa que solo comparto con él.

Justo cuando voy a contestar el aludido aparece acompañado de su novia, me dedica una media sonrisa pero yo le aparto la mirada.

-Jeremy, íbamos a la cafetería. Liana no para de preguntar por ti.
+¿Te apuntas? *dice Delia*

Liana Daniel mejor amiga de Delia desde el siglo uno, son más bien unas siamesas además de ser completamente iguales salvo que una tiene rasgos asiáticos.

Como dato curioso mi madre ayudó a la madre de Liana para que pudiera adoptarla ya que eran conocidas desde la universidad.

Mi madre es trabajadora social y no he visto a nadie que le guste más su trabajo que a mamá.

-Estoy bien aquí gracias, Lil y yo estamos compartiremos unas nubes.
+¿Verdad Lil?

Asiento mientras agarro de nuevo la bolsa que me tiende, noto la ardiente mirada de mi mejor amigo pero me obligo a no mirarlo.

Estoy enfadada y no quiero que esos ojos color miel me ablanden, Oli siempre se sale con la suya y esta vez no va a ser así.

-¿Quieres que te traiga algo, Lil?

Escucho su voz profunda pero continuó con mi tarea de devorar las nueves, solo me limito a negar con la cabeza, escucho un suspiro antes de que la pareja continué su camino.

Aprovecho esto para despedirme de Jeremy e ir a buscar a mi amiga, en teoría había ido a por algo al coche pero ya hace bastante rato que se ha ido y todavía no ha regresado.

Estoy llegando casi a la entrada cuando un fuerte brazo me agarra y me mete en una de las clases que ya están vacías.

-¿Se puede saber qué mosca te ha picado Lila?

Sabes que una persona está enfadada cuando dice tu nombre y no el mote cariñoso con el que suele llamarte.

-A mi nada.
+¿Y a ti Oliver? *le digo*

Vuelve a suspirar y esta vez sí que levanto la cabeza para unir mi mirada con la suya, está enfadado y algo nervioso lo sé porque se pasa ambas manos por el pelo.

-Solecito, queda un mes para que nos separemos.
+Por favor dime que te ha molestado para que pueda solucionarlo.

Me agarra la mejilla con la mano y yo no puedo evitar apoyar más mi cara contra el. Respiro su olor ya que como a dicho Oli queda un mes para que nos separemos.

-No me gusta que vayas contando mis cosas por ahí.

La mirada de Oliver se nubla, sabe que la ha cagado.

-Lo siento Solecito, solo quiero que Jer tenga una oportunidad contigo.
+Te mereces que alguien te quiera.

-Tu ya me quieres.

-Me refiero de forma romántica.

¿Oís eso? Es mi corazón rompiéndose en mil pedazos.

-Quizás no quiero que sea él quien me quiera así *digo dolida*

Tomo distancia de él y puedo ver cómo se acaba de construir un muro entre los dos.

Lilol está cada vez más lejos de ser para siempre y eso me aterra.

Así que hago algo de lo que sé que me voy  arrepentir todo mi vida.

Decidió abrir mi bocota.

-Quizás yo si te quiera de forma romántica Oliver Anderson.

Veo todas las emociones pasar por la cara de Oli antes de que yo recoja lo que me queda dignidad y salga de la clase para ir en busca de Ava.