Nuestra cita para cenar termina siendo en una hamburguesería pero no en una cualquiera, la mejor de la ciudad.
Aquí te ponen esas hamburguesas en las que te manchas las manos mientras comes, lugar extraño al que venir en una cita también tengo que decir pero no había mucho donde elegir.
Creo que por fin Jadson se a dado cuenta de que el sushi no es para mí, agradecida estoy la verdad.
Me muero de hambre nada más cruzar las puertas del bar, el olor a fritanga me inunda las fosas nasales haciéndome sentir en el séptimo cielo.
-Dios, odio el olor a fritanga.
Dirijo mi mirada hacia mi acompañante.
-No seas tan estirado Parker, déjame que te descubra uno de los placeres de la vida.
Agarro la mano de mi compañero de trabajo y lo guío hasta la primera mesa que veo libre, el bar está ambientado en el típico bar ochentero americano, con su máquina de disco y su suelo a cuadros.
Nos sentamos en una mesa que tiene dos sillones y un taburete donde dejo mis cosas antes de precipitarme hacia la carta.
Asomo un poco mi cabeza de la gran carta para descubrir que Jadson me está mirando con una tonta sonrisa en su boca.
-¿Que pasa? *le digo*
-Nada nada *ríe*
Que chico tan raro.
Sigo observando las hamburguesas hasta que me decanto por una que lleva muchísimo queso, en otra ocasión buscaría la opción más saludable pero llevo una semana movida y me merezco un capricho.
Desde que tuve a Violet tengo carne donde antes solo había hueso y eso me ha causa inseguridad en los últimos años pero debo aprenderme a quererme tal y como soy.
¿Porque si no me quiero yo quien me va a querer?
Debo dar ejemplo a mi hija que por desgracia crecerá con los prejuicios y los estándares de esta asquerosa sociedad así que pienso ser su modelo a seguir.
Cuando el camarero nos toma nota Jadson pide una ensalada César y unas patatas mientras yo me pido mi hamburguesa pero sin patatas.
-No pienso dejar que me robes patatas *dice Jad*
-Eso está por verse *río*
Conversamos un poco sobre qué tal nos ha a ido la semana, Jadson me pregunta por Violet y cómo se está adaptando al mundo estudiantil, parece bastante interesado en todo lo que le cuento.
Me encanta hablar de mi hija así que a veces me paso de rosca pero a el parece no importarle.
Nos traen nuestros platos e intento ser lo más recatada posible comiendo pero al final termino toda embarrada en queso cosa que le hace bastante gracia a Jadson.
-Eres única Lila.
Jad me pasa otra servilleta para que pueda limpiarme la barbilla.
Genial Lila seguro que así vas a conquistarlo...
-¿Lila?
Levanto la vista de mi plato para encontrarme con la mirada acusatoria de mi madre, observa a mi acompañante un segundo y luego vuelve a centrar su mirada en mi.
-Hola mamá *digo*
Suelto la hamburguesa en el plato, miro un poco más a tras de ella para descubrir que la familia Anderson al completo la acompaña.
También viene con ellos Delia, parece bastante triste a causa del entierro al cual no e ido y por eso ahora mismo estoy siendo juzgada por mi madre.
Sé que debería levantarme y darle el pésame a Delia pero estoy demasiado clavada en mi asiento cuando reparo en el aspecto de Oliver.
Ojeras, piel blanca, pupilas dilatadas...
Todas las alarmas saltan en mi interior.
-Buenas noches señora Thompson.
Jadson es el primero de los dos en levantarse del asiento para saludar a mi madre, después saluda a Angie que es a la otra persona que conoce de las veces que han venido a visitarme a la galería.
Oliver esquiva mi mirada pero yo sigo mirándolo fijamente, va vestido con un traje oscuro que hace que su piel todavía se vea más pálida de lo que está.
Parece un vampiro.
-Es un placer encontraros aquí, venimos del entierro de un familiar y hemos pensado en cenar algo antes de volvernos a casa *dice Angie*
-Oh siento oír eso, mi más sentido pésame señora Anderson.
Angie le agradece el gesto mientras se excusa yendo a pedir mesa al camarero más cercano, Delia la acompaña dejando solo a mi madre y a Oliver con nosotros.
-Lila Thompson, ¿Se puede saber porque parece que se te ha comido la lengua un gato?
Salgo de mi letargo para dejar de mirar a Oliver y observar a mi madre que parece bastante cabreada.
-Lo siento mamá, a sido un día duro...
-Día duro el de Delia y no has sido capaz ni siquiera de darle el pésame.
Auch...
Que tu mejor amigo ponga a su novia por encima de ti duele pero que tu madre también te grite por culpa de una de las personas que más daño te han hecho en tu vida, duele más.
-Ni si quiera has sido capaz de acercarte al entierro.
-Eso a sido culpa mía *interviene Jadson*
+He tenido a su hija trabajando toda la tarde.Mi madre relaja el gesto cuando mira a Jadson, agradezco la presencia del moreno en estos momentos.
Parece que mamá va a hablar de nuevo pero Angie la llama para que vayan hacia una mesa libre, mamá se despide de mí con una de sus miradas de ya hablaremos luego.
-Oliver, siento mucho tu pérdida.
Jadson le tiende una mano a Oliver pero esto no se la devuelve, se crea un extraño silencio entre los dos hombres, al final Jad le da un apretón en el hombro.
-Que callado te tenías Lila que eras familia del gran Oliver Anderson *dice*
-No somos familia. *digo*
-No somos familia. *dice Oliver*
Jadson nos mira a ambos mientras vuelve a tomar asiento en su sillón, yo todavía sigo pegada al mío y parece que voy a tener que pasar aquí la noche.
Menos mal que mi hija debe seguir con su abuelo.
-¿Entonces que sois?
Buena pregunta querido Jadson, eso mismo me gustaría saber a mí porque odio a este chico ojeroso plantado frente a mí pero no puedo evitar preocuparme por el chico alegre que solía ser mi mejor
amigo que debe estar escondido en algún rincón de su interior.-Nuestras hermanas son mejores amigas y esposas así que básicamente nos tocó ser familia a la fuerza *digo*
-Si eso mismo nos tocó aguantarnos el uno al otro a la fuerza *dice Oliver*
Su expresión está sombría, casi parece que le haya molestado mi comentario, estaba intentando romper el hielo pero parece que solo he conseguido empeorar las cosas.
Oliver se despide y vuelve junto a nuestra familia.
Jadson y yo volvemos a la cena pero la hamburguesa ya está fría y a mí ya no me sabe igual de bien.
Mientras intento escuchar lo que Jadson me cuenta mi mente solo piensa en ese chico que está gritando ayuda a los cuatro vientos pero no se está dejando ayudar.
Ojalá supiera mirar hacia otro lado.
Mi vida habría sido más fácil.

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Quizás un nosotros
Roman d'amourMejor amigos desde siempre. Oliver Anderson es un chico popular, guitarrista y cantante de una banda la cual está apunto de comenzar su gira por Europa. Su mayor inspiración su novia Delia. Lila Thomas la chica despistada, creativa que siempre sueña...