La Última Melodía (+21)

capitulo 63

♤¿Estables?♤

Celine

Observo a Elian mientras se cambia este hombre no durmió pudo haberlo hecho pero no... se quedó con nosotros en la cama pero decidió trabajar en silencio, no me quiero levantar de la cama.

— ¿tienes sueño? — pregunta cuando me ve.

— un poco — niega, se acerca y besa mi frente.

— ¿en que trabajas? — me muestra la laptop, asiento, me acerco a el, deja la laptop sobre la mesa de noche, me acomodó sobre su abdomen, acaricia mi cabello — tengo que ir con Miranda — comento.

— le puedo llamar y decirle que estás enferma — lo observo.

— vendrá a comprobarlo — paseo mi dedo por sus músculos.

— le ordeno a mis hombres que no la dejen pasar — siento como su mano llega hasta mi rostro, acaricia con suavidad, respeto su silencio.

— ¿iras a trabajar? — aparta un mechón rebelde de mi rostro.

— tengo cosas que hacer, pero si te sientes mal puedo quedarme — me aferro a el — estas más cursi que de costumbre.

— cállate y dame mimos — se ríe.

— si no tuvieras el dispositivo, creería que estás embarazada — ni que las sombras lo quieran.

Se queda por un largo rato en la cama, es de esas veces que no le da por tener sexo, y se lo agradezco, no ha dejado de besar mis labios, son besos húmedos, me deja debajo de el mientras me besa acaricia mis piernas. Se aleja y observa mi rostro con mucha atención — mi paz, muñeca — acaricio su rostro.

— mi caos, cariño — besa mi cuello, su barba me causa cosquillas. Regresa a mis labios — ¿es que acaso esta en su modo esposo cursi señor Wolf?.

— me has pillado — me rio besando su mejilla. Besa mi rostro para dejar un beso en mi nariz — levanta ese hermoso culo de la cama, a entrenar.

Me pongo de pie paso al lado de la cuna y los gemelos duermen como dos angelitos — ahora yo los voy a despertar — niego divertida ante la queja de mi marido.

Entro al clóset, me giro y Elian esta recostado en el marco de la puerta, tomo el control remoto y presiono uno de los botones girando una de las paredes observo mi ropa deportiva.

Elian se cambia en silencio, lo observo ¡joder! — babeas y la alfombra es costosa — le muestro el dedo medio — ya sabes que hacer.

— vete a la mierda — sonríe.

— estas obligada a ir conmigo — sonrío.

— por desgracia — camina hacia la vitrina con sus relojes, me da una nalgada.

— por fortuna — suelto un bufido.

Niego, me coloco frente el espejo ata do mi cabello en una coleta, me observa — babeas y la alfombra es muy costosa — rueda los ojos.

Salimos de la habitación, no sin antes darle indicaciones a nani — yo me encargo — Elian toma mi mano y nos dirigimos a el salón, pasamos por la cocina y solo tomo una manzana.

— ¡te odio! — el pan de cada día.

— el sentimiento es mutuo pendejo — Elian rueda los ojos. Ante la pelea de Zeus y Dimitry.

— ¡buenos días! — todos me observan a aburridos — pero que humor.

— eres la única de buen humor — comenta Dalila enojada.