Jazmín organizó el cumpleaños número diez de Aarón, el primer nieto de la familia Miranda.Los invitados llegaron a la fiesta, hubo una degustación de bocadillos además de un show infantil en donde Aarón podía disfrutar de la compañía de sus amigos. Los esposos, César y Jazmín permanecían unidos ante los invitados, sonreían al verse y habían acordado lucirse como un matrimonio feliz.
— ¡Tío! —Aarón corrió hacía los brazos de Lucas, dándole un fuerte abrazo.— Cumpliste tu promesa.
— Por supuesto, tenía que estar aquí.
— ¿No hay un abrazo para tu tía? Al parecer existen preferencias. —Susurró Ivette al conseguir la risa por parte del niño, quién también la abrazó y le dejó un beso en la mejilla.— Luces como todo un príncipe.
— Ve a disfrutar de tu fiesta, tienes que disfrutarlo. —Decía al verlo alejarse acompañado de los demás niños y en ese momento cruzó miradas con César, se quedaron allí hasta que el grito de Aarón los alarmó.—
— ¡Hijo! ¿Estas bien? —César observó cómo no había ninguna herida en el cuerpo de su hijo.— ¿Te duele algo?
— No.
— Entremos, voy a revisarte. —Habló Jazmín al sostenerlo del brazo.—
— Estoy bien, solo tropecé... No es nada. —Bajó la mirada al ver aquella mirada de preocupación en ambos padres, por un momento parecía real.— Tranquilos, estoy bien.
— Está bien, voy a traer el pastel para que apagues las velas.
En la gran mesa se situaba el pastel personalizado, los dos padres se colocaron alrededor de Aarón y entonces inició el canto. El niño sopló las velas y los invitados aplaudieron, luego el fotógrafo se ubicó en el centro para tomar una foto; César bajó la mirada al notar que el hijo a quién una vez solo podía sostener con un brazo ahora estaba de pie por sí mismo, tan alto e inteligente.
— Señor Miranda, por favor mire a la cámara.
— Ah, sí claro. —Soltó un suspiro al sonreír y entonces de él, siguió Lucas acompañado de su esposa también. César se dio cuenta de la gran diferencia que existía en la sonrisa de Aarón hacía él comparada con Lucas, al beber un poco de champán vio como Jazmín mantenía la mirada fija sobre su hermano.—
∞∞∞
Ivette se dirigía al centro comercial en donde decidió hacer algunas compras, además de bolsos o algún saco decidió comprar aquel traje que se vería perfecto en su esposo. Se dirigió al lugar de trabajo en donde vio a un adolescente contemplar un obra, decidió continuar su camino hasta que fue llamada por el joven.
ESTÁS LEYENDO
••• Golden Boy •••
Teen FictionAl haber sido separados al nacer, dos hermanos gemelos se vuelven a reencontrar años después. Infancia, adolescencia y principio de juventud completamente diferentes, la hermandad es algo primordial y no existe un mejor amigo más que un hermano; sin...