Capítulo 57

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Finalmente el verdadero criminal estaba en prisión, la inocencia de Lucas fue reconocida por los demás aunque eso ya no tenía mucha importancia, para él no era importante

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Finalmente el verdadero criminal estaba en prisión, la inocencia de Lucas fue reconocida por los demás aunque eso ya no tenía mucha importancia, para él no era importante.

En décimo aniversario por el fallecimiento de la señora Cassandra, madre de los gemelos Miranda; Lucas decidió visitarla acompañado de su esposa quién había conocido a la perfección a la madre incluso antes que el propio hijo, la separación debido al secuestro y como después volvió a casa, era mucha veces todavía un misterio que no tenía relevancia y solo César sabía la verdad.

- Mi padre ah estado postrado en cama durante seis años, el doctor me llamó y me dijo que debía pensar en desconectarlo... -Lucas se acomodó dentro de la cama, después de colocarse la pijama mientras que Ivette se ponía unas cremas en el rostro y manos.- Debería dejarlo descansar ¿Verdad?

- ¿Es lo que quieres?

- Por supuesto que no, es mi padre y no quisiera perderlo.

- Sé que harás lo correcto, siempre tomas decisiones difíciles por el bien de los demás y es por esa razón que me enamoré de ti.

- ¿Puedes acompañarme? -Aquella pregunta en realidad era una petición, que Ivette logró descifrar.-

- Estaré contigo.

Después de dos días, Lucas se encontraba en la habitación en donde su padre estaba conectado a un monitor que lo mantenía con vida. Se realizaron los preparativos así como la firma que autorizaba la desconexión, debido a la incapacidad de César, él tenía todo el derecho de dar el consentimiento.

- Listo, el señor Sergio está descansando en paz ahora. -Ante las palabras del doctor, Lucas soltó un suspiro.-

- Querido. -Ivette observó cómo su esposo mantenía la mirada fija sobre el padre.- Estoy aquí. -Susurró al sostenerlo del hombro.-

Un mes después, César tuvo la visita de Lucas quién había ido vistiendo un traje a diferencia del hermano gemelo quién tenía consigo el traje de preso.

- ¿Ya me extrañaste? Realmente nuestra relacion es extraña, debí matarme con mis propias manos cuando tenía la oportunidad... Ahora incluso trabajar con el sicario que mandé a matarte, tú solitos te pones la soga al cuello ¿Es una especie de masoquismo?

- Solo vine para decirte que papá está descansado, por fin puede descansar después de todo lo que le hiciste pasar.

- ¿Qué? ¿De qué estás hablando? -Preguntó al verlo ponerse de pie, entonces lo tomó del brazo con fuerza.- Te hice una pregunta.

- Nuestro padre está enterrado al lado de mamá, disculpa... Al lado de mi madre, ahora ya puedo aceptarlo sin sentir culpa.

- ¿Cómo que enterrado? Yo lo dejé con vida, fui tan cuidadoso para que-

- ¡Exacto! -Exclamó Lucas consiguiendo el silencio por parte de los demás presos, de un momento a otro puso a César sobre la mesa y lo sujetó con fuerza del cuello.- Ya tuviste suficiente con hacerlo sufrir, al menos yo pude darle un poco de tranquilidad ¿Dices quererlo? No me vengas con esa mierda, deberías agradecer que no te eh quitado la vida solo por respeto a mi sobrino... Si él no estuviera vivo, tú tampoco lo estarías.

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