El Edificio (Jacob)

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La tía Michelle me había infiltrado en el operativo para acabar con el imperio del Nivel 8. Con el paso de los años, habíamos descubierto que éste trabajaba para su único beneficio. Había ganado tanto poder, que nadie en la CIA ni en el gobierno se atrevía a ir en su contra. Incluso tenía tratos con algunas de las mafias más poderosas del mundo, nadie podría ir en su contra.

Jamás se hubiera imaginado, que un psicópata al que entrenó para que fuera su robot, se convertiría en el arma perfecta para su propia destrucción. Gustabo era inteligente, fuerte y estaba entrenado para soportar casi cualquier cosa. Su maldición, Pogo, pasó a ser su salvación y juntos eran capaces de cualquier cosa. Fingió su muerte durante años; en ese tiempo, hizo contactos dentro de las mas grandes mafias y comenzó a sembrar en ellos las dudas suficientes para actuar contra el Nivel 8. Michelle, gracias al trabajo de Gustabo fuera, se concentró en encontrar aliados dentro de la CIA y del Gobierno para eliminar al Nivel 8 de la faz de la tierra.

Todos los esfuerzos de Gustabo se decidían en los próximos minutos. Todo por lo que el y Michelle han trabajado se decide en este momento. La guerra va a estallar en Los Santos y yo, una vez más he abandonado a mi hermano dejándolo solo. Me pidió quedarme aquí para sacar a Nick sin ninguna sospecha, accedí solo porque el me lo pidió, pero en mi corazón pesa el hecho de abandonarlo a su suerte una vez más. Años atrás le falle en la Iglesia; pasé estos últimos años haciendo cada cosa que me pidió, si este era su deseo, era lo que iba a hacer. Y esta vez no iba a fallar.

Michelle pasó mucho tiempo entrenándome para que pudiese actuar como un agente más sin ser detectado ni levantar sospechas. Incluso me había llevado a alguna misión de la CIA para que viera de primera mano como debía actuar en aquellas situaciones. Al ser un "agente nuevo" yo debía mantenerme en la retaguardia para no ser una carga para el resto del equipo; esas eran las órdenes que había dado Michelle al resto del equipo. La realidad era, que así tendría más libertad para poder sacar a Nick de allí, aprovechando todo el jaleo que se iba a armar allí.

Estuvieron durante los últimos tres meses planeando el operativo. Todo debía estar perfectamente calculado para que la gente del Nivel 8 no sospechara nada. La guerra debía estallar exactamente a la vez en ambos lugares, el no podría huir y tampoco podría reaccionar ante dos ataques. Pude distinguir a Gustabo en alguna reunión, pero nunca reaccioné; el acudía a las reuniones enmascarado para cubrir su tapadera y yo sabía quien era solo por sus ojos y sus expresiones. Gustabo García estaba muerto, mientas fuera necesario.

La orden de Michelle llegó y todos reaccionaron con la precisión de un reloj suizo. Sabían a la perfección que hacer y como; se conocían de memoria los planos del edificio y también sabían donde estaba situada cada defensa del mismo, cada agente. Yo saqué una foto de Gus y Michelle en el yate, años atrás, suspire y la guarde para entrar en aquel lugar donde mi hermano tanto había sufrido años atrás.

En apenas una hora todo había terminado. Yo fui con los agentes asignados al lugar donde tenían a unos 10 niños secuestrados para sacarlos de allí. Cada agente se encargaba de un niño y los demás se ocupaban de cubrirlos para sacarlos; por supuesto, mi niño fue Nick, el hijo de Freddy Trucazo. Estaba en una esquina de la sala, a diferencia de los demás, miraba con superioridad al resto y no permitió que lo tocara cuando me acerqué a el, solo cuando le nombre a su padre avanzó hasta mi para poder sacarlo de allí. Sabía quien era por las fotos que Michelle me había enseñado, pero de no ser así, su actitud y sus ojos le habrían dilatado, era digno hijo de su padre. Una vez fuera, nos dirigimos a los coches que nos sacarían de allí.

Aquí entraba el plan que ellos no conocían, accioné una bomba y el Edificio exploto. La sorpresa me beneficio en mi plan de huida. Ni Nick, ni yo íbamos a pisar la CIA, nuestro destino estaba bastante lejos de las garras de esa organización. Dejarme atrás, fue la manera en la que aproveche para colocar C4 a mi paso sin ser visto..... el último paso de la venganza de Gustabo, reducirlo todo a cenizas.

Hice un par de cambios de coches y tome rumbo al piso franco que Michelle había preparado para nuestra huida, le hice unas fotos a Nick y se las envié a mi tía para que se las enseñara a Freddy. Si aún tenía alguna duda en seguir ayudando a Gus, esto acabaría de convencerlo de no traicionarlo. Conozco bien a Freddy y se que solo actúa por propio beneficio, tener a su hijo en mis manos es mi forma de proteger a mi hermano pequeño.

Gustabo Garcia. El FinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora