LAS CURVAS DE MI ABUELA...

67. ¡UN DINOSAURIO EN UNA MOTO...!

Y el periodista Francisco Veracochea había hecho público un artículo en un muy prestigioso periódico de distribución e influencia internacional. En el mismo, el reconocido periodista de investigación, denotaba la importancia de la gerencia de alta eficiencia y eficacia en la vida cotidiana de cada individuo.

Analizaba y describía en aquel artículo que, a más alta u elevada sea la visión gerencial de cada persona en el planeta tierra, se haría mejor cada ser humano y, por ende, estaríamos como sociedad, enrumbándonos a una mejor forma de vida y, sin lugar a dudas... a un mundo mejor...

Pero lo más atractivo y que permitió la "viralización" de aquel análisis fue, principalmente, que el audaz periodista había hecho entender a mucha gente la verdadera y real importancia que debemos dar a las personas que dejamos estar en nuestro círculo social inmediato... o a las cinco personas que más escuchamos y damos nuestra atención...

Ya que esas personas nos pueden llevar a la ruina total de nuestras vidas o los más grandes éxitos que jamás hayamos imaginado... Puesto que somos seres que influimos a quienes nos escuchan y nos dejamos influir de quienes escuchamos.

Y el periodista hizo hincapié en la necesidad de sacar de nuestras vidas... a todos aquellos, aunque sean familiares, otrora "amigos", parejas o exparejas, que solo se aprovechan de nosotros para obtener beneficio y se alejan cuando apenas necesitamos algo de ellos... Se niegan, se esconden, evaden todo encuentro posible... pero cuando estamos bien de nuevo... regresan como el depredador a ver que siguen sacando de ti...

Veracochea... en sentido figurado, afirmó que, todas esas personas, para nuestras vidas, eran parásitos o seres tóxicos... a los cuales él definió que eran como "un dinosaurio en una moto".

Más que distraernos de nuestros verdaderos enfoques, de nuestras metas, de nuestros proyectos y de nuestros objetivos... y terminaba el profundamente interesante y quizás divertido artículo... que, cuando estemos en presencia de los dinosaurios en motos... de seguro, ese es el lugar equivocado...

Moraleja: Hay seres con los cuales podíamos sorprendernos o reírnos al verlos en aquel "espectáculo" ... pero a la denotación final... no nos servían para nada...