Rivales del corazón. JENLISA G!P

¿Viaje estudiantil?

[POV: Jennie]

El sol comenzaba a ponerse cuando Jennie y Lisa caminaron por el malecón, las olas chocaban suavemente contra la orilla y el sonido del mar parecía envolverlas en una burbuja donde nada más importaba. Después de su última cita, la conexión entre ellas se había vuelto aún más fuerte. Esa tarde, Lisa había decidido sorprender a Jennie llevándola a un lugar especial: un restaurante frente a la playa que solo los locales conocían. Decorado con luces cálidas y mesas de madera rústica, el ambiente era íntimo, perfecto para ellas.

Jennie no podía evitar sonreír cada vez que veía los detalles que Lisa había cuidado. Desde el ramo de flores frescas en la mesa hasta la selección de su comida favorita, Lisa se había asegurado de que cada aspecto de la cita fuera perfecto.

—Siento que no merezco todo esto —susurró Jennie mientras miraba a Lisa con admiración.

—No digas eso —respondió Lisa, con una sonrisa tranquila—. Te mereces esto y mucho más.

Pasaron las horas entre conversaciones ligeras y momentos en los que solo se miraban a los ojos, como si el mundo a su alrededor desapareciera. Lisa siempre encontraba formas de hacer que Jennie se sintiera segura, amada y especial. Después de cenar, caminaron juntas por la orilla del mar, dejando que la brisa marina las envolviera. Jennie cerró los ojos por un momento, disfrutando de la sensación de la mano de Lisa entrelazada con la suya. En ese instante, supo que, pase lo que pase, siempre querría estar a su lado.

—Hoy ha sido el mejor día de mi vida —dijo Jennie de repente, haciendo que Lisa se detuviera y la mirara con intensidad.

—Y yo prometo que habrá más días como este —respondió Lisa, acercándose para besarla suavemente.

El beso fue dulce, lento, lleno de promesas no dichas, y Jennie sintió que todo su cuerpo se llenaba de una calidez que solo Lisa podía darle.

Al día siguiente, la rutina de Jennie retomó su curso cuando entró al consejo escolar. El contraste entre la magia de la noche anterior y la formalidad de su día a día en la escuela era abismal, pero se sintió en paz al saber que Lisa siempre estaría a su lado. Apenas entró al salón del consejo, Irene la llamó para ponerse al día con las novedades.

—Jennie, justo a tiempo. Tenemos que hablar sobre el viaje de último grado —dijo Irene, con su tono serio habitual, pero con un destello de emoción en sus ojos.

Jennie la miró curiosa mientras tomaba asiento.

—¿Viaje? No había escuchado nada sobre eso —respondió Jennie mientras se acomodaba en su silla.

—Es una tradición para los de último grado. Este año decidimos ir a la playa —explicó Irene—. Queremos que sea algo especial, un cierre memorable antes de la graduación.

Jennie asintió, sintiendo que la idea de un viaje a la playa era justo lo que todos necesitaban. Entre las tensiones y los dramas recientes, un descanso junto al mar sonaba como la solución perfecta.

—Y adivina quién ha sugerido las cabañas perfectas —dijo Jisoo con una sonrisa traviesa mientras se inclinaba hacia Jennie.

—Déjame adivinar... ¿Tae? —preguntó Jennie, ya sabiendo la respuesta.

—Exacto. Taehyung dijo que puede conseguir unas cabañas privadas cerca de la playa. Al parecer, un amigo suyo las posee —añadió Jisoo, riendo—. Ya sabes cómo es Tae, siempre tiene los mejores contactos.

—Suena perfecto —dijo Jennie, ahora más emocionada por la idea de pasar unos días alejados de todo.

El resto de la reunión pasó en una serie de discusiones sobre logística, actividades y cómo organizar todo para que el viaje fuera un éxito. Irene tomó nota meticulosamente, mientras Rosé y Jisoo se encargaban de agregar sugerencias que hacían que la reunión fuera menos monótona. Jennie se sentía agradecida de tener amigas como ellas, siempre dispuestas a ponerle un toque de diversión a cualquier situación.