Rivales del corazón. JENLISA G!P

Marcos Manobal

POV de Jennie

Mientras Jennie intentaba concentrarse en los papeles del festival, no podía dejar de pensar en el bulto incómodo que había sentido mientras estaba encima de Lisa. Era algo duro y extraño, y la sensación seguía rondando en su mente. Se preguntaba si había sido una ilusión o si realmente había sentido algo que no debería haber estado allí.

Cuando Jisoo entró en la oficina y la encontró todavía preocupada, decidió intervenir. —Jennie, ¿puedes explicarme qué fue lo que pasó con Lisa? La vi en el suelo y parecía que había una especie de pelea.

Jennie, con el rostro aún rojo de vergüenza, suspiró y empezó a explicar nuevamente. —Estaba tratando de hacer que Lisa ayudara con el festival, y ella estaba distraída con su teléfono. La pelea se volvió física, y al final, terminé encima de ella. En medio de todo eso, sentí un bulto extraño contra mi pantalón. No sé qué era exactamente, pero me desconcertó.

Jisoo la miró con escepticismo. —¿Un bulto extraño? ¿Estás segura de que no fue simplemente una impresión? Podría haber sido cualquier cosa.

Jennie frunció el ceño, tratando de aclarar sus pensamientos. —No lo sé, Jisoo. Fue una sensación rara, y no puedo dejar de pensar en ello.

Jisoo asintió, aunque aún parecía dudar. —Bueno, mantén la calma y trata de concentrarte en el festival. Hablaremos más tarde si necesitas.

Mientras tanto, en otro lugar, Lisa estaba en la cafetería con Rose y Momo, relatando la misma situación con una mezcla de frustración y diversión. Momo, con su típica actitud despreocupada, se reía mientras escuchaba la historia.

—¡Vaya, eso suena como algo sacado de una comedia! —exclamó Momo, riendo. —No puedo creer que Jennie se haya puesto así.

Rose, sin embargo, tenía una expresión más seria. —Lisa, ¿cómo te sientes al respecto? Parece que Jennie todavía está molesta.

Lisa se encogió de hombros, intentando parecer indiferente. —No me importa mucho. Solo estaba intentando divertirme un poco. Aunque no esperaba que Jennie se enojara tanto.

Al día siguiente, Lisa estaba mostrando un comportamiento inusualmente responsable. Se presentó puntualmente a la oficina del consejo estudiantil y comenzó a trabajar en los papeles sin hacer ningún comentario sarcástico. Jennie notó la diferencia, sintiéndose algo desconcertada por el cambio repentino en la actitud de Lisa.

—¿Qué te pasa, Lisa? —preguntó Jennie, observando a Lisa trabajar con una diligencia inesperada.

Lisa, con una sonrisa enigmática, respondió. —Solo estoy tratando de ser útil. No quiero que pienses que solo me dedico a molestar.

Jennie frunció el ceño, sin saber cómo interpretar este cambio. —Bueno, es bueno que estés ayudando. ¿Por qué de repente estás tan enfocada en esto?

Lisa no respondió directamente. En lugar de eso, se concentró en los documentos y en las tareas que Jennie le había asignado, manteniendo una actitud profesional que parecía fuera de lugar.

Mientras el día avanzaba, Jennie empezó a sospechar que había algo más detrás del comportamiento de Lisa. El cambio en su actitud parecía demasiado repentino para ser genuino. Lo que Jennie no sabía era que Lisa estaba planeando una gran broma para ella, una que tenía la intención de sorprenderla de una manera inesperada. La broma tenía un objetivo claro: probar si Jennie realmente sentía algo por ella, o si sus emociones eran solo una fachada.

Lisa había estado pensando en cómo hacer que Jennie se diera cuenta de lo que ella realmente deseaba, y esta broma era su forma de explorar esos sentimientos. A medida que el día avanzaba, Jennie y Lisa continuaban interactuando, con Jennie notando el cambio en Lisa, pero sin entender del todo lo que estaba ocurriendo bajo la superficie. La relación entre ambas seguía siendo complicada, y el próximo capítulo de su historia prometía ser tan intrigante como los anteriores.