You Are My Best Gift.

42. Heather

Estaba decidida a no decir ninguna palabra sobre esta situación.
Era jueves por la noche y le había prometido a Bailey que estaría desde el principio hasta el final de la fiesta que daría el mañana en su casa.
Ella me había prestado el vestido floreado de aquellas veces y me había dado unas zapatillas que no me apetecían usar. Preferí ajuntarlo con unos zapatos oxford y andar cómoda durante toda la fiesta que será un caos.

Le había dicho a Bailey una y otra vez que ni pensara en traer a Sam a la fiesta porque sino yo me marcharía. Me la había pasado el medio día ayudándola con la simple decoración de la casa, guardando los objetos valiosos y preciados en una caja fuerte que tenían en el ático y preparando unos simples bocadillos con galletas y chocolates.

-No hay que hacer tanto, Heather -dijo Bailey mientras dejaba las galletas en una mesa- Denis va a clases de cocina y dijo que me traería bocadillos especiales y bebidas.

-¿Denis es chef?

-No. Pero le gusta cocinar.

-oh, bueno... Entonces creo que con esto es suficiente, ¿no? Aparte tenemos las frituras y no creo que tu nuevo novio te vaya a fallar con esos bocadillos especiales.

-Bueno... ¿Enserio se ve bien todo?

-Bailey, se ve bien. Deja de ser tan insegura.

-está bien... Es que siento que algo nos falta....¿y las sodas?

-Están detrás de ti.

-Am... Bueno.

-...¿No compraste bebidas alcohólicas, verdad?

-No, yo no.

-Bailey...

-Denis lo traerá todo. Llegará a las seis.

-Espero que no te excedas. No me gusta cuidarte cuando andas así.

-Hey, yo te cuidé cuando anduviste por primera vez así. Y también cuidé a Sam, ¿recuerdas?

-No lo menciones. -supliqué- quiero olvidarme de él por un momento y disfrutar.

-de acuerdo.

-Bien.

Y después de todo, pasaron las horas y Denis llegó.
Resultó ser un chico muy risueño como yo. No lo negué, era simpático y guapo. Tenía un cabello ligeramente rizado y tenía una cara relajada.
Él había traído todo tipo de bebidas. De lo que sea que te puedas imaginar: barril, vodka, tequila, cerveza hasta vino y ron... ¿Por qué había traído ron y vino?
Como sea, era una variedad. Enserio.
También trajo varios recipientes de plástico en donde habían postres como rebanadas pequeñas de pasteles distintos, galletas y brownies.

Estaba obligándome a quedarme quieta para no comerme todo.
Bailey me subió a su cuarto y comenzamos a arreglarnos mientras Denis preparaba el audio con su otro amigo que es dj, Ty.

Bailey se puso un top negro con unos shorts de mezclilla, porque sabe que cuando se va a poner hasta el límite, todo se sale de control.
Yo en cambio estaba decidida a no beber y entretenerme con la música. Sería una fiesta sana para mí.
Bailey se maquilló y luego me pintó de manera sencilla. Yo me puse el vestido y me quité los lentes para verme mejor. Aunque no veía muy bien.
Y luego bajamos a esperar a que la gente llegara: uno, cuatro, diez, quince, veintidós.... ¿Cuarenta? Eh... No sé.
La música inició y la gente aún estaba tranquila. Luego unos cuantos se pararon a bailar y otros se fueron por una bebida. Luego el número de personas bebiendo y bailando era inmenso y apenas podía oír los gritos que hacía Bailey para llamarme.