You Are My Best Gift.

57. Sam

¿Alguna vez has pasado por algo que te ha dejado sin palabras?, algo que te haga decir...¿por qué a mí?, ¿por qué ahora?...,¿acaso esto tiene que suceder?

Yo no quiero vivir esto, no quiero saber cómo termina la historia. Pero tengo que saber el final.

Paul terminó de colocar la llanta en el carro del padre de Heather.

¿Qué iba hacer?, ni idea. Lo único que quería era saber de ella.

Porque sin ella yo literalmente no hubiera tenido una oportunidad.
Porque sin ella yo no hubiera vivido al máximo estos meses.
Porque sin ella yo no me hubiera sentido un tonto enamorado.
Y porque sin ella yo no soy la persona que me gusta ser.

¿Qué haría sin ella?, después de tanto...no lo puedo permitir.

-gracias, Paul. En verdad. -dijo el papá desde afuera.

Paul sólo sonrió y le deseó lo mejor a Heather.

Sam, di algo.

-...la lluvia no calmará muy pronto. Ve ahora antes de que empeore más de lo que ya está. -Paul hablaba fuerte. Había tanto viento que temía que saliera volando.

Las gotas de agua eran grandes y pesadas, caían diagonalmente y el aire no ayudaba en nada. Incluso, unas cuantas palmas estaban siendo medio dobladas por la tormenta.

Jamás había visto eso.

-sí...de todas formas; muchas gracias Paul.

Y él simplemente asintió con la cabeza y sonrió.

Sal del auto, Sam. Tienes que decirle algo, tienes que saber algo.

Claro, como si el papá de Heather supiera cómo está su hija en el hospital mientras él batalla con una llanta ponchada de su coche.

No me importó. Salí del coche, haciendo todo lo posible para ignorar el agua y la fuerte brisa del viento de me pegaba en todo el cuerpo.
Metí mis manos en los bolsillos de mi suéter.

Paul se volvió hacia mí.
-¡Sam, vuelve al coche! -gritó con dificultad entre todo el ruido de la lluvia.

-¡quiero saber cómo está Heather!

El papá de ella juntó los labios con inconformidad y se acercó a mí.

-Sam, podrás visitarla cuando la lluvia se detenga. -él posó una mano en mi hombro y no pude evitar recordar esa vez en donde yo estaba en el armario de Heather y él le preguntó que si le gustaba...eso fue hace un mes...o incluso hace más. Parecían años.

-¿cuando deje de llover? -dije sin esperanza

-Sam, salir en estos climas son riesgosos. Creo que sería mejor que vengas después de esto. Por mientras si quieres puedo mantenerte informado...

Su mirada era triste...lastimada y abandonada. Era la misma cara que tenía cuando extrañaba a mis padres cuando recordaba el accidente en el Árbol.

-...¿ella estará bien?

Él forzó una sonrisa triste.
-esperemos.

Y entonces... ¿Hay probabilidades de que ella muera?

Nunca me acostumbraría a decir que Heather está muerta...

No puede terminar así. Su historia no ha terminado. Hay más por delante.

Tenía algo en mi estómago. No sabía si era bueno o malo...no sabía si me dolía o si no...
Pero sabía que eran mis nervios. Yo simplemente quería que este horrible episodio terminara para volver a verla o correr hacia ella y besarla con todas mis ganas.

¿Qué pasaría después?, ¿cómo sería en la escuela?....¿al menos habría clases el lunes?

Dios mío...¿Bailey sabe de esto?, ¿cómo reaccionaría?.

No quería irme. No quería abandonar al papá de Heather. Quería estar aquí aunque me enfermara de tanto mojarme.

Pero por supuesto; no podía.

Me encontraba en el auto, de regreso a casa con Paul.
No habíamos dicho ninguna palabra, simplemente oíamos las gotas de lluvia caer y pensé: ¿acaso no es suficiente?, perder a mis padres...no conocer a mi familia biológica y...¿después esto? No me malinterpreten: amo a mi familia. Pero Heather no puede irse. No es justo. ¿Por qué ella?, ¿por qué ella y yo no cuando tenía un año?, ¿por qué no morí en ese accidente y mis padres sí?, ¿por qué tuve que vivir para que Heather muriera?...

Ella no está muerta y ni lo estará.

No lo podría permitir.

Votar y comentar :)
-Michelle:)