44. Sam

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Me desperté en una cama matrimonial.
¿Qué había pasado ayer?, ¿dónde están todos?....
Me incorporé y solté un bostezo.
Hay alguien a mi lado.
No, no, no, no.
Sentí una presión en el pecho por el pánico que estaba pasando en mi mente.
Levanté un poco la sábana y observé un mechón rojizo.
Heather.
Dios mío, soy muy joven como para ser papá.
Nada de esto es real. Esto es un simple sueño.
Un sueño muy realista.

Iba a tratar de levantarme sigilosamente en cuanto Heather se movió.
Estaba demasiado seguro en que me iban a matar llegando a casa. Estaba hecho un desastre y no recordaba la mayoría de todo lo que había pasado ayer en la fiesta.

Eres un tonto, siempre tienes que ser un tonto.

Suerte para mí. Aún tenía mis pantalones puestos.
Volví a intentar escabullirme pero Heather se volvió a mover.
Busqué con la mirada mi playera entre toda la habitación y noté que estaba tirada en el suelo...junto con un vestido.
Ésta era la segunda vez en que estaba en una situación nudista con Heather. ¿Qué no podíamos dejar de quitarnos la ropa por un momento?
Me volteé hacia ella y observé un brazo descubierto que llegaba hasta su hombro. Admiré su piel blanca por un momento y no pude evitar pensar en qué debió pasado para que se nos antojara desnudarnos como si nada.
O...es más decir...¿de quién debió ser la idea?

-mhhhmmm...
Heather se estaba moviendo más y mi sensación de pánico aumentó.
Entonces ella se desarropó hasta los hombros y se talló los ojos para después admirar el cuarto como yo mismo lo hice. Y luego clavó sus ojos verdes en mí e hizo lo que menos pensé que haría: gritó.

-¿¡QUÉ PASÓ?! -dijo en desesperación mientras se arropaba más el cuerpo.
Traté de mantener la calma.

-Creo que...los brownies de ayer tenían algo de...

-¡NO ME REFIERO A ESO! -interrumpió- ¿POR QUÉ ESTÁS AQUÍ?, ¿POR QUÉ NO TENGO ROPA?, ¿POR QUÉ TÚ NO TIENES ROPA?, ¿QUÉ PASÓ AYER?

-¡no lo sé!
Heather tenía una mirada peor que la mía: su maquillaje se había recorrido y sus ojos se veían un poco cansados y rojos. Definitivamente ninguno de los dos la estaba pasando bien. Teníamos que saber por qué estábamos....

-¿NOS ACOSTAMOS, SAM?

-Creo que no.....-dije inseguro- aún tengo mis pantalones puestos.

Heather logró calmarse un poco.
-Bueno...¿entonces no nos acostamos?

-Pues yo no recuerdo absolutamente nada...

-Ni siquiera recuerdo haberte visto.

-Yo sólo tengo recuerdos vagos de todo....

-¿qué recuerdas?

-El principio, Denis me dio un brownie supuestamente normal y quise buscar más y... Comí demasiados de manera seguida... Luego Bailey me dijo algo que no recuerdo muy bien y... Recuerdo algo con globos.

-¿globos?

-No lo sé.

Heather me miró de manera frustrada.
-¿es que tengo que pasar todo contigo?

Hice una mueca.
-No es mi intención meterme en tu vida, enserio. Bailey me invitó y...

-¡Bailey me dijo que...!

-¡ella me dijo que estaba enojada contigo!

-¡eso no es cierto!

-¡pues ella me dijo eso y me rogó para que viniera a su fiesta!

-Bailey suele ser una mentirosa la mayoría del tiempo. -murmuró enojada- Pásame mi vestido Sam. Tú al menos tienes pantalones.

Salí de la cama y me dirigí hacia la esquina en donde estaba nuestra ropa. Tomé ambos y me puse la playera para después darle el vestido a Heather en la mano.
Ella seguía con una mirada enojada.

You Are My Best Gift.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora