Capitulo 11

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Desperté en en una camilla. Estaba en la enfermería que estaba dentro del taller. Paul apenas me la había mostrado por encima. 

Cuando salí, me encontré con todo el grupo. Estaban discutiendo, hasta que me vieron.

—¡Ah, despertaste!— exclamo Kate, corriendo hacia mi. Me dio un tierno beso en la mejilla, y suspiro fuertemente—Parece que estabas bastante cansada, eh...

—Yo... si... Eso creo.—Mire detrás de ella. Paul me sonrió, antes de acercarse con una linterna. 

—¿Qué tal te sientes?—Kate me soltó. El me apunto con la linterna a los ojos. —¿Dolor de cabeza? ¿Nauseas? ¿Mareos?

—No, estoy bien... ¿Y los demás? ¿Andrew... Cameron? ¿Ellos están...? —De pronto sentía un gran miedo. Me había desvanecido en la nada. Lo ultimo que podía recordar era el fuego consumiendo esos autos. ¿Qué había pasado con los otros dos?

¿Estaban bien?

Kate me sonrió—Oh, cariño, ellos están bien. Mira. 

Dirigí mi vista al otro lado de la sala. En esa esquina estaba Cameron. Al mirarme, suspiro. — Estamos bien. 

—Oye, que susto les diste, eh...—me dijo Zack, — Tenia que tomarles una foto cuando llegaron. Este te cargaba y Andrew parecía que se iba a echar a llorar.

—¿En serio? —Eso me sorprendió un poco. Un poco mucho. Mire a Cameron de reojo. Zack asintió.

—¡Claro! Si parecías medio muerta,... aunque respirabas. Paul los habría enterrado vivos si te hubiese pasado algo. 

Tímida, mire a Paul. No parecía muy contento con lo que decía Zack, pero tampoco se veía enojado. De hecho, expresaba mucho alivio y tranquilidad. Pero... ¿Matar a los otros por descuidarme?

—Yo... lo lamento. No debí ir.—no era culpa de ellos, al menos no del todo— No te pregunte, Kate, perdóname

—Amber,—Nathan paso junto a su esposa para darme una palmadita en la cabeza— Eso no importa ahora. Lo importante es que estas bien. Y... que Andrew aprendió una lección importante.

—Si,—Zack asintió—No la cagues o te cagaran a ti.

Kate le dio un golpecito en la cabeza. Me di cuenta que Paul apretaba los labios.— Igual, siento que fue mi culpa tambien... ¿Dónde esta el?

—¿Por qué no vas a hablarle?—me dijo Paul, señalando la puerta.— Ya estas vendada, y sanando. Le hará bien verte de pie, ha estado algo preocupado. Alivia un poco su conciencia. 

Zack se rio— ¿Y si mejor la escondemos y le decimos que se murió?

Antes de salir, oí que Paul y Nathan hablaban en voz baja. — No te preocupes, hablare con el.

Lycans I: EclipsisDonde viven las historias. Descúbrelo ahora