Capítulo 54

40 7 0
                                    

Miércoles, 28 de diciembre.


Se acabó la estancia en mi tierra. Ya volamos camino de Londres otra vez.

Estos últimos días han pasado demasiadas cosas:

Para empezar, mis padres han renovado sus votos matrimoniales en las Vegas. Todo fue una sorpresa, mi hermano y yo no teníamos ni idea. Y es que mis padres ahora que cada parte de la familia se ha independizado, han querido revivir el día de su boda junto a nosotros, pero con algo más de gracia. Parecen gente seria por su estamento social y sus trabajos, pero saben como pasarlo en grande, al igual que comportarse cuando deben hacerlo.

Por otra parte recibí una llamada que me impactó demasiado. Esa conversación telefónica contenía la noticia de que Eric está desaparecido. Después de nochebuena, él le dijo a su madre que iba a salir a dar una vuelta con el grupo de amigos que tenemos en común, pero un par de días después nadie sabía nada de su paradero, no contestaba a las llamadas, ni recibía mensajes. Eric ya había hecho esto antes según su padre, le gustaba evadirse del mundo durante un día que cogía libre en el trabajo, pero siempre avisaba antes de hacerlo para no preocupar a nadie. Evidentemente, esta vez no había sido así. Lo primero que hicieron sus familiares más cercanos fue ir preocupados hasta mi ático, allí su intención era preguntarme si sabía dónde se hallaba su hijo. Eric les había vendido a sus padres una gran película sobre nuestra relación. Les había hecho creer que éramos novios en secreto, al margen de mi relación con Louis, que según él, era una tapadera para ganar dinero, había dicho incluso algunas noches que no iba a dormir en casa porque se quedaba conmigo, cosas de las cuales yo no tenía la más mínima idea. Ash fue quien conoció toda la historia de primera mano, y ella misma desmintió que todo lo que él había inventado es totalmente falso para posteriormente hacerme participe de esto a mí también. Tuve que tener la sangre muy fría para desentenderme del problema, me ha hecho mucho daño con sus actos y sus continuos intentos de boicotear mis relaciones con otros chicos. Aunque por una parte me preocupa, puede que simplemente haya decidido evadirse del mundo por un tiempo o también puede que haya tomado una decisión límite y eso me da miedo. No sé qué se le habrá pasado por la cabeza para hacer esto, pero sea lo que sea no quiero verme involucrada. Quizá sea un ser detestable por esto, pero creo que ya he padecido bastante junto a esa persona. No quiero personas como él en mi vida como ya le aclaré.

Y para terminar he podido disfrutar de mi novio y mi familia al máximo. He conseguido recargar las pilas para volver a la que desde principios de verano es mi casa. Tengo ganas de ver a Ash, saber cómo va todo con Hale, que la ha dicho su familia sobre la idea de tener un bebé... Parece mentira, pero he echado de menos Londres, esa ciudad ha marcado un antes y un después en mi historia, siempre he querido hacer lo que ahora estoy viviendo, pero jamás podría imaginarme que sería así.

Sobre tierras londinenses de nuevo Louis toma el volante y conduce hasta mi casa. Aquí aún es de madrugada, así que vamos a aprovechar para descansar un poco e intentar volver a coger el horario de la ciudad.

-¡Alice!- viene corriendo a mí. -Te he echado de menos- me abraza mientras me rasco los ojos intentando despertarme y saber que está pasando.

-¡Sch! Lo vas a despertar-.

-¿Está en tu cama?-.

-¿Dónde quieres que esté si no?-.

-Ya se me había olvidado que seguís justos- se ríe. -Por cierto, de nada-.

-¿De nada por qué?-.

-Fui yo la que ayudó a Louis a reconquistarte-.

-¡Eres una lianta!- la suelto un pequeño golpecito en el hombro. –En fin. ¿Cómo ha ido todo por aquí?-.

Caprichoso destino I: ¿Quién eres? Donde viven las historias. Descúbrelo ahora