Capítulo 41

74 13 0
                                    

Viernes, 2 de diciembre.


Lo primero que veo al bajar del autobús es a él. No puedo ni mirarle a los ojos después de lo del otro día, pero es mi amigo y si no le saludo ni le hablo por la vergüenza se pensará que pasa algo raro y eso no es así.

-Buenos días Alice. ¿Qué tal has dormido? -.

-Poco, pero bien. ¿Tú cómo estás?-.

-Aún me duele la garganta y la cabeza me va a estallar, por no hablar de los estornudos, mocos y demás- se restriega los ojos. -La culpa la tiene nuestra salida al parque del otro día-.

-Fue idea tuya-.

-Pues cuando se me vuelva a pasar por la cabeza salir a tomar un helado en el banco de un parque en pleno invierno recuérdame que es una estupidez-.

-De acuerdo- me río. -Por cierto Albert, hoy no me esperes a la salida-.

-¿Por qué? -.

-Voy a acompañar a Ash a la ecografía y saldré una hora antes en autobús hacia casa, espero no llegar tarde-.

-No tengo problema en perderme la última clase un viernes y acompañarte-.

-Tú tienes que quedarte que ya faltaste ayer-.

-Diré que sigo enfermo, además puedo acercaros al hospital y así no perdéis tiempo yendo en autobús-.

-Eso es pasarse Albert, si vas a irte con que me dejes en casa vale-.

-De acuerdo, pues quedamos donde siempre antes de la última clase-.

-Vale. Mira por ahí llega Thom con Caroline- ando hacia el coche y saludo a la pelirroja después de desearle un buen día a mi antiguo compañero de pupitre.

Salgo de la facultad y ando hacia el punto de encuentro que marcamos Albert y yo hace unos meses después de despedirme de mi amiga. Pasado tan sólo un minuto se oye el motor del coche rugiendo con él en su interior, abro la puerta con sumo cuidado y acomodo mi cuerpo en el asiento tapizado en cuero del copiloto.

-He cogido un par de cafés para el camino, toma- me da una bolsa marrón de cartón con cuidado de no derramar nada. -Y ten cuidado que como se caiga mi padre me mata por mancharle el coche-.

-Yo siempre tengo cuidado con todo- mete la marcha y aprieta el acelerador para poner el vehículo en funcionamiento.

-¿Estás segura de que no quieres que os acerque al hospital?-.

-No hace falta. Te veo el lunes, ¿vale?-.

-Vale, adiós Alice. Y buen fin de semana-.

-Ciao-.

Entro en el portal y corriendo subo las escaleras en busca de Ash. Cuando paso por el recibidor dejo todo en el salón y salimos a prisa a coger el autobús. Si no queremos llegar tarde tendremos que coger el primero que pase o si no pasarán la cita a última hora y perderemos toda la tarde allí. Llegamos con antelación. Buscamos el área de ginecología. Nos sentamos en la sala de espera. Mientras esperamos, ojeo las redes sociales en mi teléfono móvil, algo está pasando con Louis en Twitter, pero no consigo enterarme bien de que se trata ya que el ginecólogo sale de la sala para llamar a Ash rápidamente y entramos a la consulta.

-Mira ese es el bebé, la cabeza, los bracitos y las piernas- señala la pantalla a la vez que habla. -¿Quieres saber el sexo?-.

-Sí- digo al instante sin poder aguantarme. -Perdón- provoco una pequeña carcajada en el doctor.

Caprichoso destino I: ¿Quién eres? Donde viven las historias. Descúbrelo ahora