Capítulo 22. [Detrás de ti]

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  — Buenos días, Adán, ¿qué estás haciendo?— Desperté temprano y vi a Adán solo sentado en la cocina.
  — Hola Alex, ¿madrugaste?.... estoy mandándole un e-mail a Sergio— Adán ni siquiera volteó a verme, se veía concentrado en lo que hacía.
— Pues, realmente no pude dormir mucho, ¿ya tomaste café?— respondí sin pensar en lo que dije. Adán respondió "sí" moviendo la cabeza. — Oye, ¿y cómo te sientes? ya sabes, con Sergio lejos y con Alberto aquí— me senté a lado de Adán ofreciéndole una taza de café.
  — La verdad extraño mucho a Sergio, pero me hizo prometerle que seguiría con mi vida y pues... con Alberto se siente raro pero él intenta ignorar el tema y entonces hago lo mismo, gracias Alex por preguntar— Adán me regaló una tierna sonrisa.

Adán y yo platicamos un rato acerca de Sergio, tomamos café y comimos pan tostado con mermelada de fresa.

— Alex, ¿qué te parece si le organizamos una reunión VIP a Ana?— 

— ¿Una reunión?— pregunté sin entender lo que quiso decir Adán.

— Si, invitar a sus amigos más cercanos aquí a la casa y uhmm hacer una comida o algo, pero tranquilo, no una fiesta, ¿me explico?— Adán se estaba proyectando

— Ahhh si, ¡qué buena idea! Estoy segura que la hará feliz— sonreí sin ganas. — Pero yo no conozco a sus amigos, creo que sólo a Mishell— 

  — Por eso no te preocupes, yo mandaré la invitación a sus amigos, ¿qué te parece mañana? para que nos de tiempo de organizar— dijo Adán.
— Claro que sí— 

Ana despertó casi a medio día, ella ni siquiera me ve a la cara, ella está triste porque piensa que me está lastimando, lo puedo sentir... se siente confundida y yo lo único que puedo hacer es permanecer a su lado y demostrarle que la amo y que no la abandonaré. Le sonrío cada que tengo la oportunidad, ella me responde la sonrisa. Adán y Alberto están viendo su serie American Horror Story. Estoy esperando a que Ana salga de la ducha para invitarla a salir, sólo nosotras dos. 

  —  Qué linda te ves— le dije a Ana quien estaba cepillando su cabello. Ella sonrió tiernamente pero no dijo nada. Me acerqué a ella y la abracé por la espalda, Ana cerró los ojos.

  — Recuérda que te quero muchísimo— susurré en su oído. Ana se volteó quedándo frente a mi, me regaló una sonrisa, puso sus manos en mi rostro y se acercó lentamente sin dejar de ver mis labios hasta que estabamos besándonos. Yo la abracé fuerte por la cintura.

— Siempre lo recuerdo, yo te quiero más— dijo Ana cuando el besó acabó. Siguió cepillando su cabello. Yo me senté en la cama para verla. En serio disfruto mucho verla, es tan hermosa.

— No sentí cuando te levantaste, extrañé verte al despertar— dijo Ana.
— Te veías muy linda dormida, no quise despertarte— Ana se sonrojó. — Por cierto, ¿qué te parece si salimos tú y yo juntas hoy?— le propuse nerviosa.

— Me encanta la idea mi amor, ¿cómo una cita?— Dijo Ana emocionada. Fue inevitable sonreír.
— Siii, podemos ir al cine, a comer, al parque, a donde tú quieras— me puse de pie y fui a abrazarla, las dos nos estabamos abrazando por la cintura.
— Si si, me encanta— Ana me besó.

Ana y yo fuimos primero al cine, es lunes así que no había mucha gente. Vimos la película, nos dimos un par de besos dentro del cine, la película era de risa así que la disfruté mucho, además Ana se rie por casi todo y no dejó de reírse durante toda la película. 

Caminamos a un parque de diversiones, Ana tomó mi mano y la balanceaba al ritmo de su caminar, ella se veía feliz y yo también lo estaba. Subimos a casi todos los juegos.

ELLA ES MÍA. (LESBIAN)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora