Llegamos a casa de Adán, al parecer la cena navideña fue una hacienda y su casa estará sola ésta noche.
Sentí unas manos frías tapando mis ojos. Mi corazón se empezó a acelerar.
— ¿Eres tú?— pregunto con cautela y en tono bajo. Las manos desaparecen, mi giro con miedo. Algo en mí se desilusiona.
— ¡Alexandra! Hace tanto que no te veía, la verdad moría de ganas de saludarte, veeen, dame un abrazo no seas tímida— dijo la chica. Luke llegó y sonrió al vernos, me abrazó, le correspondí el abrazo no como hubiese querido porque creo que yo esperaba que fuese alguien más.
— Angie, qué gusto verte...— respondí aturdida, Camila llegó.
— Está increíble esta fiesta, todos son muy amables— dijo Cams con inocencia y amabilidad. Me tomó de la mano, Angie frunció el ceño.
— Oh, mira Angie... te presento a Camila, mi novia.— dije con firmeza, Camila la saludo con gusto.
— Un gusto Camila, yo soy Angie... prima de Adán y de... Ana— dijo ella esbozando una sonrisa cordial.
— Ahh, no te había visto antes y eso que soy buena amiga de Adán y Ana, bueno, cuando vivíamos aquí saliamos juntos todo el tiempo— comentó Camila.
— ¿En serio? que raro, vine hace tiempo y no tuve el gusto de conocerte, cuando conocí a Alex, lo que es curioso porque ella estab...— tuve que interrumpir a Angie.
— Bueno, después platican, o platicamos todos, ¿vamos por algo de tomar o qué?— dije yo. Las chicas me ignoraron.
— ¿Y Ana también está por aquí? No me ha tocado saludarla— preguntó Camila.
— No, es la única de los primos que no vino... ahora es una chica ocupada y desde que se casó...— dijo Angie.
— ¡¿ANA SE CASÓ?!— grité sin pensarlo. Camila me volteó a ver con una mirada extraña. Angie se echó a reír.
— Sí, se casó con su arte, no me dejaste terminar... como decía, se casó con su arte y ahora es su prioridad, no tengo idea si vendrá en éstos días, quizá no, no lo sé... pero, ahora sí ya me enfadé de hablar, ¿vamos por unas bebidas?— le dijo Angie a Camila.
Yo estoy avergonzada y me siento estúpida. Camila se va con Angie. Adán pasa por un lado mío, le quito su bebida de la mano y entro a la casa. Fui directo a la habitación de Ana, está cerrada con llave. Por suerte, yo me sé un truco para abrirla. Lo hago, entro y cierro de nuevo.
Qué diablos, ¿qué pasó con todas las cosas de Ana? No hay nada, aún así sigue oliendo a ella. Sigo viendo, incluso el tapíz de su habitación está arrancado, su colchón no está, solo la base de su cama, su librero... no hay ningún libro en él siendo que Ana lo tenía repleto. Sus pinturas, no extraña que no estén ya que a eso se fue. Está todo lleno de polvo, papeles y ropa en el suelo. Como si nadie hubiese entrado aquí desde que ella se fue. Camino por su habitación, no hay ningún recuerdo mío aquí, nuestras fotografías, mis regalos, no hay nada. Me siento en el suelo. Tomo un pedazo de papel que está tirado y arrugado a mi lado, lo extiendo para hacer un avión de papel con él. ¿Ticket de vuelo? ¿hay un boleto de avión tirado en la habitación de Ana?. Está demasiado arrugado para leerlo, lo extiendo lo más que puedo.
Mi sorpresa cuando vi el destino y la fecha de salida.
¡Soy una estúpida, soy una estúpida! ¿cómo me atreví a hacerle esto? ¿cómo no me di cuenta? ¿por qué? ¿por qué? ¡Dioooos, soy una idiota! — Empecé a decir por toda la habitación, guardé el ticket en mi bolso y salí de allí. En el pasillo me encontré a Camila.

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ELLA ES MÍA. (LESBIAN)
Romance¿Quien era Alexandra Stone? -Hola Alexandra, mi nombre es Ana, aún no me conoces, pero soy esa chica de la cual te vas a enamorar sin remedio.- -Vamos, Alex, arriésgate. Te lo dice Alberto, tu futuro mejor amigo.- -¿Por qué la amarías a ella? Uno n...