— ¡Chicaaaaas! ¡dense prisaaa por favooor! ¡Se nos va a hacer tardeee!— gritaba Adán
— ¡YA VAMOS! ¡NO NOS PRESIONES!— grité desde el probador de una tienda de ropa.
— Llevan horas adentro, ya me aburrí, creo que voy a morir, no puedo respirar— bromeaba Alberto
— Qué poco pacientes son, ¿ya salió Ana?— salí del vestidor
— No, y metió como tres vestidos más— dijo Adán fingiendo llorar
— Yaaa yaa ya estoy aquí, que molestos son eh— salió Ana del probador algo irritada. Todos nos empezamos a reír. Ana se ve muy tierna cuando está molesta
— ¿Ustedes ya decidieron que van a usar?— pregunté a los chicos.
— Si, vamos a usar éstos trajes— dijo Alberto apuntando al sofá donde estaban sus trajes. — Lo decidimos desde que entramos a la tienda de antigüedades.— puso los ojos en blanco.
Estamos en una tienda de antigüedades. Alberto tuvo la idea de que cada uno iba a elegir qué hacer un día, es decir, todos tendremos un día para elegir qué hacer. Evidentemente hoy es el día de Alberto y escogió que nos vistieramos como si vivieramos en los 50's y salieramos así todo el día.
Adán se veía guapísimo, su cabello está un poco largo así que se lo peinó y le quedó increíble. Alberto también se ve muy bien, los pantalones se les ven increíbles, muy graciosos. Ana trae un vestido de muchos colores y se peinó el cabello pues, diferente y se ve jodidamente hermosa.
Salimos de la tienda ya vestidos, el señor que nos atendió nos veía con asombro jaja cuando salimos todo mundo nos veía de la misma manera. Al principio fue vergonzozo pero después empezamos a disfrutarlo, en especial Alberto.
Entramos a una cafetería para comer algo. Los meseros sonrieron al vernos entrar. Nos atendió una chica muy linda, le sonreí sin querer. Ana me vio feo.
— Hola chicos, ¿qué les traigo?— preguntó la chica.
— Hola, yo quiero la orden dos del menú por favor.— dijo Alberto
— Yo también quiero eso— Adán le dijo amablemente.
— ¿Y para ustedes señoritas?—
— Yo quiero la órden uno por fa— pidió Ana.
— ¿Qué me recomiendas?— le pregunté a la mesera. Ana puso los ojos en blanco.
— Pues, yo diría que el ceviche lo hacen muy sabroso aquí— respondió la mesera sonriéndome.— Entonces pido ceviche— le guiñé el ojo a la chica. Ana empezó a toser.
— Oh, y algo para tomar por favor, creo que mi novia tiene algo en la garganta— dije. La mesera se fue.
— ¿Estabas coqueteando con la mesera?— me preguntó Ana molesta pero bromeando.
— Jaja tal vez un poco, pero es por el disfráz, se ve super hetero la chica— respondí.— Uhmm uhmmm "se ve super hetero la chica"— Ana me imitó. Voltee su rostro y la besé. Ella sonrió.
— Aquí están sus bebidas- la mesera llegó con cuatro bebidas que se veían muy adornadas.
— Woow que bonitas se ven, de seguro les pasaste tu belleza, gracias nena— Alberto le coqueteó a la chica.— Jaja no es nada, por cierto, éstas van por parte de la casa, que las disfruten— me guiñó el ojo. Me sorprendí.
— Así que hetero ehhh— Ana me estaba reclamando, la abracé
— Jajaja perdón amor—
— ¿Qué sucede con las chicas?— dijo Alberto indignado. Todos empezamos a reírnos.
ESTÁS LEYENDO
ELLA ES MÍA. (LESBIAN)
Romansa¿Quien era Alexandra Stone? -Hola Alexandra, mi nombre es Ana, aún no me conoces, pero soy esa chica de la cual te vas a enamorar sin remedio.- -Vamos, Alex, arriésgate. Te lo dice Alberto, tu futuro mejor amigo.- -¿Por qué la amarías a ella? Uno n...