Es tan aburrido esperar el fin de semana porque de igual manera duermo en la escuela pero hoy irá Renne a dormir con Mariana y conmigo, por alguna razón Renne me tiene prohibido ir a su habitación. Mariana y Renne fueron a conseguir comida de contrabando, en lo que llegan me ducharé.
Terminé de ducharme ¡diablos! olvidé meter la toalla, me asomó con cuidado para ver si las chicas no han llegado, veo que la habitación está sola así que salgo desnuda, ¿dónde dejó Mariana las toallas limpias?. Escucho unas pisadas que se acercan a la habitación, ¿esa es la voz de Mariano? ¡diablos! ¿qué hago?, me escondo donde puedo.... ¿en serio, Alex? ¿debajo de la cama es lo mejor que se te ocurrió?.
— ¿Entonces me dejarás escabullirme por la noche?—
— ¡Ya te dije que no!—
— Pero.... bien que yo te ayudé en París con aquél chaval que te gustó—
— ¿Bromeas? no inventes Mariano, lo golpeaste ¿no recuerdas? y además ni siquiera estabamos haciendo nada...—— Lo sé, porque lo impedí, ningún aprovechado pondrá sus manos sobre mi hermanita...—
— Jaja estás loco, mejor vete... y dile a Renne que ahorita iré a ayudarla a traer las cosas—¿Mariana tuvo un romance en París? Eso no nos contó. Escucho como la puerta se cierra y desde donde estoy solo alcanzo a ver los pies de Mariana, ella se acerca a su cama y saca una cajita, por poco me ve, me da un poco de pena que me vea desnuda, mejor espero a que se vaya por Renne. ¿Qué será esa caja que Mariana tomó?. Intento asomarme un poco, ella está sentada en su cama pero no alcanzo a ver más.
Escucho a Mariana susurrar;
"Odio esta fecha, me obligas a extrañarte y a odiarte. Como quisiera poder olvidar el día en que decidiste marcharte... ¿por qué me dejaste? ¿por qué me dejaste enamorarme de ti? ¡Fuiste tan cruel! Y no, no me sentiré culpable, yo estaba dispuesta a luchar por ti y lo sabías... nunca te perdonaré lo que hiciste, nunca voy a perdonar que me hayas dejado sola después de todo lo que vivimos, odio tu sonrisa, odio tu mirada, odio tu risa y odio tu voz, odio todo lo que me gustó de ti, odio esa mirada que me lanzabas para enamorarme y odio las tardes en las que nos escapabamos y tú me cantabas, se supone que ibamos a ser incondicionales, te odio a ti... "
¿A quién le dice todo eso? ¿Mariana está hablando sola? ¿a caso está llorando? Dios, su voz suena con mucho dolor, parece que cada palabra le duele. Mariana regresa la caja a donde estaba y después sale del cuarto. Aprovecho y salgo de inmediato, me visto y veo eso que Mariana sacó de debajo de su cama, es un cofre pero tiene candado. Ella lloraba, le lloraba a algo que tiene aquí dentro, me pregunto que será. Mejor lo guardo en su lugar, no vaya a ser que llegue y se me arme.
Después de casi una hora Mariana y Renne llegan al cuarto. Fue como una pijamada. No puedo dejar de observar a Mariana y lo feliz que aparenta ser, ni siquiera parece que la escuché llorar y hablarle a alguien hace una hora. Ella me ve también y parece que le incomoda que la vea. La noche se nos pasa entre largas platicas, juegos y claro... peleas jaja.
— ¿Alexandra? ¿estás despierta?—abro los ojos y tengo el rostro de Renne casi en mi cara. Doy un pequeño salto del susto.
—Sí, ¿qué pasa?—pregunto casi dormida.
—Son las doce del medio día, tienes que cambiarte ahora...- dice ella.
—¿Qué? pero es domingo-—Sí pero, hay asamblea... ahora cambiate, te van a sancionar si no vas y ya es tarde— Renne me toma la mano y me jala con fuerza para moverme. Me pongo de pie y me alisto y sigo a Renne hasta la plaza donde son las asambleas.
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ELLA ES MÍA. (LESBIAN)
Romance¿Quien era Alexandra Stone? -Hola Alexandra, mi nombre es Ana, aún no me conoces, pero soy esa chica de la cual te vas a enamorar sin remedio.- -Vamos, Alex, arriésgate. Te lo dice Alberto, tu futuro mejor amigo.- -¿Por qué la amarías a ella? Uno n...