Capítulo 33

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Narra Fred

Hace una días que Emily se fue... y todavía no me acostumbro a no verla por las mañanas, a que no sea ella quien abra las cortinas...

Pero bueno, nos mandó una carta ayer, y parece bastante feliz, eso es lo importante.

Queridos Weasley:

¡Bulgaria es impresionante! Es muy verde y alegre, aunque no lo parezca. Pero hace algo de frío a pesar de que estamos en verano.

Ya hemos entrenado tres veces, y el equipo es simplemente genial, somos como una gran familia, ¡y eso que acabo de llegar!

El campo es dos veces más grande que el de Hogwarts, y las gradas son altísimas, puede que incluso más que las del mundial de quidditch. (Es broma, sólo hay plazas para 20.000 personas)

Todavía no hemos visitado Durmstrang, Kratos (el entrenador) dice que es mejor su me centre ahora en el quidditch. En cuanto visite la escuela os cuento los detalles de cómo es.

¡Os echo de menos!

Fdo Emily

P.D: ¿Sabéis dónde está mi madre? Le he mandado una cuantas cartas, pero no responde.

También hoy ha llegado una carta... una carta para mí... casi me tiro sobre ella en cuanto la vi atada a la pata de su lechuza.

Freddie:

Me encanta el collar, no me lo he quitado en todo lo que llevo aquí, y mis intenciones siguen siendo manteneros cerca de mi corazón, así que puede que nunca me lo quite.

No sabes lo que os añoro. Es extraño no levantarme en la misma habitación que vosotros... Pero bueno, todo está yendo de maravilla, aunque espero no cansarme demasiado, parece que vamos a estar entrenando todos los días.

¿Qué tal van las cosas por allí? ¿Qué pasó con Harry? ¿Vive ahora con vosotros? No le habréis mandado de vuelta a la casa de sus tíos ¿verdad?

Ah, por cierto, Víktor me ha dicho que le digáis a Hermione que la echa de menos, está muy enamorado, ¡qué mono!

Te quiere, tu pequeña

Sonrío sin pensar. Por muchas cosas que pasen, Emily nunca va a dejar de ser Emily:

-¿Y eso?-pregunta mi hermano.

Sin rechistar, le entrego la carta y dejo que la lea:

-Siempre tan tierna... se nota que ya no está por aquí ¿eh?

-Ya...

-Lo del collar fue buena idea.

-Si, me alegro de que me diera tiempo a dárselo.

-... Nunca la vas a olvidar ¿verdad?

-¡Por Merlín George! ¡Es nuestra mejor amiga! ¿¡Cómo podría-

-Sabes que no me refiero a eso, idiota.-ríe.-la quieres, y la querrás por siempre.

Suelto un gran suspiro:

-¿Y qué le voy a hacer? Nadie puede elegir a quien amar. Se acepta o no, pero no se elije.

Mi gemelo levanta la comisura izquierda de su boca:

-¡¡Fred, George!! ¡¡A cenar!!-grita mi madre desde abajo.

-¡¡Ya vamos!!-respondemos a la vez.

(...)

-¡Harry!

El peli-negro se da la vuelta al oír su nombre:

-Que sepas que Emily ha preguntado por ti. Tenía miedo de que te hubiéramos devuelto con tus tíos.

-Oh, no. Eso no sucederá mientras yo esté aquí.-interrumpe mi madre.

Harry sonríe:

-Pues decirle que estoy perfectamente, y que me alegra saber que ha llegado bien a Bulgaria.

(...)

El jardín está siendo el lugar en el que más tiempo paso estos días. Me gusta sentarme en la verde hierba, y que las plantas me rocen la cara. Cuando hay nubes me gusta intentar buscarle un sentido a su forma... Estoy muy vago ¿no?:

-¡Fred!¡Fred!¡Fred!¡Fred!¡Fred!

-Que, que, que, que, que.

-Ven a jugar al quidditch, si no somos impares.

-¿Ron no juega?

Ginny niega con la cabeza, y yo la sonrío:

-Entonces no me queda más remedio que machacar al equipo contrario.

Apoyo las manos en el suelo, dándome el impulso suficiente para ponerme de pie. Allá vamos.

(...)

-No sabía que supieras dibujar así.

-George, a veces estás más guapo callado.

-Bueno, no te enfades. Ni que fueras Snape.-bromea.

Yo suelto una pequeña risa mientras sigo haciendo trazos y sombras en el papel:

-Te está quedando muy bien.

-Gracias.

-Al menos se la reconoce.

-Gracias.

-¿Te voy a tener que estar aguantando así hasta que volvamos al castillo?

-Gracias.

Al darme cuenta de lo que acabo de decir, me entra la risa floja. Mi hermano también se ha empezado a reír. No lo pienso mucho y le tiro un cojín que tengo cerca, sin apartar la vista del folio:

-Sí que estas concentrado... mejor te dejo.

-...

-... Que sepas que le encantará.

-¿Cómo sabes que se lo voy a mandar?

-Llamémosle instinto de gemelo.

Acto seguido sale de la habitación, dejándome sumido en un cómodo silencio. Solamente se puede captar el suave sonido del lápiz.

Empecé a dibujar hace unos años. Cuando estás aburrido en clase viene muy bien, pero obviamente no muchas veces me he puesto a dibujar retratos en plan... en serio, por así decirlo.

No he podido resistirme... he dibujado un retrato de Em. Su pelo rubio inunda los hombros, y sus ojos brillan debido a su enorme sonrisa... Merlín, esto lo voy a llevar peor de lo que pensaba...

Jokes And Sugar (Fred Weasley)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora