Always and Forever

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Unas nubes negras de tormenta cubren el cielo, amenazando con un fuerte chaparrón.

A mediados de verano, no es muy normal, y con razón. No es algo natural, sino que es un efecto secundario del descontrol de mi magia.

He estado practicando con el mayor de los Mikaelson cada día. Cuanto antes empiece a controlar mi magia, antes parará el dolor y los desastres.

Le costó bastante convencerme de que empezáramos a practicar. Viendo los resultados de las últimas veces, temía que el demonio en mi volviera a salir.

Elijah, viendo lo asustada que estaba, me dijo : <<Los miedos hay que afrontarlos. Es la única forma de que se marchen>>.

Era más duro de lo que pensaba. Se ha encargado de que pierda los estribos, tocando mis puntos débiles ; la muerte de mi padre, las mentiras de mi madre, Kol... Incluso Niklaus.

Lloré más de una vez, furiosa, y puedo jurar que algunas veces tuve ganas de matarlo por decir cosas tan crueles.

Pero ahora lo agradezco. Me ha presionado tanto, llevándome al límite, que soy capaz de controlarme en cualquier situación. Mi magia oscura y yo, ahora somos uno.

Cuanto más tiempo paso junto a Elijah, más me convenzo de lo atractivo e interesante que es. Siempre se mueve con una mezcla de tranquilidad, y seguridad. Es amable, pero también firme.

Admiro eso de él. Yo soy una extraña mezcla entre timidez y carácter.Suelo caminar con los ojos puestos en mis zapatillas, evitando la mirada de la gente, pero en otros momebtos me transformo en una chica segura y confiada de mí misma.

Aún no tengo claro lo que siento por Klaus, pero tampoco lo que estoy comenzando a sentir por Elijah.