Tras explicarle a mamá que debo ir a trabajar ya que Matt Donovan me ha cubierto en el turno de ésta mañana, salgo en dirección al Grill.Está un poco más lleno de lo normal, pero eso no me importa.
Sonrío y saludo a todos mis compañeros. Hoy estoy algo más feliz de lo normal.
- Aider, ¿ te encargas de la barra ? - me dice Evelyn, más como una orden que como una pregunta, y yo asiento enérgicamente.
Dos semanas. Ese es el tiempo que ha tenido que pasar para que comience a sentirme cómoda en esta ciudad. Para sentirme como en casa.
- ¡ Eh, rubita ! - me giro en dirección al chico de ojos azules que me hace unas señas- ¡ Dos de bourbon cuando puedas !
Me acuerdo de él, y del chico a su lado. No es la primera vez que vienen aquí.
De hecho, creo que pasan más tiempo en el Grill que en su propia casa.
Bueno, cuantos más clientes mejor.
Abro una botella y lleno los vasos de tubo.
- Aquí teneis - sonrío dejándolos con cuidado sobre la encimera.
- Gracias, preciosa - me guiña el ojo con una sonrisa ladeada.
Su amigo le da un codazo en el brazo, y los dos se ponen tensos mirando en dirección a la puerta.
- El mediano de los Mikaelson- dice el del pelo castaño, apretando los puños.
Al escuchar ese apellido mis ojos se mueven inconscientemente hacia la puerta.
Los ojos del recién llegado se cruzan con los míos, y una sonrisa se expande por su rostro casi de inmediato.
- Buenas noches, Aider - me saluda, apoyándose en la barra.
- Koln - le correspondo la sonrisa - ¿ Vienes a tomar algo ?
- No. En realidad, venía a pedirte una cita - dice tranquilamente.
Estoy segura de que si estuviera bebiendo algo, lo escupiría.
- ¿ A mi ?- pregunto sorprendida - Solo me has visto dos veces, Koln, no me conoces.
Él sonríe pícaramente, y se encoge de hombros.
- ¿ Y para qué están las citas entonces ? Para conocerse.
Koln aguarda, y yo me quedo mirándolo.
- Vale - reacciono - sí, por qué no.
- Ya te llamaré, entonces - me avisa, irguiéndose.
Lanza una mirada poco agradable a los dos chicos a los que estaba atendiendo.
- Salvatore - dice fríamente, moviendo la cabeza hacia arriba a forma de saludo.
Ellos no responden, si no que se limitan a observarle marchar.
Una vez que Koln desaparece, se vuelven hacia mi.
- ¿ Lo conoces ? - preguntan extrañados.
- Es el hermano de mi mejor amiga - les cuento encogiéndome de hombros, y ellos se miran entre sí.
- ¿ De Rebekah ?
- Ajá - confirmo distraídamente - ¿ También la conocen ?
- Un poco - susurran, dándole un sorbo a sus bebidas a la vez como para evitar el tema, de forma algo sospechosa.
ESTÁS LEYENDO
Always and Forever
أدب الهواة#40 en Vampiros 15.11.16 Desde el principio de los tiempos, el ser humano siempre ha intentado explicar lo sobrenatural. Algunos lo llaman mitología. Otros, milagros. Fe. Lo que muchos ignoran, es que la mayoría de los mitos urbanos son ciertos. Vam...