Camila POV
Querida Lauren:
Esta es la tercer noche seguida en la que he llorado casi hasta quedarme dormida. Recuerdo que una vez te mencioné que mi amiga más cercana había cambiado conmigo y tú me dijiste "las personas siempre cambian". En su momento no entendí por qué ésas palabras saliendo de ti me dolieron tanto. Hoy puedo decirte que lo entiendo más de lo que me gustaría.
Crecer y cambiar son dos cosas diferentes. Se puede crecer sin cambiar y cambiar sin crecer, ¿cómo lo sé? He estado en ambos lados de la moneda. Permíteme abrirte un poco más mi vida...
Cuando era más joven, entre los 13 y 15, tendía a revolver mi mente con todo. Mezclaba mil asuntos diferentes en mi cabeza y terminaba dañando a mi alrededor. Todas aquellas personas que me rodeaban jamás tuvieron un gramo de culpa acerca de lo que estaba pasando conmigo tanto en la escuela como con mi familia y "mis amigos". Un sin fin de veces me clavaron una estaca directo al corazón y tuve que cambiar a alguien más impenetrable y reservado a pesar de ya serlo. Y ése fue mi primer error: cambiar porque algunas personas me lastimaron... cambiar como si todos hubieran conspirado en mi contra.
Mi alrededor no tiene la culpa de las batallas por las que esté pasando o incluso haya pasado. Mi alrededor no tiene la culpa acerca de los golpes que recibí de mi padre, de los insultos que recibí en la secundaria, de las veces que mi hermano me toqueteó, de las veces que mis relaciones fracasaron, de las veces que mi madre se burlaba de mí frente a mi propia familia... y es ahí donde descubrí mi segundo error: debí crecer y no cambiar.
¿A qué voy con todo esto? Sé que tuviste que irte a Colombia para estudiar la carrera de tus sueños... para ser una preciosa Ingeniero Mecatrónico. Una carrera que creó el mismísimo Satán solo para los más valientes. Me enorgullece decir que tú has logrado pasar el tiempo de prueba y sigues ahí. Algún día podré presumir que la mismísima Lauren Jáuregui, alias mi novia, es una brillante chica que supo sacar adelante todo. La universidad es difícil... nadie dijo que sería un lindo paseo en el parque, pero incluso aunque sea complicada, debe disfrutarse. ¿Por qué desesperarse cuando algo no sale bien? Así aprendes y agarras más experiencia y conocimiento. Deberías ver a los que están conmigo y están repitiendo el grado: en lugar de estar tristes, están animados porque podrán aprender más y saber más.
Sin embargo, aquí hay un problema: separar tu familia, tu universidad y tus amigos de tu alrededor. ¡Ha! Si supieras el número de veces que grité, insulté, cambié y pisoteé a mi alrededor por exactamente lo mismo por lo que tú estás pasando. Hay batallas que deben ser tuyas, que deben ser internas; hay batallas que tu alrededor no necesita saber que estás luchando. Yo también tengo batallas: batallas que tú conoces demasiado bien y otras que permanecen bajo mi dominio porque de otra manera te afectarían, batallas que tengo con mi mente y mi personalidad tan impredecible. Y no por eso he dejado de ser cariñosa contigo, ni he dejado de mimarte, ni de cuidarte a pesar de la asquerosa distancia. Evito contarte algunas veces cómo me siento porque desde hacía tiempo atrás sabía que algo andaba mal; ese don siempre ha estado conmigo y no sé si es una bendición o una maldición.
Tengo que ser fuerte y paciente por ti y por mí. Te prometí simbólicamente con un anillo que estaría siempre para ti y aunque, como te dije apenas ayer, me cague mil veces en mí misma, estaré presente. No sé cómo ayudarte porque por lo que estás pasando es algo que solo tú puedes decidir resolver o decidir seguir dándole vueltas. Lauren, somos demasiado jóvenes aún. Hay mil cosas diferentes por vivir. ¿Por qué torturarse? La universidad debe ser una de las cosas más maravillosas que pueden pasarte. Lo sé de primera mano puesto que yo ya llevo más de un año y medio en mi carrera. Aunque, no debería atreverme a comparar algo tan diferente como tu carrera y la mía.
Regresando al tema, es preciso que sepas y aprendas a dejar ciertas cosas ir o de otra forma perderás otras y te darás cuenta de ello cuando sea bastante tarde. Demasiado tarde para soltar un te amo, un lo siento, un no te vayas. Lo viví y hasta ahora lo vengo entendiendo, de hecho, me atrevo a decir que nunca me sentí más sabia en mi vida... a ésta edad estoy entendiendo todo lo que pasé y por qué fue como fue: me ayudó a crecer como persona y ser lo que hoy soy.
Lauren, por favor, eres hermosa y joven como para torturarte. Hay cosas que no puedes cambiar o mejorar, ¿por qué frustrarse por ello? Tú misma me dijiste que será lo que tenga que ser... entonces solo déjalo fluir.
Jamás olvides que puedes hablar conmigo de lo que sea. En el momento que tú desees puedes abordarme directamente acerca de cualquier tema y yo estaré ahí: leyendo o escuchando tus inquietudes, tus miedos, tus metas. Asegurándome que nada te falte y nada te pase. Karla Camila Cabello estará a tu disposición siempre. Ya sean asuntos familiares, amistosos o de la universidad: ahí estaré. Jamás olvides que ésta chica medio mexicana te ama como nadie en el mundo y que siempre verá por ti.
Con amor,
Tu novia.
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