36.-

1.5K 165 68
                                    

POV Omnisciente

Jaime y Nicolás ya se habían bañado y cambiado de ropa. Bajaron al primer piso para esperar a sus amigos, que en cualquier momento llegarían en realidad y no querían que los pillaran en ropa interior a los dos.

Cuando vio lo que el moreno decía era verdad sobre que solo estaban despiertos Álvaro y otros pocos, frunció el ceño y le dijo a Nicolás que fuera al living solo por mientras.

El moreno lo miró confundido pero asintió para luego irse al living y sentarse en uno de los sillones.

Jaime le hizo un gesto a Álvaro para que lo siguiera a un lugar algo lejos del living, para que Nicolás no escuchara.

-Jefe, si es por lo que hice el otro día...

-No se trata de eso.-Dijo el enojón con una pausa.-Igual hablaré contigo sobre eso, pero no ahora.

-Entonces de qué se trata?.-Preguntó Álvaro, algo confundido, mirándolo.

-Donde fueron los weones que cuidan esta casa?.-Preguntó el mafioso, con el ceño fruncido.

-Ayer fueron a una fiesta, algunos volvieron, otros no.-Respondió el amigo de Nicolás sinceramente. No podía mentirle a su jefe, este se daría cuenta de alguna forma y no quería meterse en más problemas ahora.

-Los que llegaron, no se han levantado?.-Preguntó el hombre de los ojos rojos, mirándolo directamente a los ojos.

-Eh, tienen resaca.-Contestó Álvaro, queriendo reírse pero no lo hizo igualmente.

El enojón lo pensó algo unos segundos y habló.

-Bien, tú con otros dos más vayan a despertarlos con el mayor ruido que puedan.-Dijo Jaime, tomándose un tiempo para seguir hablando.-Los conchetumadres creen que pueden ir a carretear en día de semana? Claro que no.

-Esta bien, señor.-Dijo el amigo de Nicolás, con una leve sonrisa, para luego ir a buscar a dos de sus amigos y compañeros.

Jaime fue a sentarse con Nicolás al sillón, quién estaba jugando con sus manos. Se notaba que estaba aburrido sin él.

-Pasó algo importante?.-Preguntó el pequeño moreno, mirándolo con algo de curiosidad, tomando la mano de este para comenzar a jugar con esta también.

-En realidad no, solo tenía que saber porque algunos de mis trabajadores no están acá y todo eso.-Respondió el enojón con una leve sonrisa, viendo como Nicolás se paraba de su asiento solo para sentarse en sus piernas y recostarse en su torso.

-Tú eres mi sillón personal.-Dijo el pequeño travieso, con una sonrisa y tono divertido.

-Me estoy dando cuenta.-Dijo el mafioso, en realidad gustándole bastante que su novio se siente en sus piernas.-Cómo a qué hora llegaran estos weones?.

-Chucha, no sabíamos que te caíamos tan mal.-Dijo el ruloso con una sonrisa, entrando a la casa con su mano entrelazada con la de Manuel.

Edgar cerró la puerta de la casa y siguió a su novio hasta uno de los sillones. Esta pareja si se sentó bien, uno al lado del otro.

-No es eso, pero ni dicen a la hora que van a llegar po.-Dijo el hombre de los ojos rojos riéndose, notando que Manuel le daba unas miradas algo cómplices.-Manuel, vamos a hablar, ahora.

Los dos se levantaron y se dirigían como a la oficina de Jaime en esa mansión hasta que Nicolás habló.

-Y no pueden hablar acá?.-Preguntó el moreno confundido.

Jaime y Manuel se miraron y negaron al mismo tiempo la cabeza. No dijeron nada más, solo siguieron caminando hasta aquella habitación.

Cuando Edgar y Nicolás escucharon que cerraban una puerta, el primero habló.

-Sabes qué les pasa?.-Preguntó el ruloso, algo extrañado.

-No, te iba a preguntar lo mismo.-Respondió Nicolás, en las mismas condiciones que su mejor amigo.

-Están así desde que los dos salieron juntos.-Dijo Edgar, intentando pensar en algo.

-Cuando salieron juntos?.-Preguntó el pequeño de Jaime, algo confundido.

-Ya sabes, ayer, cuando te fuiste a hacer el tatuaje.-Contestó su mejor amigo, notando que este no sabía nada.-Chucha, no te dijo nada de eso, cierto?.

-Jaime había dicho que no había salido.-Dijo el pequeño moreno, no entendiendo nada. Por qué Jaime le mentiría con algo así?.

-Debe haber una explicación Nico, no pienses nada malo todavía.-Dijo el ruloso, intentando animar un poco a su casi hermano.

-Es que no le encuentro el sentido en mentirme con respecto a que salió con Manuel.-Dijo el pequeño travieso con una ligera pausa.-Creí que confiaba en mí.

-Nico, no pienses eso. Hablamos del Jaime, debe tener alguna razón para mentirte.-Dijo Edgar, queriendo que su amigo dejara de ser tan terco en algunas cosas.

El recién nombrado asintió y Edgar de inmediato comenzó de hablarle de otras cosas. El primero solo asentía y se reía cuando su mejor amigo lo hacía, pero en realidad estaba pensando en otras cosas, y entre eso, estaba la razón de porqué su novio le mentiría en algo tan inofensivo.

Nicolás vio como algunos guardias salían de la casa. La mayoría tenían una cara de dolor por la resaca que nadie se las sacaba. También vio a Álvaro riéndose con otros dos amigos, con ollas en sus manos, pegándoles a estas afuera de la casa para que los compañeros de este se quejaran aún más por la caña.

Álvaro, minutos después, fue a dejar las ollas y vio a Nicolás mirándolo. Se detuvo un poco para sonreírle a este último y seguir caminando hacia la cocina.

-Le gustai a ese weón.-Dijo Edgar, cuando se aseguró que Álvaro no estaba escuchando ni nada.

-Es mi amigo no más.-Dijo el moreno, negándose en pensar que le gustaba a Álvaro.

-Que sea tu amigo no significa que no le gustes.-Dijo el ruloso, refutándole esto.

-Se están demorando demasiado.-Dijo el chico de los ojos violeta, levantándose para ir a la "oficina" de su novio. Era obvio que no quería tener esa conversación con su mejor amigo.

-Claro, líbrate de la conversación no más.-Dijo su mejor amigo, viendo como este iba a buscar a Jaime y Manuel.

Cuando vio la puerta de aquella "oficina", la abrió y al parecer ni Manuel ni Jaime escucharon que abrió esta última.

-No quiero seguir siendo el novio de Nicolás.-Había dicho su alma gemela, con una leve pausa.-Quiero ser su...

Nicolás cerró la puerta con despacio antes de escuchar la frase completa. Sentía un puñal en su corazón.

Era obvio que nada podía ser tan perfecto.

Mafia. (Jainico) Hikayelerin yaşadığı yer. Şimdi keşfedin