POV Omnisciente
Finalmente llegó la noche y ya todos estaban listos. Hasta algunos de sus amigos volvieron a sus casas para cambiarse de ropa y para volver a bañarse. Los únicos que se quedaron fueron Dean y Castiel, quienes ahora estaban sentados, los dos con un vaso con algún tipo de alcohol, conversando con sonrisas en sus caras.
-Apostemos.-Dijo Nicolás con una pausa, tomando una pausa, notando que tenía la atención de su prometido.-Cuanto tiempo se van a demorar estar juntos.
Jaime miró a Dean y a Cas unos segundos más.
-No lo sé, un día.-Dijo el enojón, diciendo su aproximación.
-Un día? No crees que es muy poco?.-Preguntó el pequeño moreno, mirando a su prometido.
-Haber, cuanto crees tú que se van a demorar?.-Preguntó el mafioso, sin contestarle nada, mirándolo con una ceja enarcada.
-No lo sé, tal vez dos semanas.-Respondió su pequeño, algo indeciso.
-Tanto tiempo?.-Preguntó el hombre de los ojos rojos, con un tiempo para seguir hablando después.-No se tú, cariño, pero yo sigo diciendo que un día, puede ser que un día y medio, pero no más.
-Esta bien, ya veremos.-Dijo el pequeño travieso con una sonrisa, para luego ver que Dean le tomaba la mano a su amigo. Fue en ese momento en el que empezó a dudar de su decisión.
Nicolás escucho como tocaban la puerta y fue a abrir para ver que ahí estaban Naiko con Keke, tomados de la mano.
-Hace mucho que no los veía.-Dijo Nicolás con un tono de sarcasmo y riéndose.
-Déjanos pasar oh.-Dijo Naiko también riéndose, pasando sin invitación ni nada.
-Claro, pasa no más.-Dijo el pequeño moreno, siendo algo cínico, casi cerrando la puerta cuando Keke ya había entrado pero lo detuvieron. El moreno vio a Edgar quien detenía que cerrará la puerta.
-Señor, nos puede dejar pasar?.-Preguntó Manuel con la voz más tierna posible, haciendo que Nicolás casi se derritiera.
-Pucha, igual me dan pena.-Dijo el chico de los ojos violeta con una pausa, haciendo que tenía lastima de ellos.-Esta bien, pasen no más.
-Gracias señor, se lo agradecemos.-Dijo Edgar, intentando hacer una voz kawaii.
El ruloso con su alma gemela pasaron y Nicolás finalmente pudo cerrar la puerta.
-No sé cuando llegó tanta gente.-Dijo el pequeño travieso, como casi quejándose.
-Si quieres, puedo hacer que dejen de molestar.-Dijo Jaime, tomándolo de la cintura para que se acercará más a él. Cuando estuvieron bastante cerca, el enojón miró los labios de su novio, queriendo besarlo.
-Tú podrías hacer algo mejor ahora mismo.-Dijo el moreno, casi susurrándolo, para luego sentir los labios de su pololo sobre los suyos. De inmediato se dispuso a corresponderle aquél gesto, con algo de necesidad, como si no se hubieran besado hace mucho.
Estuvieron así bastante tiempo. De hecho, el moreno sentía las manos de su novio debajo de su polera, acariciando su torso sin dejar ninguna parte sin haber tocado.
-Van a hacer una porno aquí?.-Preguntó Naiko, interrumpiéndolos, haciendo que se separaran.
Jaime gruñó en molestia y Nicolás frunció el ceño.
-Puta, tú igual eri mata-pasiones Naiko.-Dijo el moreno, quien estaba bastante bien en los labios de su novio.
-Nico! No le puedes decir a nadie eso, el Jaime te va a tener que castigar.-Dijo Castiel con el ceño fruncido.
-Cas, lo decía de broma...
-No intentes excusarte Nico, te tendré que castigar de cualquier manera.-Dijo Jaime interrumpiéndolo, intentando ser algo serio al menos.-No te preocupes Cas, el Nico no se salvará de esta.
-Gracias Jaime, Nicolás no puede seguir diciendo eso.-Dijo Cas, de verdad creyendo que aquello era algo malo. Pero Dean le explicaría después de que significaba realmente para que este no se confundiera más.
Nicolás se sonrojó, se cruzó de brazos y no dijo nada más. Quien salvó a Nicolás de la conversación fue el mismo que estaba enamorado de este.
Álvaro llegó al living, y al primero que se dirigió fue al moreno, para hablarle.
-Mis otros compañeros llegan pronto, tenían que hacer unas cosas afuera, creo.-Dijo Álvaro con una leve sonrisa en sus labios, mirando los ojos de Nicolás.
-Me alegro de que hayas venido.-Dijo el recién nombrado, también con una sonrisa en su cara.
-Todavía no puedo saber cuál es la sorpresa?.-Preguntó su amigo, ni siquiera notando las miradas amenazantes que Jaime le daba al estar algo cerca de su novio.
-Creo que sí lo puedes saber.-Respondió el pequeño moreno, viendo como Álvaro esperaba que dijera algo o hiciera algo. Nicolás dejó que Álvaro vea su mano, o mejor dicho su anillo de compromiso.
Álvaro miró el anillo por unos segundos y de verdad que sintió como su corazón se rompía. Sabía que nunca tendría una oportunidad con Nicolás, pero no se esperaba algo como eso en realidad.
-Me alegro por ti, Nico.-Dijo Álvaro con una sonrisa falsa, pero que no se notó. O al menos Nicolás no notó, pero Jaime sí.
-Y quiero que sepas de inmediato que te invito a nuestra boda, aunque ni siquiera tenemos visto cuando será.-Dijo el pequeño de Jaime, tomando la mano de este último, también sonriéndole. Había que ser bastante estúpido para no ver lo enamorados que estaban por los dos.
-Mientras antes mejor, pero supongo que ya lo veremos.-Dijo el mafioso con una leve sonrisa, intentando en no pensar lo obvio que sentía Álvaro por su prometido.
Jaime se sorprendió cuando volvió a sentir los labios de Nicolás sobre los suyos, besándolo lentamente. El enojón siguió el beso, sin ni siquiera pensar en lo que podría estar sintiendo su trabajador en ese preciso instante.
No era difícil adivinar como se sentía Álvaro, pero estaba bastante acostumbrado ya. Acaso conocen a Jaime y a Nicolás? Estos se besan demasiadas veces al día. Las veces que no lo hacían, era solo porque probablemente estaban enojados.
Edgar, sabiendo que a Álvaro le gustaba su mejor amigo, llamó al primero para que este hablará con ellos y que se olvidará de la pareja que se estaba besando como si no hubiera mañana.
Sabía como era ver a alguien del quien estas enamorado besar a otro.
![](https://img.wattpad.com/cover/83673615-288-k2680.jpg)
YOU ARE READING
Mafia. (Jainico)
FanfictionTienen que leer la primera temporada llamada "Soulmates". La pueden encontrar en mi perfil!