Capítulo 38 - ¿Fallar y desaparecer o desaparecer y fallar?

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Aparco el coche cerca de la entrada y me apoyo en el capó del coche encendiendo uno de los pocos cigarrillos que me quedan. Quiero vigilarla, que no se me escape. Seth llega aparcando a mi lado y apoyándose después en mi capó.

- ¿Qué estamos mirando? - pregunta mirando hacia la misma dirección que yo.

- Estoy esperando.

- ¿Una tía? ¿Un intercambio? ¿Un...

- Calla Seth. - le interrumpo. - Estoy esperando a Lena.

- Entiendo. - dice el rubio. - ¿Ya tienes un plan?

- Puede. - confieso dándole una calada a mi cigarro. - Pero no veo otro modo mejor para que me haga caso, que no sea contarle la verdad sobre su padre.

- John... eso es algo duro... - dice Seth pensativo.

- ¿Y qué quieres? ¿Que la rapte? - bromeo serio.

- Bueno...

Aun no entiendo como no se ha dado cuenta de cuándo bromeo y cuándo no.

- No. - sentencio.

Levi, Dick y Kenner llegan en el coche de Levi, aparcándolo también a nuestro lado.

- John... no se lo digas. - me ruega el rubio.

- ¿Qué está pasando? - pregunta Kenner.

- Lena Bennett - aclara Seth.

- ¿Has accedido? - pregunta Levi sorprendido.

- ¿Acaso ya lo sabíais? - les pregunto.

- Necesitaba el apoyo del grupo, por si te resistías ante mi formidable discurso. - confiesa Seth.

Niego con la cabeza ante las ideas de éste.

- Bien, Blacks, tenemos un nuevo pedido. De momento, custodiaremos su casa y le vigilaremos en todos los viajes que realice.

- ¿John y cuándo el periodo que Patrick te dio se cumpla? - pregunta Dick.

- Entonces habrá un cambio de planes, pero hasta el momento y hasta nueva orden, haremos turnos para vigilar a la ovejita... - doy otra calada a mi cigarro y expulso el humo por mi nariz. - La ovejita que acaba de llegar... - susurro consiguiendo que Lena capte la atención de todos nosotros.

Tiro el cigarrillo y lo piso apagándolo, antes de poner rumbo a los adentros del instituto. Todo parecía como en las películas cuando el protagonista camina y segundos más tarde, aparecían todos sus secuaces pero ésta vez, era Lena la que parecía la protagonista y no yo, y eso era algo que verdaderamente me molestaba, no obstante, debía de acostumbrarme.

Contemplamos a la morena con disimulo, apoyados en las taquillas a escasos cinco metros de ella. Debíamos tenerla bien vigilada, todos sabíamos de lo que Patrick era capaz de hacer si se enteraba que no estaba "intentando" cumplir con mi palabra. ¿Qué es la traición? ¿Qué es que un Howell no cumpla con su promesa? ¿Fallar y desaparecer o desaparecer y fallar? Toda la situación empezaba a hacer mella en mí y eso que todo acababa de empezar. Debía estar preparado para todo, tenía que ser el pilar por el que cualquiera de los Blacks pueda sustentarse. Todo tenía que salir perfecto, asique aquí empezaba mi proceso para aprenderme cada movimiento, emoción y reflejo de la morena que tenía delante de mí, separada por apenas unos pasos.

Su postura erguida demuestra que es una chica valiente, en contradicción con sus ojos, cuya mirada perdida hace que provoque compasión en todos aquellos que le miran. Es una lástima la inadaptación que padece y que no es capaz de admitir. Mira su móvil, apartando un mechón de su pelo que cae con delicadeza sobre su rostro, y después, sonríe, dulce, delicada y tímidamente. ¿Qué es lo que estará mirando? Tengo curiosidad.

Seth mueve su mano delante de mí, y le miro rompiendo la visión que tenía de Lena en este momento.

- Tío te estoy hablando. – dice él. Y tras resoplar vuelve a empezar la oración. – Lo que te iba diciendo. Creo que es mejor que le investiguemos en zonas abiertas, aquí estamos llamando la atención de muchas. – dice el rubio tapándose su boca con la mano, consiguiendo que nadie pueda leerle los labios.

- Tranquilo, vosotros solamente acompañadla sin que se dé cuenta, yo me encargaré de lo demás.

- ¿Tú? – dice Seth incrédulo aguantándose las ganas de reír. - ¿Quién se creería eso? ¡Pero si no la soportas! – grita esto último.

- Es cierto John, no puedes engañarnos. – dice Levi quien no puede parar de mirar a las chicas que contonean sus caderas al pasar cerca de nosotros.

- Tranquilos... no puedo meteros tanto en el problema. Soy yo quien he aceptado ese trato.

- Un trato para protegerme a mí. – afirma Dick cabizbajo.

- Es lo que tiene la familia. – digo serio mirando a Dick de reojo.

– Todos tendríamos que compartir tu amarga tortura John, tú harías lo mismo por nosotros. – dice Kenner. – Total, dudo que alguno de nosotros la soporte. – susurra esto último.

- ¡Ahí tienes razón! – dice Levi levantando su mano para que Kenner la choque.

Todos reímos al unísono. Nadie soportaba a la pija de Monte Azul, quien ahora, se convertía en nuestro máximo problema y objetivo.



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Os he abandonado un poquito esta semana pasada, pero he estado liada con los trabajos y eso, además he tenido una pequeña falta de inspiración para unir capítulos y bueno.... en definitiva, aquí tenéis el primer capítulo de la semana.

He de confesar que este capítulo me ha costado más de la cuenta porque... contiene muchos mensajes ocultos que, con el transcurso de la historia podréis descifrarlos (ahí lo dejo, a ver quien lo descubre primero... :P)

Muchos besitos para todos y espero que os guste!! 

John HowellDonde viven las historias. Descúbrelo ahora