Conociendo Hogwarts

Capítulo 49. Estúpido y maldito amor

- No puedes salir con ella.- le dije frunciendo el ceño.

- No puedes impedirlo.

- Frederic es nuestra enemiga.

- Es tu enemiga. Y es mi novia. Voy a salir con ella digas lo que digas.- dijo levantándose.

- ¿Te parecería bien que yo saliera con Ben?- le dije sarcástica.

Se encogió de hombros y se fue.

- Bien.- le chillé antes de que desapareciese del todo.

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Habían sido dos meses muy duros, no lo dudo. Pero el cumple de mis hermanos siempre alegraba la cosa. Aunque fuese Halloween. 

Durante este tiempo no me había hablado para absolutamente nada con Fred. Y cada vez que se nos acercaba con Lakes yo me disculpaba para ir a vomitar y me encerraba en la biblioteca, allí tampoco me encontraría Wood. Los entrenamientos ahora eran algo raros, desde que me besó me confunde continuamente con sus palabras porque no sé si van con segundas o está siéndome sincero, así que también escatimo el tiempo con él.

Todo esto es culpa del estúpido y maldito amor. ¿Para qué demonios existía?

Me encontraba a las nueve de la mañana de un domingo en la biblioteca. Estaba comenzando a parecerme a Isabelle, a veces veníamos juntas. Quizás ella también viene aquí para impedir caer infectada.

Ya llevaba una hora aquí así que decidí ir, con falsas esperanzas, a ver si Atenea había traído alguna noticia de mis abuelos. Echaba de menos a mi osito de peluche particular. Pero sabía que no iba a encontrar nada, los domingos no hay correo.

Ya hacía frío, dentro de nada caerían las primeras nevadas.

Cuando llegué arriba casi lloro al ver la carta en la pata de Atenea. Me acerqué a acariciarla y quitarle la carta. Efectivamente era del Ministerio.

Decidí abrirla sin mis hermanos, cada uno iba a lo suyo y al único al que le interesaba era a Logan, ya lo buscaría a las doce, su hora de levantarse.

"A la atención de la señorita Emma Weasley, nacida Digou.

Se le informa que los instigadores y asesinos de sus padres ha sido capturados y serán juzgados el próximo jueves en el Ministerio de Magia por el mismísimo Ministro de Magia.

También han sido liberados los presos que tenían capturados, entre ellos, sus abuelos. Es de crucial importancia que se'pan que se encuentran en San Mungo recuperándose de sus heridas tanto psíquicas como físicas y podrán ir, usted y el resto de la familia, si la directora, doña Minerva McGongall, les cede permiso.

Un cordial saludo,

auror Peter Turner" 

Me senté en la escalera y lloré de felicidad. El abuelo había sido rescatado. Estaba en el hospital pero había sido rescatado y ahora estaría a salvo.

Cuando acabé de llorar fui corriendo al despecho de McGonagall, estaba reunida con Harries, no sé qué estarían hablando pero tuve que esperar un buen rato y el director adjunto salió enfadado. Cuando entré le entregú la carta a McGonagall.

- Supongo que quieres el permiso para ir a ver a tus abuelos.

- Sería un magnífico regalo de cumpleaños para Cara y Dylan, profesora. Todos nosotros les queríamos mucho.- le aseguré.- Además quiero asistir al juicio de los asesinos de mis padres.