Capitulo 15. Un fin de semana interminable

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Chase me vio entrar y se me acercó:

- ¿Desde cuándo sales con El Niño pelirrojo?- me preguntó sin pelos en la lengua.

- No salgo con nadie y menos con George o Fred, son tabú, ¿entiendes?- le contesté enfadada.

- Pues todo el mundo lo comenta.- contestó él quitándole importancia.

- Pues la gente se equivoca. Que Se meta en su vida y no en la de los demás.- contesté más enfadada.

Pero entonces nuestra conversación fue interrumpida por una pelea. Dyl estaba pegando a alguien y algo me decía que tendría que ver con cierto pelirrojo.

Efectivamente, fue así. Chad corrió a separarlos. Y trajo a Dylan hasta nosotros. Tenía unas magulladuras en las manos y la ceja con un pequeño corte. Pero me giré y vi a George, madre, el estaba mucho peor. Tenía el labio partido y un ojo que mañana estaría muy morado.

- ¿En qué mierda estabas pensado, Dyl? No ha hecho nada, no estamos juntos, no lo estaremos nunca. No me gusta ni me gustará jamás.

- Eso es lo que él dijo, y el motivo de que le pegara.

- Espera, ¿qué?

- Que dijo que no en un millón de años estaría por ti, que eres demasiado egocéntrica y te portas mal con él.- y eso me hizo explotar.

- Pero si le faltó comerme con la mirada en Olivanders. Ah no, si lo hizo, y bien que disfrutó, y en el tren igual. Pedazo de imbecil.

- Siento mucho interrumpir, pero, tenemos que hablar.- el susodicho apareció en escena. Pero la única comunicación que hubo entre nosotros fue mi mano impactado en su mejilla.- De acuerdo, ya sí eso, mañana. Voy a ir a la enfermería, por sí alguien pregunta por mi.- me dijo como sí no estuviera enfadada.

- Tranquilo, nadie lo estará.- le dije con toda mi maldad.

Cabizbajo salió de la sala común para ir a la enfermería. Al salir él vislumbré que alguien me estaba haciendo señas.

Salí y estaba allí James.

- Esto, sé que voy a ser pesado, pero quiero que me devuelvas mis apuntes por favor.- dijo tímidamente.

- Vale, no te preocupes, voy a por ellos espera aquí.

Subí a la habitación corriendo, evitando todo contacto con Teo, Dyl o Chase. Y cogí los apuntes, pero se me esparcieron por el suelo. Cuando los recogía vi mi carta y entonces supe dónde había visto esa letra, era la de James, James Helly, el tímido James al que he enseñado a volar.

Por su culpa George se ha llevado la paliza, el guantazo y un enfado. Por su culpa y por mi hermano, en estos aspectos echo de menos a Logan, muy pasota, me dejaría tranquila seguro.
Bajé con la carta mezclada entre sus papeles y se los dí.

- ¡Dios, podrías cuidar las cos...!- y entonces vio la carta.

- ¿Porqué no me lo dijiste?- pregunté con ganas de acabar con todo esto ya.

- Porque, eres tu, tan inalcanzable, tan perfecta, tan lista, tan adorable... Y por favor deja de hacer eso con la nariz, te pones más mona todavía.

Relajé mis facciones, y no dije nada. Se me había confesado allí mismo.

- Nos vemos mañana.- me despidió dándome un beso en la mejilla. Al parecer no era tan tímido.

Entré por la pintura de la señora gorda. Mirando al suelo. Pobre George, tenía que ir a disculparme. Pero antes buscar a Dyl y decirle que le pidiera perdón.

- De ninguna manera.

- Lo estaba diciendo para que no le pegaras y al final vas y lo haces, es su forma de decir, tu hermana está no es para mi, y no lo haría porque es tu hermana.

- Cuando lo escuche de sus labios, entonces.- odiaba esta faceta de Dyl. La de tipo duro. Mucho.

Bajé a buscar a George a la enfermería, estaba sobre una camilla, y la enfermera le estaba cosiendo el labio. Eso debía doler.

- Hola.- saludé tímidamente.- Tenemos que hablar.

- En cuanto acabe con esto podéis hablar, ¿de acuerdo?- me dijo la enfermera, a lo que asentí y volvió a lo suyo.- Vaya, tu vienes mucho por aquí. Eres una persona que da peligro a los demás.

- No fue culpa mía lo del pollo.- solté.

- Bueno, esto ya está, ponte el hielo en el ojo durante un rato, yo te aviso cuando te lo tienes que quitar.- le dijo ahora a George, a lo que él asintió.

En cuanto estuvo lo bastante lejos, hablé:

- En primer lugar, lo siento, por todo, por el guantazo, por la paliza de Dyl y por haberme enfadado.

- Tenía que hacer ver a tu hermano que esos rumores eran imposibles. Yo te quiero mucho. Pero no nos veo como más que amigos.

- Pues díselo a él, porque él no se lo cree.

- Ya se lo diré.

- Te llevaste la paliza que era de otro, lo siento de verdad, me siento muy culpable.

- No te preocupes, ni si quiera sabes quien es ese tío.- entonces vio mi cara.- ¡Si lo sabes!¿Quien es?

- No te lo puedo decir. El pobre, no está tan fuerte como tu, se moriría con la mitad de los golpes que has recibido.

- ¡George! Menos mal que estas bien.- dijo Fred entrando.- Hola, monada.- dijo refiriéndose a mi.

- Que no me llames así.-dije.- Bueno Geroge, yo me voy yendo, debería estudiar hechizos, por lo menos intentarlo. Nos vemos luego.- y me despedí con la mano.

Cuando iba a mitad de la segunda esclera, alguien tiró de mi brazo frenándome.

- Oye, no te enfades porque te diga monada, es como eres, sólo te lo digo abiertamente.

- Yo a ti no te dijo que eres idiota, podrás contenerte.

- Venga, Em. ¿Y si firmamos una paz?

- ¿De qué va?

- Tú eres más amable conmigo y yo menos pesado y me dejo de apodos.

Sinceramente no me hacia gracia ser amable con los hermanos Weasley, pero si así dejaba de llamarme: muggle favorito, monada, mona y todo eso, merecía la pena así que le estreché la mano.

Dicho esto me fui a mi habitación, pasé el resto de la tarde estudiando hechizos, ya los manejaba bien. Así que me duché y me fui a cenar.

La cena fue rápida, ninguno hablamos, se notaba que George no le había dicho nada a mi hermano. Pero tenía que hacerlo pronto, uno porque no podía aguantar tanta tensión, y dos porque tenía que sobrevivir a esta noche y vivían en la misma habitación.

¿Cómo he podido pasar de tenerle asco a Geroge a defenderlo de esta manera? ¿Dios, que me estaba pasando?

Como nadie dijo nada, Teo y yo subimos a la torre y nos despedimos para mañana a la misma hora.

Por fin, acabó el fin de semana más largo de un curso. Han sido demasiadas emociones, y a causa de estas, me dormí como un bebé toda la noche.

Hey bebés, he vuelto. ¿Me habéis echado de menos?

Espero que sí. Porque ya vuelve Emma para finalizar su gran dramático primer finde en Hogwarts.

Sí os gusta, por favor, votad y recomendar la hostia, Emma quiere que todos vean como es el mundo mágico a través de ojos muggles.

Besos de azúcar,
Andrea 💕

Conociendo HogwartsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora