Capitulo 20. Un cumpleaños

102 13 0
                                    

Y que ya han pasado dos meses. Ya es 31 de octubre. Halloween. El cumpleaños de mis hermanos.

Me levanté antes que de costumbre. Era sábado, mucho mejor. Me vestí con mis pantalones de color caldera, y mi jersey hipster de los mismos tonos. Me recogí el pelo con un moño bonito. Bueno, más bien desperté a Erika para que lo hiciera.

Cuando llegamos, nos dijeron que los chicos no podían subir a las habitaciones de las chicas. Pero, ¿y nosotros las de ellos? Ya estaba dispuesta a todo. Bajé a la sala común, vacía, menos mal, no quería hacer el ridículo. Puse el pie con cuidado en el primer escalón. Y no pasó nada. Fui con mucho cuidado, y pude subir. Eso está bien. Con mucho cuidado de que nadie me viera y con varita en mano, busqué la habitación de los chicos. Entré con mucho cuidado.

Estaba a la derecha, George con todas las sábanas reliadas en sus piernas y la boca abierta, si tuviera una cámara...

A la izquierda estaba Teo muy tapado y roncando. Y el centro, mi hermano, durmiendo con una pierna casi en el suelo y las manos fuera de la manta, como siempre. Cogí carrerilla y salté sobre él. 

Él asustado, me miro.

- Cumpleaños feliz, cumpleaños feliz, te desea tu hermana favorita, cumpleaños feliz.- canté como mejor sabía.

- Buenos días, muchas gracias.- dijo mi hermano con voz ronca y sonriendo con los ojos achinados.

- ¿Te sientes más viejo?

- Un poco, ya no aguanto tus felicitaciones.- dijo con una sonrisa picara.

- Si, estas viejo. No aguantas nada.- dije bajandome de encima de él.

- Espera, ¿cómo has hecho para subir? Esta hechizado.

- Error, esta hechizada la de las chicas, la vuestra no. O por lo menos conmigo no ha funcionado.

- Buenos días al ruiseñor que canta y al cumpleñero.- gritó Teo desde su cama.

- George, despierta.- ese chaval era un tronco.

Abrió los ojos poco a poco y cuando se dio cuenta de mi presencia cayó al suelo.

- ¿Qué haces  aquí? ¿Cómo has subido?

- Buenos días, George, amigo querido.-ironicé.- vuestra escalera no esta hechizada.

- Pfff. Me duele la cabeza.

- Somos el club de los lisiados, es normal que te duela algo.- y entonces cambió su cara de dormido por su sonrisa de siempre.

- Levántame anda.- dijo tendiéndome la mano. Pero al cogerle me caí encima suya, pesa demasiado.

- George, no quiero golpearte el día de mi cumple, sepárate de Em. Enseguida.- dijo Dyl mientras se vestía.

- Yo me voy, os veo en la sala común.

Y tal y como entré salí, muy sigilosa, como un ninja.

Estuve delante del sofá de la chimenea, se notaba el frío ya.

Por fin bajaron, George todavía se frotaba los ojos y Teo bostezaba.

Bajamos a desayunar y rápidamente mi ojos buscaron a Cara. Ahí estaba, con sus amigas reindose.

Corrí hasta ella.

- ¡Cumpleaños feliz, cumpleaños feliz, te desea tu mejor hermana, cumpleaños feliz!

- Muchas gracias, Em.- dijo sonriendo.

- ¿Porqué no me contestas en francés?

- Porque me da vergüenza.- y eso me cabreó. ¿Cómo te puede dar vergüenza el idioma con el que has crecido? Sobre todo si hasta hace dos meses te daba vergüenza hablar en inglés.

Conociendo HogwartsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora