Capítulo LV

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Zanetti supo que había amanecido gracias a la luz que se colaba por debajo de la puerta, el frío se colaba también y ella no podía encontrar otro uso para aquel cuarto más que el de un cuarto de tortura. Pronto se dio cuenta que el movimiento de El Dorado no era como cuando la nave estaba en movimiento: arriba, abajo, arriba, abajo, rompiendo la ola por lo general. Aquel movimiento que ella percibía era como aquel cuando el barco se encuentra anclado: un vaivén apenas perceptible. Demon no tardó mucho en hacerle recordar con quién estaba allí, mandó a un tipo flaco y alto, con muy mal aliento y cabello cano que dijo llamarse Bernie. Ese hombre la miraba lascivamente, la obligó a ponerse de pie y ató sus manos tras de su espalda, luego la llevó a donde estaba su jefe. Gianna descendió del barco a empellones, sólo esperando la hora en que ese desgraciado se decidiera a matarla. Mientras avanzaba se repetía que todo aquello de que su madre y su abuelo estaban involucrados en el robo de la hija de la amante de su padre simplemente no podía ser cierto; ella necesitaba creer en algo, aunque en el fondo ya sabía que era verdad. Lo que no sabía era cómo iba a afrontarlo, a superarlo, si es que salía viva de allí. Se distrajo tratando de observar el paisaje. A pesar del frío, aquello era hermoso: arena blanca, muchas palmeras que empezaban donde terminaba la playa, una playa extensa que quizás en otra época del año podía ser paradisíaca. Demon se encontraba al lado de una fogata que habían hecho para él sus hombres, habían cazado algo que se asaba en aquella fogata para la comida y Gianna dedujo que se trataba de un cerdo salvaje, la verdad es que olía muy bien, especialmente porque tenía ya dos días sin probar bocado. Bernie la aventó frente a Demon, éste sonrió y dijo:

—Si no habla con golpes, veremos si el hambre la dobla.

La verdad es que Gianna se encontraba hambrienta pero no quería ceder, no iba a ceder y ya lo tenía decidido. Costaba creer que en alguna época Demon había compartido fiestas con su familia y que había sido un hombre de bien. Lo miró fijo a los ojos, buscando, sin pedirlo, un poco de clemencia. Quería un poco de agua, un poco de tacto, no ser tratada como cualquier prisionero. En un determinado momento, perdida en el azul de los ojos fríos de Demon, pensó que el pedir otro trato para ella era una tontería porque en ese momento renunciaba a su apellido, dejaba de ser una Zanetti para ser simplemente, Gianna. Se puso de pie con gran esfuerzo y se acercó un poco más al fuego, quedando frente a Demon.

—¿Sabes?—dijo sonriendo.—Puedes hacer lo que quieras porque de hoy en adelante, no soy mas una Zanetti. He decidido olvidar mi pasado, mis familiares y todo lo que tenga que ver con esas personas...

Demon se puso de pie y se acercó rodeándola lentamente, escudriñándola con su mirada, odiándola tanto como había odiado a su padre, a su madre.

—Sé que estarás pensando que eso a ti no te importa nada—dijo ella respirando profundo,—pero he de decirte que también la información que tengo de tu nieta, la voy a borrar.
—¡No sin antes decírmela!—
gritó Demon tomándola del cuello.
—Te equivocas—dijo pateando su entrepierna con fuerza.

Tras aquel estúpido acto, Gianna corrió pero no había avanzado ni un par de metros cuando uno de los hombres de Demon le metió el pie y cayó comiendo arena. Demon se abalanzó sobre ella como si fuera otro hombre, ella sintió su peso y como sus sucias manos le daban vuelta. Trataba de zafarse pero con las manos atadas, cualquier esfuerzo era en vano.

—¡Déjame en paz!—dijo tratando de respirar con su enorme cuerpo sobre el suyo.
—¡Vas a hablar ahora! ¿Qué sabes de mi nieta?—preguntó él mostrando su cuchillo.
—¡Ni en mil años!—gritó.— ¡Mátame de una buena vez pedazo de porquería! ¡Tu hija era una cualquiera, por eso se acostaba con mi padre aun sabiendo que era casado y tu nieta, siguiendo el ejemplo de su madre, es igual!
—¡Cállate!—
gritó él golpeando el delicado estómago de la muchacha con mucho odio.— ¡No sabes nada de ellas!
—¿No? ¡Incluso tu querida Jeannette era como ellas!—
gritó retándolo a matarla de una vez.

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⏰ Última actualización: Apr 07, 2017 ⏰

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