SAGA TURQUIA # 4
Este es el trato.
Estaremos casados por dos años, al cabo de ese tiempo tu saldrás de mi vida y la de mi hija para siempre.
Te advierto Jamás intentes enamorarte de mi
No esperes de mi deseo o alguna muestra de afecto.
No pretenda...
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La casa de Khan estaba a 15 minutos de allí, ubicada también en una buena zona, era muy hermosa.
Al entrar un diligente mayordomo, una mucama, una niñera y la cocinera salieron a su encuentro.
- Bienvenido Señor y Sra Kemal.- les saludo el mayordomo y los otros sirvientes estaban ecpentantes.
- Gracias Amir- correspondió Khan al asaludo.
Amir era el mayordomo de la casa de sus padres y al saber que vendría, su padre le había cedido para que lo atendiera y le ubicase el personal que necesitaba.
- Me presentas al resto del personal- indico refiriéndose a las tres mujeres que estaba en fila india, y les dirigían unas miradas muy respetuosas.
- Si señor, - acordó Amir todo ceremonioso también- esta es Annieta, es la mucama, Hamira, la cocinera y esta joven es Sumira, la niñera para su hija.
Las mujeres hicieron una venia en señal de respeto
- Estamos para servirle.- apunto la cocinera, una mujer regordeta, con una mirada muy dulce, ya Shaina sabia que se llevarían muy bien, además que personalmente le pediría que le ayudara a preparar algunas recetas para ella sorprender a Khan. Recordando lo que su madre siempre decía "al hombre se le conquista por el corazón", lo cual le había servido mucho a su hermana Hana.
- Gracias. - Respondió sin emoción Khan, pero Shaina como siempre fue como era ella, toda amabilidad y alegría y puntualizo.
- Gracias a ustedes.
Sophia empezó a llorar, ya sin duda urgida por una cama y Sumira le dijo
- Puede dármela, la llevare a su cuarto.
Shaina le entrego a la niña que de inmediato al descubrir un nuevo rostro, se extasió en detallar a la joven niñera.
- Nosotros también nos retiramos, cualquier cosa que necesiten, no duden en llamarnos.- indico Hamira.
- Asi lo haremos- puntualizo Shaina con una sonrisa cordial.
Al retirarse la servidumbre, Shaina arremetio contra su serio y poco expresivo esposo.
- Tu siempre tan serio.
Shaina obtuvo ahora toda la atención de Khan, quien la miro con frialdad 'para decirle.
- ¿Me estas cuestionando Caliskan?.
- Nada te va a pasar por demostrar un poquito mas de amabilidad.- indico ella virandole los ojos.
- Asi soy yo.- gruño el.
- Amargado y malgeniado.- resoplo ella.
- Nunca mas vuelvas a resoplarme Caliskan- le advirtió pero ella hizo caso omiso y refuto.
