Capítulo 67"Piscina"

833 33 14
                                    

Narra Sarah:

Hacia calor, unos treinta grados aproximadamente hacia en Los Ángeles, y es por ello que estábamos en el jardín,mi madre y yo, tomando el sol mientras que los niños jugaban alegres en la piscina.
El bronceador cubría la mayor parte de mi cuerpo y empezaba a hacer el efecto, en cualquier momento tendría un buen color que provocaría miradas celosas de mis vecinas.
Usaba mi bikini blanca, me gustaba para usar en verano y hoy me había decidido en provocar un poco a mi chica que se encontraba haciendo un agujero en el césped para arreglar una cañería.
Le había dicho que podíamos llamar a alguien, que sepa del tema,pero el gastar dinero a la bartola no le apetece en absoluto.
También se encontraba Patricia ayudándola mientras usaba otra pala y pico. Sus cuerpos estaban cubiertos de sudor y tierra,ensuciando así sus blusas sin mangas pegadas al cuerpo cada vez que se movían.

—¡Oh cielos!,¡que buen manjar estoy viendo!—Exclamó mi madre por lo bajo y la quedé mirando.

Levanté mis lentes y los dejé sobre mi cabeza, provocando su risa.

—¿Qué?,¡ay vamos Sarah!, no finjas que no te gusta lo que ves, además se ve cuan buena están, no te culpo —Susurró de cerca y me reí.
—¡Mamá!,¡esos comentarios están fuera de lugar!—Respondí entre risas y ella se cubrió el rostro con la revista.

De pronto se acercó Patricia y levanté la mirada de mi libro.

—Sarah ¿sabes dónde está la llave maestra?,mi hermana necesita de ella con extrema urgencia—.Preguntó un poco nerviosa por como me veía y señalé a mi izquierda, volviendo mi mirada al libro que leía con mucho gusto.
—Está en el taller,encima de un mueble—Respondí rápidamente y escuché un agradecimiento por lo bajo.
—¡Ese paquete como se le marca!,¡Dios!,¡ella se estaba babeando por ti!—Escuché decir a mi madre y la miré con las cejas levantadas.

Le quité la copa y olfatie el contenido.

—Deja de tomar ese licor, te está provocando decir cosas incoherentes —Comenté molesta y dejé la bebida en el piso.
—Uff hace mucho calor y no puedo más, creo que iré a la piscina con los niños —Soltó sonriente mientras se quitaba el toallon de la cintura.

Caminó sexymente hasta la piscina y se metió a jugar con mis hijos,que tanto adoran a su abuela.
Sonreí al recordar sus palabras y miré a mi esposa renegar en buscar una solución a ese caño que estaba roto.
Tomé la jarra y serví limonada con hielo en un vaso y me levanté para acercarmele y darle de tomar.

—Toma amor,ya deja eso,déjame llamar a Ruben —Comenté entre dientes mientras la veía tomar como sedienta de aquél vaso.

Negó con la cabeza y escupió al costado provocando mi ceño fruncido.

—Te he dicho que no quiero gastar dinero en tonterías, estoy juntando para pagarle el colegio a los niños,ya sabes que quiero que tengan una buena educación —.Respondió mientras se frotaba la frente—¿Dónde está Patricia?.
—Lo sé amor,y te estoy ayudando con mi trabajo los fines de semana,ten calma.Tu hermana está en el taller buscando la llave,quizás no la encuentra,iré a ver en que la puedo ayudar—.Susurré sobre su boca antes de robarle un beso.

Me giré y empecé a caminar hacia el taller. Y pensaba ayudar a Patricia, pero no la encontraba por ningún lado, hasta que escuché un gemido y me quedé dura al saber de que se trataba todo aquello.

—Cielos,no ahora—Escuché susurros y me fui adentrando más por el pasillo.

La luz tenue fue iluminando a una persona,con los pantalones a medio muslo, frotando su mano sin cesar por encima de su bóxer, dándome una vista de su prominente erección.
Ahogué una exclamación e intenté irme,pero mi pié tocó algo e hizo ruido provocando la mirada de ella.
Me había descubierto y no sabía como excusarse,me giré y empecé a caminar lejos de aquél lugar,realmente era una mala situación.

Una vez fuera me encontré con la mirada de Pao que estaba envuelta con un toallon al rededor de su cuello después de haberse refrescado un poco.
Me senté en mi silla y me puse los lentes oscuros al instante, temiendo una de sus preguntas.

—¿Has visto a Patricia?—Preguntó con curiosidad y levanté los hombros.
—No la ví,supongo que debe estar en el baño—.Respondí sin levantar la mirada del libro, que estaba leyendo hace rato.

BOXEADORA 4'ta Temporada©™Completa Donde viven las historias. Descúbrelo ahora