Capítulo 71"Si tú mueres,yo igual"

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Mi mano temblaba a causa del nerviosismo que estaba sufriendo y sabía que estaba dispuesta a disparar en cualquier momento.
Sabía que algo malo le ocurría a Sarah y por fin lo iba a averiguar.Sus manos frotaron mis hombros y luego acarició mi mejilla,provocando mi mirada angustiada.

—Por favor, tranquílizate, nada va a cambiar el hecho de lo que ya pasó —Sarah susurró con ojos llorosos y sollocé al oír la risa de mi hermana.
—¡No mientas,se que te gustó!—Patricia exclamó divertida y miré a mi esposa con vista borrosa.
—¿Es eso cierto?,¿te gustó acostarte con ella?,¡joder es mi hermana!, ¡y no te importó siquiera pensar en mi!—Grité furiosa mientras lágrimas caían a borbotones.

Intentó tomar mi mano y la empujé contra la pared, mis dedos se aferraron con fuerza a su brazo y empezó a llorar de dolor.

—¡No Pao!,ella está mintiendo, quiere hacer de todo por separarnos, yo sabía que era mala idea que vuelva,¡cometimos un error!—Sarah se defendió angustiada y apreté mis puños.
—Cuéntale como gozaste, admite que ella no te da lo mismo—Escuché decir a Patricia y me giré de golpe.
—¡Tú cállate la boca!,¡ya no quiero oírte hablar!,¡no me interesa nada de lo que tengas que decir!, ¡te odio!, ¡te detesto!, ¡eres pura agonía en mi vida!,¡no te mereces el amor de familia!¡ni siquiera de tener a Julieta!—Grité alterada mientras me acercaba a punta de pistola.
—Ella se lo buscó, es una buscona, me dejó caliente y a mi nadie me rechaza.Si alguien juega no se debe retirar hasta que termine,y yo Paola he decidido terminar con el juego—Mi hermana respondió con la cabeza en alto y miré a Sarah que estaba hecha bolita en el piso sentada contra la pared.

Su rostro estaba bañado en lágrimas y sollozó mientras me miraba con labios temblorosos.
Fruncí el ceño y me largué a llorar por ella,por mi y por todo lo que tuvo que aguantar sin mi presencia.

Respiró hondo y sollozó mientras mantenía la mirada fija en sus piernas,que antes no había visto los moretones.

—Luego de la tontería que pasó en el desayuno,decidí hablar con ella y decirle que como mujer tuya debía respetarme,que lo que pasó fue solo una equivocación, un juego estúpido y que me arrepentía.
Le había dicho que por favor ya no intentara nada conmigo porque soy una mujer casada y que su hermana es la dueña de mi corazón.
Patricia intentó seducirme nuevamente con palabras y me negué rotundamente, no quería saber nada de ella y me mantuve firme hasta el final —Comentó angustiada mientras me veía.

Froté mi mentón y ma obligué a tragar saliva.

—¿Y luego qué pasó?—Pregunté temerosa y la vi levantarse del piso.Se quitó la blusa y quedó en brasier.

Su cuerpo estaba lleno de moretones,mordeduras y algunos raspones hecho con cosas filosas.

—Y luego...ella abusó de mi—Sollozó y miró a su madre con vergüenza, antes de volver la mirada a mi—es por eso que no quería que me tocaras,no quería que me besaras, porque me he sentido muy mal,y siento que fue mi culpa. Debí contarte desde un principio como ella me decía cosas para llevarme a la cama,intenté ser adulta y tomar mis propias decisiones,creí controlar la situación pero ya ves,nunca consigo algo bueno—.Sarah respondió angustiada mientras se cubría el pecho con la blusa.

Mis labios comenzaron a temblar y sollocé mientras me cubría el rostro. Podía escuchar las risas burlistas de Patricia y me giré a verla con mucha amargura, tristeza acumulada y exceso de furia incontrolable.

—¡Pero lo disfrutó la puta de primera,que no se queje!—Soltó altanera mientras reía y le di un puñetazo en la nariz.

Apunté a su zapato y disparé, provocando sus gritos mientras se tiraba al suelo.
Me puse encima de ella y comencé a golpearla sin descanso,tres, cuatro,hasta cinco veces sin cesar,hasta que apunté a su frente.

—No debería haber confiado en ti,eres como mi maldición, si tú mueres yo moriré, porque es ley de gemelos hermanos que así sea,en cambio vas a acordarte de mi toda la vida, nunca más vas a acercártele a una mujer, se burlaran de ti y te señalarán en la calle.Y vas desear nunca haberte metido con mi esposa,con mis pequeños y sobre todo conmigo, porque desde éste instante se te acaba todo lo bueno y dudo mucho que quieran a una discapacitada en boxeo profesional—Dije angustiada viendo como de estar sonriente se transformaba a seriedad total.
—¿Qué?,¿qué harás Pao?,¡no hermana! ¡por favor!—Suplicó Patricia entre llanto y me levanté al instante.

Me alejé un poco y apunté a sus bolas,jale el gatillo y gruñi mientras le disparaba.
Gritos desgarradores llenaron el pasillo y me alejé agitada,viendo todo dado vuelta.

—¡Maldita!,¡llama a una ambulancia!,¡me desangro!, ¡mis bolas! ¡Oh dios!,¡duele!—Gritó sin cesar mientras yo me iba sosteniendo de las paredes para no caerme.

Sentí las manos de Sarah envolverme y me empezó a hablar,asustada de mi rostro colorado.
Solté el arma al suelo y me apreté el estómago para devolver todo lo que me guardaba.
Podía ver las sirenas titilar fuera de casa y me acosté sobre las piernas de Sarah,su manos frías acariciaron mi rostro y pidió ayuda entre gritos y llanto.

Podía ver las sirenas titilar fuera de casa y me acosté sobre las piernas de Sarah,su manos frías acariciaron mi rostro y pidió ayuda entre gritos y llanto

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