La historia sigue la relación de Lena,Paola y sus hijos,Gabriel y la pequeña bebé Lara.
Su nueva familia estará llena de amor,comprensión y muchas sorpresas, así como el apoyo mutuo para cumplir sueños.
Por otro lado estará narrada la histor...
Hoy tocaba llevar al médico a Julieta porque había agarrado fiebre hace una hora y al no bajarle estamos muy asustadas. Aquí estoy hablando con el médico sobre los cuidados que hay que darle por el otoño que se aproxima.Está muy contento de poder charlar con nosotras a la vez que le explica a mi esposa como debe reaccionar en casos así. No sé si es la edad o es el embarazo lo que la tiene tan enojona,celosa y melancólica por todo. ... Una hora más tarde luego de acostar a los niños,despedir a mis suegros y de guardar la comida sobrante en la heladera,me giré a verla. Sus hombros hacia atrás, la espalda recta apoyada contra la pared y sus manos estirar con fuerza su camisa,era lo que más me ponía nerviosa.Era uno de sus tantas escenas de celos y malos entendidos.
—¿No te he dicho que no vallas a la casa de esa perra?—Sarah dijo angustiada y suspiré mientras me quitaba mis lentes. —Es la mamá de Gabriel y aunque no te guste tengo que ir a visitarlo.Es mi responsabilidad —.Respondí mientras me frotaba los ojos.
Hizo unos pasos y apoyó las manos en la mesada.
—Lena es una desquiciada y puede dañarte—.Comentó entre dientes y resoplé cansada de tener la misma conversación. —Ella está medicada,su madre la cuida y compartimos custodia con Gabi porque él no quiere venir a vivir conmigo—.Susurré con ojos llorosos y suspiré.
Se tiró el cabello hacia atrás y abrochó el último botón de su camisa blanca.Se la veía cansada y seguramente agotada de tantos gritos que los niños nos habían regalado debido a la fiestita con sus compañeros. Se limpió una lágrima rápidamente y miró hacia la ventana.Afuera la tormenta no cesaba y temíamos quedarnos sin electricidad. Caminé hacia donde estaba y puse mis manos en sus caderas,provocando su mirada.
—Solo voy de visita para estar con mi hijo, al cual amo mucho. No pienses ningún segundo que te dejaré por ella,debes confiar en mi.¿Puedes hacerlo?—Pregunté en voz baja y asintió con ojos llorosos. —Está bien Pao, solo quiero cuidarte, eres muy importante para mi y lo sabes.Todos los días estoy al pendiente que entres por aquella puerta y me beses.Quiero lo mejor para ésta familia y que estés sana es lo más hermoso que tengo —.Respondió angustiada y la abracé con fuerza.
Besé su frente y acaricié su cabello.
—Tranquila amor,tienes que estar serena,¿de acuerdo?,no te lo digo yo,fue el doctor quien te recetó una tranquilidad absoluta debido a que éste embarazo es riesgoso.Y te dije que no quería verte sufrir—Comenté mientras sentía un nudo formarse en mi garganta.
Apoyó su cabeza en mi pecho y suspiró.
—No iba a hacer algo así Paola,no tiene la culpa de nada.Y descuida que todo saldrá bien,solamente te pido que seas positiva.Los médicos siempre dirán lo malo de uno—.Dijo entre dientes y se alejó. —Pero lo has escuchado, él teme que algo ocurra,puede ser hoy o mañana,no se sabe como tu cuerpo valla a cambiar. La culpa es mía, debí tomar recaudos y me siento tan mal—.Sollocé y luego froté mis mejillas. —Estoy cansada que me tomes por una inútil, te tienes que hacer responsable y saber la próxima vez que para algo sirven los preservativos —.Comentó altanera y me alejé a verla con enojo. —¡Me hago cargo,soy responsable y hago lo mejor que puedo por ésta familia.No soy como mi maldita y estúpida hermana!—Exclamé furiosa mientras la señalaba.
Respiró profundo y luego su puño se estrelló en mi pecho.
—No me trates así, solo estoy sensible cárajo—Susurró para luego abrazarme.
Quité sus manos y salí de la cocina. Caminé por el pasillo y entré a la habitación. Me quité la ropa y proseguí a sacarme el reloj que apretaba mi muñeca. Estaba enojada, dolida y cansada de siempre tener que salir perdiendo en las discusiones. Escuché cerrarse la puerta y puse la espalda derecha.
—Estás así porque decidí seguir con el embarazo y no haberme quedado con la única solución que me daba el doctor, un aborto —.Sarah dijo angustiada y me giré a verla. —Si algo te ocurre,si algo llega a pasarte estaré con mi conciencia dañada por lo que me resta de vida. No me pidas que me calme,porque estoy asustada —.Comenté entre dientes y se acercó. —Vamos a dormir, que mañana nos toca hacer ese viaje a la casa de mis padrinos—.Soltó seriamente dando finalizada la discusión.
La vi acomodar las almohadas y como abría las sábanas y poder así acostarnos a dormir. Una vez más Sarah había ganado.
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